Jes¨²s G. Maestro, catedr¨¢tico de literatura y ensayista: ¡°Me llevar¨ªa fatal con mi personaje de los v¨ªdeos de Youtube, no tenemos nada que ver¡±
El profesor, todo un fen¨®meno viral por la vehemencia de sus lecciones digitales, publica ¡®Una filosof¨ªa para sobrevivir en el siglo XXI¡¯, que lidera las ventas de ensayos en Amazon
El hombre que vive en la casa de Jes¨²s G. Maestro (Gij¨®n, 57 a?os), se parece muy poco al hombre que sale en los v¨ªdeos de Jes¨²s G. Maestro. Catedr¨¢tico de Teor¨ªa de la Literatura y Literatura Comparada en la Universidad de Vigo, en 2014 comenz¨® a subir a Youtube sus clases y sus an¨¢lisis literarios. No solo se hizo popular, sino que dio con esa rara alquimia del siglo XXI: se hizo viral. Viral porque su vehemencia atrap¨® a la audiencia, y porque sus afiladas sentencias (¡°La cultura es la forma en que el ser humano o...
El hombre que vive en la casa de Jes¨²s G. Maestro (Gij¨®n, 57 a?os), se parece muy poco al hombre que sale en los v¨ªdeos de Jes¨²s G. Maestro. Catedr¨¢tico de Teor¨ªa de la Literatura y Literatura Comparada en la Universidad de Vigo, en 2014 comenz¨® a subir a Youtube sus clases y sus an¨¢lisis literarios. No solo se hizo popular, sino que dio con esa rara alquimia del siglo XXI: se hizo viral. Viral porque su vehemencia atrap¨® a la audiencia, y porque sus afiladas sentencias (¡°La cultura es la forma en que el ser humano organiza su ignorancia colectiva¡±, ¡°La vida es una lucha contra la mediocridad propia y ajena¡±, ¡°Cervantes vale m¨¢s que Shakespeare¡±, ¡°Hoy el pueblo son los influencers, y saben m¨¢s que los intelectuales¡±) espabilaron a los espectadores. Sin embargo, el profesor que recibe en su casa de Vigo es excepcionalmente amable, cercano, simp¨¢tico, incluso (estos ojos lo han visto), queda embelesado cuando se cruza por la calle con el beb¨¦ durmiente de unos antiguos alumnos, que le abrazan con cari?o; nada que ver con el le¨®n que ruge desde su canal virtual. Con una larga obra acad¨¦mica a sus espaldas (que incluye la monumental Cr¨ªtica de la raz¨®n literaria, de m¨¢s de 3.000 p¨¢ginas), ahora llega a todas las librer¨ªas con un ensayo m¨¢s ameno y concentrado: Una filosof¨ªa para sobrevivir en el siglo XXI (HarperCollins), que r¨¢pidamente ha trepado al n¨²mero 1 de ensayos m¨¢s vendidos en Amazon. Que nadie tema, el le¨®n sigue rugiendo en esas p¨¢ginas, empezando por el subt¨ªtulo: Yo no soy un youtuber y usted no sabe nada sobre m¨ª.
Pregunta: Oiga, ?C¨®mo entra Youtube en su vida? ?Cu¨¢l es la an¨¦cdota?
Respuesta: Bueno, no es una an¨¦cdota, es una cosa m¨¢s seria. Es una cosa bastante m¨¢s seria de lo que parece, la verdad, y la gente no se da cuenta de lo grave que es el asunto.
P. Cu¨¦ntenos.
R. A m¨ª me parece muy importante la educaci¨®n libre, abierta y gratuita. Y veo que eso no est¨¢ en la mayor parte de las instituciones educativas del futuro. Es decir, aqu¨ª vamos hacia una privatizaci¨®n total de la ense?anza, y eso es muy arriesgado. As¨ª que hay gente que gracias a Youtube accede a ese conocimiento. No dir¨¦ que gracias a mis clases, porque eso es muy presuntuoso y como yo hay m¨¢s.
P. Se refiere a gente que explica literatura en la plataforma.
R. En las universidades actuales la literatura pierde presencia, a pasos agigantados y exponencialmente. Dentro de una generaci¨®n no se explicar¨¢ literatura en ninguna universidad, en ninguna. Se explicar¨¢n otras cosas, pero no literatura. ?Y qu¨¦ ocurre? Pues que habr¨¢ mucha gente que por no tener medios no va a poder acceder a la literatura. Yo proporciono gratuitamente esos medios, basta una conexi¨®n a internet para acceder a una serie de interpretaciones sobre por ejemplo el Quijote que otros, sinceramente, no han dado. La raz¨®n fundamental por la que yo decido exponer mis posibles conocimientos en Youtube es porque es la ¨²nica forma de que mucha gente, y pienso sobre todo en Hispanoam¨¦rica, pueda acceder a ello.
P. ?No hay narcisimo en su exposici¨®n?
R. No. Es decir, yo no estoy encantado de conocerme a m¨ª mismo, yo estoy encantado de no conocer a nadie. No soy una persona de multitudes ni de masas, yo trabajo no para que me presten atenci¨®n, trabajo para que la literatura tenga m¨¢s valor. Yo me encuentro en el punto en el que considero que la literatura ayuda a mejorar las condiciones de vida del ser humano, ayuda a conocerse mejor. Eso es importante.
P. Menciona el Quijote. ?Hay algo que se le pueda comparar?
R. Realmente, no. Mira, Cervantes razona como ning¨²n ser humano razon¨® ni antes ni despu¨¦s que ¨¦l. Porque Cervantes nos advierte de los peligros del idealismo. Considera que el idealismo hace al ser humano incompatible con la realidad. Es decir, si t¨² eres un idealista, lo que t¨² demuestras es que tienes miedo a la realidad, que prefieres tener una preconfiguraci¨®n antes de enfrentarte a la vida. B¨¢sicamente, es decir: como esa realidad es peligrosa, yo me voy a montar mi pel¨ªcula propia y voy a vivir en ella.
P. ?Triunfa hoy el idealismo?
R. Hoy se idealiza todo. Se idealiza el dinero, que resuelve muchos problemas, pero no los resuelve todos. Se idealiza el trabajo. Cuando veo la palabra l¨ªder, salgo corriendo.
P. ?Y eso?
R. Me resulta rid¨ªculo. Un l¨ªder es un esclavo de ¨¦lite y toda esta exaltaci¨®n que la cultura anglosajona, sobre todo la estadounidense, hace de l¨ªder es el sacrificio de vidas humanas. Idealizar el ¨¦xito, idealizar la vida de alguien, a veces supone arruinar la vida de ese alguien y la de los que est¨¢n por debajo.
P. Usted ataca a la filosof¨ªa. ?La filosof¨ªa es idealista?
R. ?De qu¨¦ hablan los fil¨®sofos cuando hablan? Los fil¨®sofos cuando hablan, hablan de religi¨®n. Arist¨®teles, S¨®crates¡ hablaban del nous, del ¨¢peiron, del motor perpetuo¡ siempre es un poder dominante y un¨ªvoco que lo gestiona todo. ?Y luego qu¨¦ llegan? Los fil¨®sofos te¨®logos, o los te¨®logos fil¨®logos. La causa primera, la sustancia pura. Las m¨®nadas. Pero, ?Qui¨¦n ha visto las m¨®nadas? ?Qui¨¦n ha visto la sustancia pura? ?Qui¨¦n ha visto el esp¨ªritu absoluto? ?Qui¨¦n ha visto el no¨²meno? Pero, ?de qu¨¦ co?o estamos hablando?
P. Le gustan las frases impactantes. En una sostiene que, sin idealismo, Alemania se hubiera ahorrado dos guerras mundiales.
R. Sin duda ninguna, porque eso les hizo perder de vista la realidad. No por casualidad Alemania es el pa¨ªs que inventa el idealismo, primero con Lutero y despu¨¦s con Kant. Y en esa autopista del idealismo seguimos. Lo que pasa es que la autopista del idealismo termina en China.
P. Como profesor ?sostiene que la educaci¨®n se ha depauperado?
R. La educaci¨®n se ha depauperado, y con frecuencia culpan al deterioro de la educaci¨®n a los pol¨ªticos. Pero no hay que olvidar que los pol¨ªticos no dan clase, los que damos clase somos los profesores.
P. Se ataca mucho a los propios j¨®venes, tambi¨¦n.
R. Lo que puedan dar de s¨ª los milenaristas est¨¢ por ver, est¨¢ por ver. Conozco a muchos milenaristas que son gente muy valiosa, muy preparada, muy trabajadora y muy cualificada. Y conozco muchos b¨²meres que han sido todo lo contrario de la imagen que muchos de ellos dan de s¨ª mismos. Por lo tanto, no podemos establecer diferencias maniqueas entre generaciones, eso no es as¨ª.
P. Hablando de educaci¨®n, ?Qu¨¦ le recomendar¨ªa a un ni?o como lectura? A un adolescente.
R. Yo recomiendo que lea el Quijote directamente. Pero directamente, sin problema. Vamos a ver, ?por qu¨¦ a la gente le intimida la literatura? Porque la han educado para que la literatura le intimide. No hay por qu¨¦ sentir miedo hacia la literatura. La literatura te va a recibir siempre con los brazos abiertos. Y luego, eso s¨ª, si t¨² te haces preguntas ante la literatura, entonces ah¨ª entra el papel de alguien que sepa y te pueda explicar. Es como si alguien dice bueno es que a m¨ª me gusta la m¨²sica. Bueno, ah¨ª tienes un piano, t¨®calo. Pues entonces yo te voy a ense?ar. Si t¨² empiezas leyendo de peque?o cuentos de mala calidad, de mayor leer¨¢s libros de mala calidad.
Hablando de m¨²sica, por cierto, desde que el periodista entra en la casa suena de fondo Verdi en el hilo musical. Maestro se?ala el piano vertical que hay en medio del sal¨®n, apoyado en una columna: ¡°En realidad me considero un alumno de piano a quien se le atraves¨® la literatura en su vida¡±, confiesa encogi¨¦ndose de hombros. Se?al del eclecticismo que demanda este siglo XXI, al lado de ese piano hay un diploma con un premio de la Sociedad Cervantina entregado a uno de sus ensayos, y al lado la plateada placa de Youtube que certifica haber pasado de 100.000 seguidores. Cerca, un atril con un poema de Quevedo: Contra los que quieren gobernar el mundo y viven sin gobierno. ¡°En el mundo naciste, no a enmendarle, / sino a vivirle, Clito, y padecerle; / puedes, siendo prudente, conocerle; / podr¨¢s, si fueres bueno, despreciarle¡±.
P. ?Ha tenido alg¨²n problema con ese piano, verdad?
R. S¨ª, avisos de Youtube. Creo que este ha sido un problema de copyright con las introducciones de mis v¨ªdeos. Si t¨² tocas alguna pieza, Youtube tiene un mecanismo totalmente ciego y autom¨¢tico que identifica la melod¨ªa con las grabaciones de sellos discogr¨¢ficos. El mecanismo es ciego, pero tiene muy mal o¨ªdo. Entonces, han llegado a identificar interpretaciones m¨ªas al piano con interpretaciones de Sviatoslav Richter. ?En fin! (r¨ªe).
P. No es mal elogio¡ pero siguiendo con Youtube, ?C¨®mo se lleva con su personaje? No se le parece mucho en persona¡
R. ?El personaje y yo no tenemos nada que ver!
P. Es que es bien curioso, vi¨¦ndole en Youtube nadie dir¨ªa que es tan cercano.
R. (R¨ªe) Es que no tenemos nada que ver. Yo con el personaje no quiero saber nada. El personaje es otra cosa, yo me llevar¨ªa fatal con el personaje de mis v¨ªdeos. Que se queden con ¨¦l y a m¨ª que me dejen en paz.
P. Ese personaje para las redes sociales es un fen¨®meno muy de nuestra era.
R. Bueno, Pessoa ten¨ªa heter¨®nimos. Cervantes cuando escribe practica la polionomasia. Esto no tiene que ver con trastornos de personalidad (r¨ªe). Es igual que cuando yo doy clase: el que da clase es una persona contratada conforme a determinadas condiciones. Con los v¨ªdeos ocurre lo mismo. Lo ¨²nico que tenemos en com¨²n es el significante, el soporte f¨ªsico, como un actor con el personaje que representa, pero nada m¨¢s.
P. En el subt¨ªtulo de su libro subraya que no es un youtuber, ?C¨®mo se define, entonces?
R. Yo ofrezco lo que puedo ofrecer, no ofrezco lo que usted quiere. Son cosas completamente diferentes. Yo no hablo para gustar, yo hablo para exponer un sistema de ideas. Si eso gusta, bien, y si no gusta, igual de bien, porque es que yo no lo puedo resolver. Yo soy alguien que expone ideas sobre la literatura, pero que no se subordina a lo que se espera. Ni al p¨²blico tampoco. Es decir, para m¨ª la literatura es m¨¢s importante que el p¨²blico. Apelativamente, podr¨ªa decir: la literatura es m¨¢s importante que t¨².
P. Me doy por apelado. Entonces, no le preocupa la audiencia.
R. Yo no hablo para tener espectadores, yo hablo para exponer ideas sobre la literatura y para ofrecer a aquellas personas que puedan estar interesadas un acceso sin obst¨¢culos a la literatura, que no tengan que pagar por o¨ªr hablar de literatura en la mejor calidad posible. Es decir, yo, siendo catedr¨¢tico de universidad, cosa que me importa un bledo, he bajado al fango para explicar literatura a aquellos que no tienen acceso a ir a una universidad. Eso es lo que yo he hecho y si de algo me alegrar¨¦ el d¨ªa que me muera ser¨¢ de haber hecho eso y de haber tocado el piano. Mal, pero bueno. Ese es mi objetivo, b¨¢sicamente. No es que yo quiera ser un ?caro o un Prometeo que entregue el fuego a la gente, pero creo que la literatura es un bien de primera necesidad. Eso para m¨ª es lo m¨¢s importante.