Muere a los 96 a?os Kenneth Anger, realizador de cine ¡®queer¡¯ y ocultista, y escritor de los libros de cotilleos ¡®Hollywood Babilonia¡¯

Fue un enorme fabulador. En el cine, en los libros, incluso a la hora de recordar su vida. Y tambi¨¦n un creador adelantado a su tiempo y a la vez muy del siglo XX. Este mi¨¦rcoles ha fallecido a los 96 a?os Kenneth Anger, ha anunciado la galer¨ªa de arte Spr¨¹eth Magers (con sedes en EE UU y Europa), donde hab¨ªa expuesto sus ¨²ltimos trabajos, y sin dar m¨¢s datos de su muerte. En Anger convivi¨® el cineasta experimental apasionado del cine ocultista, que abri¨® camino a nuevas generaciones de directores queer, como John Waters, o apasionados por lo on¨ªrico en la pantalla, como David Lynch, o de las im¨¢genes turbadoras, como Gaspar No¨¦, con el escritor que hizo negocio de desvelar y hacer ficci¨®n de los secretos m¨¢s turbios y, si eran depravados, mejor, de las estrellas de la ¨¦poca dorada del cine estadounidense en los dos vol¨²menes de Hollywood Babilonia, libros que se vendieron por todo el mundo y de los que no lleg¨® a hacer una tercera parte ¡°por miedo a las demandas de quienes sigan vivos¡±, contaba en una charla con EL PA?S.

Hoy, el eco de esos libros se pierde ante las redes sociales, que desvelan los secretos al segundo. Un ruido que deviene en negocio con la web TMZ. Pero antes de TMZ existi¨® Kenneth Anger. Supo inventarse y reinventarse: nunca fue actor infantil, aunque as¨ª lo contaba en las entrevistas. Pero s¨ª fue de los primeros directores de cine psicod¨¦lico y queer. Apasionado del ocultismo, por su pasi¨®n por Aleister Crowley y la m¨²sica rock, piezas como Invocation of My Demon Brother (1969), Lucifer Rising (1972) y The Man We Want to Hang (2002), han influido, especialmente las dos primeras y Scorpion Rising (1963), en generaciones posteriores tanto de realizadores de v¨ªdeos musicales y artistas arietes del cine guerrilla.

Anger naci¨® como Kenneth Wilbur Anglemyer en Santa M¨®nica (California) en 1927. El cine aliment¨® su vida. Nieto de una reputada dise?adora de vestuario del cine mudo, contaba que a los cinco a?os hab¨ªa hecho de pr¨ªncipe en Sue?o de una noche de verano (1935), de Max Reinhardt, mentira que se vino abajo con las nuevas restauraciones del filme. Su instituto estaba pared con pared con los estudios de la Twentieth Century Fox, y desde sus ventanas espiaba los rodajes. Ya entonces Anger dirig¨ªa pel¨ªculas caseras, como Ferdinand the Bull (1937) o Who Has Been Rocking My Dreamboat (1941), que ¨¦l defini¨® como su primer trabajo decente. En un pase de pel¨ªculas experimentales conoci¨® a Curtis Harrington, uno de los pioneros del Queer Cinema estadounidense. Con ¨¦l, Anger dio dos pasos que cambiaron su vida: juntos fundaron una productora para sus pel¨ªculas, Creative Film Associates, y Harrington le descubri¨® la figura del brit¨¢nico Aleister Crowley y su teor¨ªa filos¨®fica Thelema.

Crowley fue uno de los primeros pensadores occidentales en importar filosof¨ªas orientales, en un c¨®ctel de m¨ªstica budista, yoga y alucin¨®genos, al que, felices, se apuntaron a?os despu¨¦s los rockeros (Crowley sale en la portada del Sgt. Pepper¡¯s Lonely Hearts Club Band de The Beatles). Sin embargo, debido a que Crowley invocaba demonios que requer¨ªan sacrificios de sangre, a pesar de que se burlaba de la magia negra, sus sucesivas generaciones de seguidores alteraron sus textos y ense?anzas tras su muerte, en 1947, convirti¨¦ndole en el gran satanista. Toda la obra f¨ªlmica de Anger qued¨® marcada por Thelema y su pasi¨®n por la imaginer¨ªa cosmog¨®nica egipcia.

Durante sus a?os en la universidad de Southern California descubri¨® su homosexualidad y la plasm¨® en Fireworks (1948), filme con momentos er¨®ticos por el que fue detenido, ya que en aquellos a?os en EE UU la homosexualidad era un delito. Anger se mud¨® a Par¨ªs y all¨ª se hizo amigo de Jean Cocteau y trabaj¨® en la Cinemateca francesa. Sigui¨® filmando (¨¦l recuerda esa temporada, que incluy¨® una estancia en Roma, como de las m¨¢s felices de su vida). En 1954 film¨® Inauguration of the Pleasure Dome, otro mediometraje thelemita y se mud¨® con el sex¨®logo Alfred Kinsey, la figura paternal que siempre ech¨® en falta. Tras la muerte de Kinsey se asent¨® en Par¨ªs. Deprimido y sin dinero, reuni¨® y colore¨® los rumores y las historias contadas en voz baja que hab¨ªa escuchado durante d¨¦cadas y en 1959 public¨® en Francia Hollywood Babilonia, un compendio de carnaza, sexo, asesinatos, ¨ªdolos ca¨ªdos y regodeo en el barrizal de las cloacas de lo que ¨¦l mismo llamaba el bulevar de los sue?os truncados.

Hay que reconocer que el libro, que no se edit¨® en EE UU hasta 1974, fascina tanto por su material como por su estilo ampuloso y su habilidad para subrayar el detalle escabroso. Durante las siguientes d¨¦cadas, Anger vivi¨® de las rentas del libro, de becas de fundaciones para realizar cine experimental y de amigos como Mick Jagger, Jimmy Page o Keith Richards. De 1982 a 1999, Anger se retir¨® del cine, que no del cotorreo: en 1984 public¨® Hollywood Babilonia II.

Recuper¨® la c¨¢mara en este siglo para filmar The Man We Want to Hang, en la que sencillamente rueda pinturas de Aleister Crowley expuestas en una galer¨ªa en Londres, como despedida de su gu¨ªa vital. Y se despidi¨® del arte con Elliott¡¯s Suicide (2007), tributo al m¨²sico Elliott Smith, y con Mouse Heaven (2005), 11 minutos de im¨¢genes de Mickey Mouse y de su memorabilia, que Anger adoraba. En total, su filmograf¨ªa suma 36 cortometrajes y ocho horas de duraci¨®n.

En un caj¨®n dec¨ªa que guardaba Hollywood Babilonia III: ¡°Hay un apartado entero dedicado a Frank Sinatra y sus problemas con las drogas. No pude publicarlo en la segunda parte porque Sinatra estaba vivo y era violento y vengativo. Si todav¨ªa no ha salido el libro es porque un cap¨ªtulo est¨¢ dedicado a la Iglesia de la Cienciolog¨ªa, un culto que considero peligroso¡±, contaba en 1999 para EL PA?S en un homenaje en el festival de Gij¨®n. Aunque tambi¨¦n analizaba el cambio de moralidad: ¡°Antes, quienes comet¨ªan esos pecados jam¨¢s volv¨ªan a trabajar, y ahora los ejecutivos parecen perdonar los delitos, quiz¨¢ porque ellos tambi¨¦n los cometen¡±. Y contaba, disfrutando, historias como esta: ¡°Los estudios Warner casaron en 1925 a la estrella que les salv¨® de la bancarrota, el pastor alem¨¢n Rin tin tin, en una espectacular ceremonia envuelta en los fastos m¨¢s incre¨ªbles de la ¨¦poca, que inclu¨ªa trajes de novios y cama matrimonial, con una perra que result¨® ser hermana suya, de la misma camada¡±. Por todo su pasado, Anger se defin¨ªa como ¡°un poeta del cine y detective de archivos¡±.