Terciados y exigentes novillos

La novillada de Fuente Ymbro no respondi¨® a las expectativas en cuanto a presentaci¨®n; muy terciados los seis ejemplares, carentes de trap¨ªo y cara para una plaza de esta categor¨ªa. Ni el toro-toro al que se enfrentaban hace un par de a?os los noveles, ni estos novillotes con semblante de no haber roto un plato.

Chiquitos, pero matones, eso s¨ª. Todos, en mayor o menor medida, cumplieron en varas, dieron muestras de la fortaleza que proporciona la juventud, desarrollaron movilidad y acudieron con presteza a los enga?os, prueba fehaciente de que la casta era un ingrediente de su sangre brava.

En consecuencia, no fue una novillada d¨®cil ni de carril; por el contrario, muy exigente con los novilleros ¡ªlos tres sufrieron volteretas¡ª y les pidi¨® el carnet del oficio, la entrega, el valor y la actitud de los toreros de verdad.

Y los tres ¡ªtriunfadores en esta plaza en lo que va de a?o¡ª afrontaron el compromiso con gallard¨ªa, aunque con resultado diferente. El m¨¢s perjudicado fue el mexicano Isaac Fonseca, que se lleva un mal recuerdo de su ¨²ltima comparecencia en esta plaza antes de tomar la alternativa, prevista para el 12 de agosto en la plaza francesa de Dax. Fue volteado y herido en el inicio de faena de muleta en su primer novillo, el ¨²nico que pudo matar. Patale¨® con todas sus fuerzas para deshacerse de las asistencias cuando ya lo trasladaban a la enfermer¨ªa y con una cornada en la pierna derecha y una posible fractura de la mand¨ªbula. Volvi¨® a dejar claro que quiere ser torero por encima de todo. As¨ª, ofreci¨® una lecci¨®n de buen oficio y hondo manejo de los enga?os, basada en un desbordante esp¨ªritu de lucha suficiente para superar las dificultades de sus oponentes. Con la paliza de la tremenda voltereta en el cuerpo y las heridas, Fonseca sali¨® victorioso de una ardua pelea que le plante¨® el bravo y encastado novillo de Fuente Ymbro.

Otro que tampoco se podr¨¢ levantar de la cama esta ma?ana es V¨ªctor Hern¨¢ndez. Sali¨® por la Puerta Grande el pasado 27 de marzo, d¨ªa de su presentaci¨®n en esta plaza, y a punto estuvo de repetir la gesta, impedida con buen criterio por el palco presidencial. Mat¨® tres novillos, demostr¨® sobradamente que es valiente y le adornan buenas maneras y gusto como torero, pero hubiera sido un desprop¨®sito tama?o galard¨®n porque su labor de conjunto no dio para tanto.

No se podr¨¢ levantar esta ma?ana porque su primer novillo le propin¨® dos volteretones de ¨®rdago de los que, misteriosamente, sali¨® ileso; pero es que tambi¨¦n mordi¨® el polvo cuando recib¨ªa a la ver¨®nica al cuarto, y este a¨²n tuvo tiempo de golpearle la rodilla izquierda minutos m¨¢s tarde.

En el novillo que abri¨® plaza se estren¨® con una ce?ida larga cambiada de rodillas al hilo de las tablas, inici¨® el ¨²ltimo tercio por estatuarios y un pase cambiado, con la planta erguida y quieta, y se luci¨® al final, repuesto aparentemente de las dos palizas, con un manojo de excelentes naturales. Con las rodillas en tierra, en el centro de anillo, comenz¨® la faena de muleta en el cuarto, otro exigente novillo, con el que volvi¨® expresar su buena concepci¨®n por naturales, y ante el sexto no acab¨® de acoplarse a las desordenadas embestidas de su oponente, pero mat¨® de una estocada de efecto r¨¢pido y sus muchos partidarios pidieron un trofeo que, con buen criterio, no se le concedi¨®.

Tambi¨¦n Diego Garc¨ªa se llev¨® un susto sin consecuencias en un quite por chicuelinas al cuarto, pero su actuaci¨®n no estuvo a la altura de lo esperado; muy destemplado y superficial ante el novillo que sali¨® en segundo lugar, y por debajo tambi¨¦n de la movilidad del quinto.

Un d¨ªa m¨¢s brillaron algunos miembros de las cuadrillas: ?ngel Otero e Iv¨¢n Garc¨ªa se lucieron con el capote y las banderillas, tercio en el que tambi¨¦n destacaron Diego Valladar, Ra¨²l Ruiz y Jes¨²s Robledo Tito.