La m¨²sica impulsa al mejor cine espa?ol

El a?o 2024 puede que sea recordado como el momento en el que el cine espa?ol abri¨® definitivamente una puerta que ten¨ªa atascada: la de las ficciones musicales. Dif¨ªcil no pensarlo cuando la Academia de Cine ha anunciado este mi¨¦rcoles las tres pel¨ªculas preseleccionadas para representar a Espa?a en los Oscar 2025 y dos de ellas, La estrella azul y Segundo premio, son obras inspiradas en vivencias de bandas espa?olas como M¨¢s Birras y Los Planetas, respectivamente. Por tanto, existen muchas posibilidades de que una pel¨ªcula que tiene el paisaje de la m¨²sica como primordial sea candidata a ir a los Oscar.

Se trata de un hecho importante que viene a reforzar el fabuloso empuje que ambas obras tra¨ªan desde su estreno. Ambas recibieron galardones: La estrella azul, dirigida por Javier Macipe, gan¨® el Premio de la juventud del festival de San Sebasti¨¢n y el Giraldillo de Oro del festival de Sevilla de cine europeo, mientras que Segundo premio, dirigida por Isaki Lacuesta y Pol Rodr¨ªguez, se alz¨® con la Biznaga de Oro del festival de M¨¢laga. Y ambas han gozado de otro factor importante y, a veces, m¨¢s dif¨ªcil de conseguir: el calor de los espectadores que han compartido entusiastas impresiones en redes sociales.

Al decir ficciones musicales, conviene se?alar que este g¨¦nero ir¨ªa m¨¢s all¨¢ de los conocidos como biopics. Es decir, m¨¢s all¨¢ de las pel¨ªculas biogr¨¢ficas al uso, en las que se repasa la vida de un artista. La historia del cine est¨¢ plagada de estos filmes que, en la mayor¨ªa de los casos pecan de ser hagiograf¨ªas empalagosas o de digesti¨®n complicada por la falta de un verdadero prop¨®sito art¨ªstico fuera de recorrer la existencia de una celebridad. Tambi¨¦n hay casos de lo contrario: pel¨ªculas con alma y capaces de retenerse en la memoria por su fuerza o innovaci¨®n. Desde ya cl¨¢sicos como los biopics de Mozart (Amadeus) o Charlie Parker (Bird) a otros m¨¢s recientes como los de Tina Turner (Tina), Johnny Cash (En la cuerda floja), Ian Curtis (Control), Elton John (Rocketman), Brian Wilson (Love & Mercy) o Elvis Presley (Elvis). En Espa?a, puede que uno de los mejores ejemplos sea el de Camar¨®n de la Isla (Camar¨®n).

El cine anglosaj¨®n siempre ha sido abanderado de los biopics musicales, pero tambi¨¦n abri¨® hace ya mucho tiempo otra senda a¨²n m¨¢s interesante para los amantes de la m¨²sica. Tanto Hollywood como la industria independiente han elevado historias inspiradas en personajes musicales o impulsado las ficciones a partir del motor de la m¨²sica popular. Desde el universo de un artista o de un g¨¦nero musical, se han creado pel¨ªculas poderosas y emocionantes. Quiz¨¢ el mundo del jazz tenga los mejores resultados: Francis Ford Coppola lo hizo magistralmente en La conversaci¨®n o The Cotton Club, Woody Allen en Acordes y Desacuerdos, Bertrand Tavernier en Alrededor de medianoche y Damien Chazelle en Whiplash. Con el rock de fondo, Cameron Crowe rod¨® Casi famosos, Michael Winterbottom 24 Hour Party People, y Bradley Cooper Ha nacido una estrella. Con el country, Scott Cooper hizo Coraz¨®n rebelde, y Ethan Hawke Blaze. Con el folk, John Carney grab¨® Once y los hermanos Coen A prop¨®sito de Llewyn Davis. Incluso Pixar tuvo Soul. Y los Oscar premiaron en 2018 como mejor pel¨ªcula a Green Book, la historia de un virtuoso pianista negro protagonizada por Vigo Mortesen y Mahershala Ali y dirigida por Peter Farelly.

A excepci¨®n de las aportaciones de Carlos Saura, el cine espa?ol siempre se hab¨ªa resistido a abrir la puerta de las ficciones musicales, tan exploradas tambi¨¦n ¡ªy, a veces, tan bien¡ª por la televisi¨®n y las series anglosajonas. Este a?o se ha abierto gracias al impulso estupendo de la luminosa La estrella azul y la po¨¦tica Segundo premio. La primera cuenta la historia de Mauricio Aznar, l¨ªder de M¨¢s Birras, en su b¨²squeda de s¨ª mismo huyendo de las drogas y Zaragoza, y supone a su vez un homenaje a la m¨²sica folcl¨®rica argentina. La segunda ficciona una parte de la historia convulsa de Los Planetas en la grabaci¨®n del disco que finalmente les catapultar¨ªa al ¨¦xito, y rinde tributo a la primera generaci¨®n del indie espa?ol. Las dos conectan con emociones m¨¢s all¨¢ de los relatos de sus protagonistas.

El a?o 2024 puede ser el a?o en el que las ficciones musicales hayan venido para quedarse en el cine. De hecho, la industria cinematogr¨¢fica ya est¨¢ buscando m¨¢s historias salidas de las canciones. Quiz¨¢ porque ya se han dado cuenta de que al hablar de m¨²sica se est¨¢ hablando, en definitiva, de la vida.