Los periodistas catalanes que ¡®entrevistaron¡¯ a Hitler, ?¡®fake news¡¯ o primicia mundial?
Un libro en Alemania coloca a Josep Pla y Eugeni Xammar entre los ¡°charlatanes¡± que inventaron entrevistas con el l¨ªder nacionalsocialista
Es uno de los grandes misterios del periodismo catal¨¢n y espa?ol del siglo XX. ?Entrevistaron Josep Pla y Eugeni Xammar, s¨ª o no, a Adolf Hitler el 8 de noviembre de 1923, el d¨ªa del golpe de Estado en una cervecer¨ªa de M¨²nich?
Circulan dos teor¨ªas. La primera es que ambos lograron una exclusiva de alcance mundial al revelar las intenciones del tirano una d¨¦cada antes de que este conquistase el poder. La otra, que todo fue un invento, una noticia falsa, una fake news perpetrada por ...
Es uno de los grandes misterios del periodismo catal¨¢n y espa?ol del siglo XX. ?Entrevistaron Josep Pla y Eugeni Xammar, s¨ª o no, a Adolf Hitler el 8 de noviembre de 1923, el d¨ªa del golpe de Estado en una cervecer¨ªa de M¨²nich?
Circulan dos teor¨ªas. La primera es que ambos lograron una exclusiva de alcance mundial al revelar las intenciones del tirano una d¨¦cada antes de que este conquistase el poder. La otra, que todo fue un invento, una noticia falsa, una fake news perpetrada por uno de m¨¢s admirados periodistas catalanes de su ¨¦poca y otro que se convertir¨ªa en un cl¨¢sico de la literatura hisp¨¢nica contempor¨¢nea.
Un nuevo libro en Alemania, Hitlers Interviews. Der Diktator und die Journalisten (¡±Entrevistas con Hitler. El dictador y los periodistas¡±, publicado en alem¨¢n por Kiepenheuer & Witsch), de nuevo siembra dudas sobre la autenticidad del encuentro entre los dos catalanes y el l¨ªder nacionalsocialista. El autor, Lutz Hachmeister, fallecido este verano justo antes de su publicaci¨®n, incluye a Pla y Xammar en un cap¨ªtulo titulado Faking Hitler, ¡°Falsificando a Hitler¡±, en ingl¨¦s. El cap¨ªtulo lleva por subt¨ªtulo: ¡°Periodistas encubiertos y charlatanes: entrevistas dudosas.¡±
¡°Hay indicios s¨®lidos de que no existi¨® esta entrevista¡±, dice al tel¨¦fono Knud B?hle, autor de Eugeni Xammar: Adolf Hitler o la simpleza desencadenada, el texto que es la fuente principal de Hachmeister para las p¨¢ginas que dedica al caso. Xammar, m¨¢s veterano que Pla, public¨® su versi¨®n de la entrevista en el diario La Veu de Catalunya. Pla, d¨ªas despu¨¦s, en La Publicitat. ¡°Creo que era f¨¢cil hacer un fake¡±, afirma B?hle, ¡°Xammar era un t¨ªo muy listo.¡±
La pistola humeante, la prueba de que Pla y Xammar efectivamente entrevistaron a Hitler, o de que definitivamente fue una falsificaci¨®n, no ha aparecido. Qui¨¦n sabe si existe. Pero la entrevista ¨DPla, en su versi¨®n, la llam¨® ¡°mon¨®logo¡±¨D ha sido motivo de debates desde que se redescubri¨® al incluirse en L¡¯ou de la serp (El huevo de la serpiente), el volumen con las cr¨®nicas que Xammar en la Alemania publicado por en catal¨¢n por Quaderns Crema en 1998. Unos a?os despu¨¦s se publicar¨ªan en castellano y m¨¢s tarde tambi¨¦n en alem¨¢n.
Tras leer el libro, el periodista Llu¨ªs Permanyer sentenci¨® en La Vanguardia: ¡°Xammar y Pla se inventaron las entrevistas que publicaron de Hitler¡±. ¡°No puedo demostrar con datos incontrovertibles que ambos se inventaran aquellas entrevistas¡±, argumentaba en un art¨ªculo del a?o 2000. ¡°Pero la mayor duda me asalto? a rai?z de comprobar que ninguno de los dos jama?s volvio? a hablar del tema.¡±
Especialistas en Pla, historiadores y cr¨ªticos, en Espa?a y Alemania, siguieron d¨¢ndole vueltas. Unos, convencidos de que la entrevista hab¨ªa existido y que aportaba una informaci¨®n valiosa para la comprensi¨®n de los primeros a?os del nacionalsocialismo. El historiador Ernst Piper escribi¨® en el diario Tagesspiegel cuando en 2008 se public¨® en alem¨¢n el libro de Xammar: ¡°Xammar logr¨® entrevistar al golpista Adolf Hitler, quien en esta ocasi¨®n parlote¨® abiertamente sobre los planes de exterminio de los jud¨ªos¡±. Incluso los historiadores que trabajaron en la edici¨®n cr¨ªtica de Mein Kampf (Mi lucha) citaron la entrevista en una nota al pie sin hacerse eco de las dudas sobre su autenticidad.
Otros sostienen que aquella entrevista no pod¨ªa ser real. ¡°En mi opini¨®n, conviene tener cierta reserva respecto al producto que presentaron como entrevista o mon¨®logo¡±, escribi¨® en 2023 el historiador Josep Maria Fradera en el pr¨®logo de La inflaci¨®n alemana. Cr¨®nicas 1923-1924, de Pla.
En su exhaustiva biograf¨ªa de Josep Pla Un cor furtiu (Un coraz¨®n furtivo, publicado en 2024 en catal¨¢n y castellano por Destino), el profesor Xavier Pla dedica una decena de p¨¢ginas a la supuesta entrevista. Y desgrana los argumentos de ambos lados para constatar, al final del cap¨ªtulo, que ¡°la entrevista con Hitler tiene una gran repercusi¨®n en el mundo acad¨¦mico anglosaj¨®n¡±. ¡°Los estudios biogr¨¢ficos e hist¨®ricos m¨¢s recientes sobre la figura de Hitler¡±, a?ade, ¡°documentan y confirman que la entrevista de Xammar y Pla es el primer testimonio escrito de los siniestros prop¨®sitos que acaban concret¨¢ndose en el a?o 1942 con la soluci¨®n final.¡±
La conclusi¨®n de Lutz Hachmeister en Hitlers Interviews, publicado unos meses despu¨¦s que la biograf¨ªa de Pla, es m¨¢s tajante. Habla de ¡°entrevista ficticia¡±. E incluye a los reporteros catalanes entre los ¡°charlatanes¡± y falsificadores. Los sit¨²a en compa?¨ªa de Konrad Kujau, autor de los falsos Diarios de Hitler publicados en 1983, y de otros ejemplos de dudosas o falsas conversaciones con el dictador. Las m¨¢s c¨¦lebres, elogiadas en su momento por historiadores de prestigio como Golo Mann, fueron las que Hitler supuestamente mantuvo con el periodista Richard Breitling. O con el disidente del nazismo Hermann Rauschning, quien las public¨® en franc¨¦s bajo el t¨ªtulo Hitler m¡¯a dit (Hitler me dijo).
Hachmeister se bas¨®, para inculpar a los periodistas catalanes, en el an¨¢lisis de B?hle, quien conclu¨ªa: ¡°La abundancia de pruebas tendentes a sugerir una falsificaci¨®n es abrumadora.¡± B?hle descarta la idea de que Xammar, al poner en boca de Hitler la expresi¨®n ¡°gran soluci¨®n¡±, hubiese anticipado ¡°soluci¨®n final¡±, el asesinato sistem¨¢tico de los millones de jud¨ªos de Europa. Seg¨²n el experto, lo que se pone en boca de Hitler en la supuesta entrevista son ideas y palabras que no eran nuevas, y que alguien como Xammar deb¨ªa de conocer. El propio Hitler las hab¨ªa pronunciado anteriormente, figuraban en el programa de su partido y pertenec¨ªan a la tradici¨®n del antisemitismo alem¨¢n. ¡°Por lo tanto¡±, concluye, ¡°situar la soluci¨®n final, es decir, el Holocausto, en la mentalidad de 1923 es una proyecci¨®n hacia atr¨¢s hist¨®ricamente inaceptable.¡±
De las memorias de Xammar, Seixanta anys d¡¯anar pel m¨®n (¡±Sesenta a?os yendo por el mundo¡±), se deduce que no solo era falsa la entrevista, sino las cr¨®nicas que escribieron relatando el golpe de Estado como si ¨¦l y Pla hubieran estado dentro de la cervecer¨ªa en el mismo momento de los hechos. En realidad, seg¨²n Xammar en las memorias, ambos se perdieron la noticia. S¨ª, estaban en M¨²nich esa noche, pero en otra cervecer¨ªa, no la del golpe, y no se enteraron hasta la ma?ana siguiente.
Volviendo a la entrevista, resulta llamativo que no solo Pla y Xammar jam¨¢s volvieran a mencionarla. Tampoco lo hicieron otras personas que pudieron tener conocimiento de ella.
Una pista es la agenda de Hitler el 8 de noviembre de 1923, d¨ªa de la entrevista y de los ¨²ltimos preparativos del golpe de Estado. Ernst Hanfstaengl, portavoz del partido nazi, explicar¨ªa que Hitler apareci¨® una sola vez por la redacci¨®n del diario nazi V?lkischer Beobachter en M¨²nich, donde supuestamente se desarroll¨® la conversaci¨®n. Cuando evocan las jornadas del fallido golpe, ni Hanfstaengl en sus memorias ni, en sus diarios, Paula Schlier, una periodista que se hab¨ªa infiltrado como secretaria en el V?lkischer Beobachter, mencionan la presencia de los periodistas
¡°?Hitler, en esas horas de tensi¨®n y nervios por el golpe de Estado que iba a hacer por la noche, encontr¨® un momentito tranquilo en la redacci¨®n llena de gente, y nadie se acuerda de que hab¨ªa all¨ª dos extranjeros haciendo una entrevista?¡±, se pregunta B?hle. Y zanja: ¡°Me parece casi imposible.¡±