La primera central t¨¦rmica de Endesa se convierte en sede de un proyecto que da nueva vida a exposiciones terminadas

El mural Am¨¦rica XXI iba a ser destruido, pero en el ¨²ltimo momento hubo un cambio de planes: la obra se salv¨® y pas¨® a exhibirse en un espacio cultural de otra ciudad. Creado por Baltazar Castellano y Olga Manzano en septiembre de 2021 para celebrar los 110 a?os de la Casa Am¨¨rica Catalunya de Barcelona, despu¨¦s de exponerse durante m¨¢s de dos a?os en ese espacio iba a ser retirado de la pared para dar espacio a una nueva muestra. Y desechado, porque su tama?o de 24 metros de ancho no ten¨ªa cabida en el limitado almac¨¦n del centro. Era una oportunidad ideal para que el proyecto La Recicladora Cultural recuperase la pieza para su sede y presentase su objetivo: dar nueva vida a exposiciones que, de otra manera, no volver¨ªan a verse o se destruir¨ªan una vez terminado su ciclo vital.

¡°La huella de carbono que vas dejando en una exposici¨®n va desde las impresiones que haces hasta el traslado. Ya que se hace esa inversi¨®n medioambiental, ?por qu¨¦ no aprovecharla y maximizarla llev¨¢ndola a otros sitios donde igual no se podr¨ªan permitir tenerla?¡±, explica Yasodhara L¨®pez, directora general de la Fundaci¨®n Ciudad de la Energ¨ªa (Ciuden), ¨®rgano adscrito al Ministerio de Transici¨®n Ecol¨®gica y Reto Demogr¨¢fico y creador del proyecto. L¨®pez present¨® la iniciativa la pasada semana a un grupo de encargados de museos y centros culturales del pa¨ªs en La T¨¦rmica Cultural, un espacio art¨ªstico emplazado en la primera central t¨¦rmica de 1949 de Endesa, en Ponferrada. Es la sede de La Recicladora, el centro neur¨¢lgico desde donde se distribuir¨¢n las muestras itinerantes a otros espacios y que tambi¨¦n servir¨¢ como dep¨®sito temporal de las obras.

¡°No pasa nada si los due?os de las exposiciones no quieren rotar las piezas que tienen mucho valor econ¨®mico o son especialmente sensibles a ser transportadas, nosotros las adaptamos a las demandas de los centros¡±, contin¨²a L¨®pez. Proyecta que a lo largo de un a?o las exhibiciones ya se crear¨¢n pensadas para ser itinerantes mediante La Recicladora. La idea no es solo reutilizar las obras, sino tambi¨¦n los materiales de producci¨®n, presentaci¨®n y se?al¨¦tica de las muestras. Para Marta Nin, directora de Casa Am¨¦rica Catalunya, donde m¨¢s se gasta a la hora de montar una muestra es en el enmarcado de las obras. Los marcos cambian de acuerdo al espacio de cada sala y no se guardan: ¡°Tambi¨¦n hay que pensar en el reciclaje conceptual que se hace. El vinilado lo quitas y ya no te sirve para otra exposici¨®n, pero s¨ª el trabajo del dise?ador¡±.

El comisario independiente y cofundador de la Plataforma de Arte Contempor¨¢neo, ?scar Garc¨ªa, ilustra c¨®mo pueden ser reciclados los materiales de exposici¨®n con una an¨¦cdota. ¡°Cuando mont¨¢bamos una muestra el a?o pasado de Eusebio Sempere y Felipe Pantone en el Museo de Bellas Artes de Alicante me encontr¨¦ en la sala con dos muros autoportantes de la exposici¨®n anterior que yo no necesitaba. Al no tener espacio para guardarlos, el museo los destruy¨®. Si una siguiente actividad los vuelve a necesitar, se van a tener que volver a fabricar¡±. Carteles, vitrinas, urnas, peanas, muros transl¨²cidos o se?al¨¦tica son todos productos reutilizables a la hora de armar una exposici¨®n.

El tipo de exposiciones que m¨¢s se adapta a esta idea de circulaci¨®n, seg¨²n Garc¨ªa, son las de obra seriada, fotograf¨ªa u obra gr¨¢fica. ¡°Al ser piezas de edici¨®n m¨²ltiple, su valor es menor y abaratan gastos, principalmente en el seguro. Es lo m¨¢s sencillo para testear c¨®mo funciona y despu¨¦s entrar en obras ¨²nicas como pintura, escultura o instalaciones¡±. A pesar de que la idea de hacer transitar las mismas muestras en espacios diferentes no es nueva (la Comunidad de Madrid desarrolla desde hace d¨¦cadas la Red Itiner para llegar a todos los municipios de la regi¨®n), La Recicladora es la primera que se presenta a nivel nacional y con principal ¨¦nfasis en lugares del pa¨ªs donde no exista una profusa actividad cultural. Ya se han unido Casa Am¨¨rica de Catalunya, el Museo de Artes Decorativas, el Centro Niemeyer de Avil¨¦s, el Museo Etnogr¨¢fico de Castilla y Le¨®n y la productora Mil Ojos.

Otro elemento con el que busca distinguirse es el de ofrecer almacenes para resguardar las piezas, un problema constante para los centros culturales m¨¢s peque?os. ¡°Implica un costo de alquiler y de transporte. Todos los recursos suelen ir enfocados a la producci¨®n y generaci¨®n de recursos art¨ªsticos¡±, apunta Nin. Por lo que La Recicladora dispone de cuatro almacenes en ¡°condiciones buenas de temperatura y humedad¡±. Los dep¨®sitos son una m¨ªnima parte del enorme complejo de m¨¢s de 6.500 metros cuadrados que abarca La T¨¦rmica Cultural, sede de La Recicladora y que funciona como centro de actividades desde marzo del a?o pasado.

En esta gran mole blanca, que se abastec¨ªa del carb¨®n extra¨ªdo del Bierzo y Laciana, conviven la huella del pasado y el presente. Las gigantescas estructuras de hormig¨®n est¨¢n lado a lado con las impolutas paredes blancas en las que se cuelgan obras de arte. En una de las salas se puede conocer a trav¨¦s de lentes de realidad virtual c¨®mo funcionaba la antigua f¨¢brica, mientras que en el espacio donde estaban las calderas se ha construido un jard¨ªn con helechos arborescentes de 400 a?os de antig¨¹edad, tra¨ªdos desde Nueva Zelanda.

La T¨¦rmica Cultural actualmente alberga las muestras del fot¨®grafo naturalista Luis Miguel Dom¨ªnguez, una retrospectiva del artista pop Eduardo Arroyo y otra de historia sobre las centrales t¨¦rmicas y mineras en Espa?a. Esta ¨²ltima, titulada Transici¨®n justa: ayer, hoy y ma?ana, viene de As Pontes e inaugura las muestras itinerantes de La Recicladora. A trav¨¦s de varias fotograf¨ªas de Eduardo Urdangaray, creador del Archivo Hist¨®rico Minero, se muestran las comunidades que se crearon en torno a la producci¨®n de energ¨ªa, el cierre de las centrales en la transici¨®n ecol¨®gica y las nuevas alternativas en las que se han convertido las plantas t¨¦rmicas sin perder su identidad minera, construir puentes hacia el futuro sobre las bases de la memoria.