Mentiras descaradas
El historiador Antony Beevor responde a un bulo que circula sobre ¨¦l en Espa?a y muestra su preocupaci¨®n por la enorme repercusi¨®n de las noticias falsas
En un momento de preocupaci¨®n por la Inteligencia Artificial, resulta aterrador que las vergonzosas invenciones de los a?os treinta vuelvan a estar con nosotros. Hitler y Goebbels estaban dispuestos a inventarse cualquier historia para la propaganda nazi. Como Stalin y sus ac¨®litos, cre¨ªan que cuanto mayor fuera la mentira, mayor ser¨ªa el efecto. Esto fue particularmente cierto durante los juicios de Mo...
En un momento de preocupaci¨®n por la Inteligencia Artificial, resulta aterrador que las vergonzosas invenciones de los a?os treinta vuelvan a estar con nosotros. Hitler y Goebbels estaban dispuestos a inventarse cualquier historia para la propaganda nazi. Como Stalin y sus ac¨®litos, cre¨ªan que cuanto mayor fuera la mentira, mayor ser¨ªa el efecto. Esto fue particularmente cierto durante los juicios de Mosc¨², cuando Stalin acus¨® a viejos bolcheviques de ser nazi-trotskistas. Mientras tanto, Hitler y la derecha nacionalista se convencieron a s¨ª mismos, en una deliberada confusi¨®n de causa y efecto, de que los jud¨ªos y la izquierda hab¨ªan apu?alado por la espalda la Alemania del Kaiser con su revuelta contra la guerra en 1918.
Aunque a un nivel mucho menos letal, me qued¨¦ literalmente sin palabras al o¨ªr que la siguiente declaraci¨®n circulaba en Espa?a y se me atribu¨ªa [el exdiputado de Vox Iv¨¢n Espinosa de los Monteros la reprodujo en su cuenta de Instagram en 2020, aunque ha vuelto a circular este mes de septiembre]. ?No era mi estilo, ni mis palabras y definitivamente no eran mis pensamientos! De hecho, era el desvar¨ªo de un extremista nacionalista cuyas actitudes considero deplorables.
¡°Como afirma el m¨¢s prestigioso historiador de las guerras modernas, el ingl¨¦s Antony Beevor: Hoy, estos canallas frente populistas desentierran a Franco, y ustedes se callan; ma?ana aceptan oleadas de inmigrantes que arruinar¨¢n su vida, su cultura y su modo de vida, y ustedes se callan; el otro d¨ªa pactan con separatistas y terroristas la ruptura de Espa?a, y ustedes se callan; el siguiente d¨ªa habr¨¢n aniquilado pol¨ªtica y econ¨®micamente Espa?a, destruyendo sus vidas y su futuro, as¨ª como las vidas y el futuro de sus hijos, y entonces ya ser¨¢ demasiado tarde¡±.
La historia nunca se repite, pero mucho me temo que estamos escuchando fuertes ecos del pasado¡±
Por supuesto, la desinformaci¨®n malintencionada no es un fen¨®meno nuevo. Siempre ha existido bajo las teocracias, las monarqu¨ªas absolutas y las dictaduras totalitarias. Ha dependido mucho de la cultura de cada pa¨ªs, normalmente en funci¨®n de si exist¨ªa un sano escepticismo entre la gente corriente hacia sus gobernantes. Por ejemplo, en Italia y Espa?a, las ra¨ªces del fascismo nunca fueron profundas. Pero en Alemania, y en gran medida en Rusia, la ideolog¨ªa desempe?¨® un papel mucho m¨¢s emocional.
Hoy, en un mundo repentinamente repolarizado, incluso las democracias estables se ven amenazadas por un asalto a la verdad a causa del poder de las redes sociales masivas. Las teor¨ªas conspirativas siempre han existido. Pero en el pasado, los creyentes estaban comparativamente aislados. La diferencia ahora es que las ideas enloquecidas y las mentiras pueden difundirse mucho m¨¢s r¨¢pidamente y con mucha mayor convicci¨®n porque internet junta a los creyentes. La historia nunca se repite, pero mucho me temo que estamos escuchando fuertes ecos del pasado.