¡®Tatami¡¯: drama deportivo y ¡®thriller¡¯ pol¨ªtico con fundamento contra la dictadura iran¨ª
El filme fusiona bien g¨¦neros y va subiendo de tono cuando las amenazas no se producen solo contra las dos deportistas protagonistas, sino tambi¨¦n contra sus familias
Mohammad Rasoulof, cineasta iran¨ª huido de su pa¨ªs apenas unas semanas antes de que se confirmara su sentencia a ocho a?os de prisi¨®n, se present¨® en el festival de Cannes hace unos d¨ªas con una pel¨ªcula bajo el brazo, La semilla del higo sagrado, y...
Mohammad Rasoulof, cineasta iran¨ª huido de su pa¨ªs apenas unas semanas antes de que se confirmara su sentencia a ocho a?os de prisi¨®n, se present¨® en el festival de Cannes hace unos d¨ªas con una pel¨ªcula bajo el brazo, La semilla del higo sagrado, y acab¨® ganando un premio especial del jurado. Condenado a ocho a?os de c¨¢rcel, latigazos y confiscaci¨®n de sus propiedades, seg¨²n la sentencia, por ¡°colusi¨®n con la intenci¨®n de cometer cr¨ªmenes contra la seguridad del pa¨ªs¡±, Rasoulof no es ni mucho menos el ¨²nico artista en peligro que decide dejar atr¨¢s su tierra en busca de la libertad f¨ªsica y creadora.
Con toda seguridad, los gerifaltes del r¨¦gimen iran¨ª anduvieron nerviosos la semana pasada, pendientes de un posible premio en el certamen franc¨¦s para su condenado, con el consabido descr¨¦dito para el Gobierno. Unas maquinaciones dictatoriales que logra representar la pel¨ªcula Tatami en un ¨¢mbito en principio distante, pero semejante en trascendencia internacional: el deporte.
La situaci¨®n que cuenta esta ficci¨®n coproducida entre EE UU, Reino Unido y Georgia, por rid¨ªcula, no resulta menos tr¨¢gica. Campeonato del Mundo de Judo celebrado en Tiflis, capital de Georgia, poco antes de los Juegos Ol¨ªmpicos de Tokio. Una de las favoritas es una judoca iran¨ª que va pasando eliminatorias con rotundo ¨¦xito. Sin embargo, en el otro lado del cuadro, una israel¨ª se dirige tambi¨¦n con paso firme hacia la final. Es entonces cuando los dirigentes de la federaci¨®n iran¨ª comienzan a presionar a la deportista y a su entrenadora para que finja una lesi¨®n y se retire antes de ese combate que quieren evitar. Una (posible) derrota frente a la israel¨ª ser¨ªa un fatal deshonor. Las ¨®rdenes vienen de arriba: del l¨ªder supremo.
De este modo, Tatami fusiona bien el drama deportivo con el thriller pol¨ªtico, que va subiendo de tono cuando las amenazas no se producen solo contra las dos deportistas, sino tambi¨¦n contra sus familias. El aumento gradual de la tensi¨®n est¨¢ logrado con las sucesivas llamadas telef¨®nicas desde arriba y los v¨ªdeos intimidatorios desde Teher¨¢n relacionados con sus consangu¨ªneos. Y, en medio de todo ello, una chica joven que no renuncia a sus sue?os profesionales con una dignidad, un tes¨®n y unos ideales de libertad que han sido una constante en no pocos pa¨ªses a lo largo de la historia del deporte.
Pel¨ªcula de evidente inter¨¦s sociopol¨ªtico, que solo en puntuales momentos despliega su activismo de modo un tanto elemental, Tatami, pese a su convencional fotograf¨ªa en blanco y negro sin demasiados matices, no est¨¢ exenta de calidad en su puesta en escena, sobre todo en los combates, rodados con una ¨¢gil rabia en la mirada que encaja a la perfecci¨®n con el judo y con la lucha pol¨ªtica, incluyendo un par de sorprendentes planos subjetivos con la c¨¢mara girando como si fuera un cuerpo en la llamada t¨¦cnica de los uchi mata.
A prop¨®sito, se ha dejado para el final la autor¨ªa de la pel¨ªcula, que tambi¨¦n tiene intrahistoria y redondea su activismo pol¨ªtico con fundamento: sus directores, Guy Nattiv y Zar Amir-Ebrahimi son, respectivamente, israel¨ª e iran¨ª. Nattiv es el director de la reciente Golda. Y Amir-Ebrahimi, que debuta como codirectora, es una actriz afincada en Francia (aqu¨ª interpreta a la entrenadora, y gan¨® el premio a la mejor actriz en Cannes por Holy Spider), que tuvo que huir de Ir¨¢n en el a?o 2008 tras la divulgaci¨®n sin su consentimiento de un v¨ªdeo ¨ªntimo. Se enfrent¨® a una campa?a de desprestigio que le imped¨ªa actuar, y huy¨® antes del juicio que la conden¨® en rebeld¨ªa a 10 a?os de prisi¨®n y 99 latigazos con una correa de cuero. Definitivamente, como Rasoulof, Amir-Ebrahimi sabe de lo que habla.
Tatami
Dirección: Zar Amir-Ebrahimi, Guy Nattiv.
Intérpretes: Jaime Ray Newman, Arienne Mandi, Zar Amir-Ebrahimi, Nadine Marshall.
Género: drama. EEUU, 2023.
Duración: 105 minutos.
Estreno: 31 de mayo.