Arde Bogot¨¢: ¡°Queremos ser una banda de rock¡±
El grupo, habitualmente etiquetado como indie, comparti¨® una tarde con los suscriptores de EL PA?S en los teatros Luchana de Madrid
Arde Bogot¨¢ ha sido uno de los nombres que m¨¢s se ha repetido en los carteles de los festivales durante el verano. La banda, que sac¨® su primer ¨¢lbum en 2021, ha pasado gran parte de la temporada subida al escenario y continuar¨¢ as¨ª hasta final del a?o, que terminar¨¢ por todo lo alto en el WiZink Center de Madrid el 13 de diciembre. En medio de su gira, el 16 de septiembre pararon en la capital para asistir a uno de los encuentros para suscriptores de EL PA?S+ en los Teatros Luchana de Madrid.
Fernando Navarro, periodista de EL PA?S que moder¨® el encuentro, les pregunt¨® en seguida por su ¡°momento de v¨¦rtigo¡±. Y es que, en menos de cinco a?os, la banda ha conseguido convertirse en uno de los grupos m¨¢s sonados en Espa?a, dos nominaciones a los Grammys Latinos, un Ondas y seis premios de la Academia de M¨²sica.
Podr¨ªa pensarse entonces que han dado un gran salto desde Cartagena (Murcia) hasta los discos de platino, pero ellos presumen de lo contrario. ¡°Para nosotros ha sido progresivo porque, aunque haya sido muy r¨¢pido, sentimos que hemos dado todos los pasos¡±, confes¨® Dani S¨¢nchez, guitarrista.
Quien los ve en directo puede corroborar que eso es cierto con peque?os gestos, como el segundo de suspense casi imperceptible que hay despu¨¦s de que interpreten para los lectores del diario Los Perros, cuando aguardan expectantes sin levantar la cabeza a ver si el p¨²blico se arranca a aplaudir, como si todav¨ªa no lo dieran por descontado. Eso y, por supuesto, la sonrisa que se les pone a los cuatro cuando finalmente sus seguidores, algunos de los cuales han venido desde otras ciudades, rompen en aplausos.
¡°Solo es el segundo disco de esta banda, nos falta todo por hacer¡±
El ¨²ltimo paso de este intenso camino ha sido en forma de canci¨®n. Un tema de ocho minutos, La torre Picasso, que supone el primer single fuera del ¨¢lbum Cowboys de la A3. Antonio Garc¨ªa, cantante del grupo, reconoci¨® que hab¨ªa sido una apuesta muy arriesgada (concretamente, ¡°una fumada del quince¡±), pero que est¨¢ teniendo mucho ¨¦xito y que eso significa que ¡°sigue habiendo mucho que explorar¡±. ¡°Solo es el segundo disco de esta banda, nos falta todo por hacer, todo lo que hemos pensado todav¨ªa no hemos tenido el tiempo de hacerlo¡±, a?adi¨®.
Contaban, adem¨¢s, con un p¨²blico muy fiel que les coloca en una ¡°posici¨®n privilegiada¡± para lanzar una apuesta como esta que, reconocen, tambi¨¦n les hizo dudar aunque lo tuvieran claro: ¡°Voy a publicar esto, aunque no lo escuche nadie, porque a nivel art¨ªstico queremos que esta canci¨®n est¨¦ presente y, si no la escucha nadie, tenemos cuatro o cinco conciertos m¨¢s cerrados y el WiZink ya se ha vendido¡±, reconoci¨® el cantante haciendo re¨ªr al p¨²blico.
Navarro se refiri¨® a la canci¨®n como ¡°tres temas en uno¡± y aprovech¨® la ocasi¨®n para tratar de definir y comprender el sonido de la banda que, como periodista musical, etiqueta como rock, aunque en plataformas digitales aparecen en las listas de indie. ¡°Las etiquetas las ponen los dem¨¢s y cada uno usa las que les parecen apropiadas, pero nosotros queremos ser una banda de rock¡±, coincidi¨® Antonio.
Precisamente dedicaron un espacio de la conversaci¨®n a comentar las ventajas que tiene para ellos ser una banda. ¡°Se comparte y se reparte todo lo bueno y lo malo¡±, apunt¨® Dani. Hac¨ªa alusi¨®n a las malas cr¨ªticas y a la presi¨®n, y confes¨® que no todos los integrantes del equipo las gestionan igual, pero que aguantan el peso entre los cuatro.
Aunque ahora sean pares, no todos llegaron al mismo tiempo. Pepe Esteban, el bajo; Jota Mercader, el bater¨ªa, y Dani S¨¢nchez, el guitarrista; formaron en primer lugar una banda a la que faltaba un cantante. Recordaron esa primera audici¨®n de Garc¨ªa, el momento en el que captaron a ¡°uno de los grandes vocales que tenemos hoy en d¨ªa¡±, seg¨²n Navarro. ¡°Era la primera vez que iba a un local de ensayo en mi vida, llegu¨¦ con una guitarra que era de mi hermana (¡) y no sab¨ªa ni d¨®nde se enchufaba¡±, record¨® el vocalista.
Aunque ¨¦l se muestre inseguro, desde el otro lado lo tuvieron claro. ¡°Tengo un crush con la voz de Antonio, fue autom¨¢tico¡±, reconoci¨® Jota, mientras rememoraba el primer audio de WhatsApp en el que escuch¨® la voz de su compa?ero, incluso antes de la audici¨®n, donde no lo pudieron ¡°dejar escapar¡±. A partir de ese momento alquilaron un local por horas y se pusieron a ensayar.
Reconocen que todav¨ªa est¨¢n en proceso muchas cosas, entre ellas, llevar la energ¨ªa del directo al estudio. Sobre el escenario parecen sentirse m¨¢s c¨®modos y confiesan que se toman el directo ¡°muy, muy en serio¡± y que tratan de ¡°hacer brillar¡± cada concierto, pero que no consiguen trasladar esa esencia a las grabaciones en el estudio.
¡°Se est¨¢ desarrollando una industria muy heterog¨¦nea y ese es el gran futuro de la m¨²sica¡±
Para finalizar el encuentro, Navarro les pregunt¨® por el futuro. Algunas de las bandas con las que comparten g¨¦nero, como Vetusta Morla, Ni?os Mutantes o Izal, han anunciado un par¨®n o una separaci¨®n y el periodista apunt¨® que lo ten¨ªan todo para ¡°ser una gran banda de esta era¡±. Ellos, en cambio, no lo perciben as¨ª. ¡°Creo que hay un panorama musical muy chulo en el pa¨ªs, pese a que bandas tan importantes como las que has nombrado paran o desaparecen¡±, apunt¨® Garc¨ªa. ¡°Hay un mont¨®n de bandas con las que compartimos fines de semana durante el verano (¡) que conviven, tienen su espacio y tiene sentido. Se est¨¢ desarrollando una industria muy heterog¨¦nea y ese es el gran futuro de la m¨²sica¡±, concluy¨®.
Los cuatro chicos de Cartagena todav¨ªa no terminan de ser quienes quieren ser y no tienen reparo en reconocer que solo est¨¢n comenzando. Su p¨²blico no dej¨® de re¨ªr con ellos durante la conversaci¨®n y cantaron juntos, para terminar, Cowboys de la A3, el tema que da nombre a su segundo disco y a su gira, que los llevar¨¢ por Latinoam¨¦rica durante 2025.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.