Peque?o gran Gatsby
¡®El peque?o Gatsby¡¯ re¨²ne todo tipo de notas e informaciones sobre la compleja obra de Francis Scott Fitzgerald, en la que destaca su mirada ir¨®nica
A muy pocos d¨ªas de que se cumplan 100 a?os de su publicaci¨®n, regreso a El gran Gatsby, de Francis Scott Fitzgerald, a su obsesi¨®n por el pasado irrecuperable y por aquella luz verde de baliza al otro lado de la bah¨ªa. ¡°Una de las novelas m¨¢s eminentemente ¡®rele¨ªbles¡¯ jam¨¢s escritas¡±, dice ...
A muy pocos d¨ªas de que se cumplan 100 a?os de su publicaci¨®n, regreso a El gran Gatsby, de Francis Scott Fitzgerald, a su obsesi¨®n por el pasado irrecuperable y por aquella luz verde de baliza al otro lado de la bah¨ªa. ¡°Una de las novelas m¨¢s eminentemente ¡®rele¨ªbles¡¯ jam¨¢s escritas¡±, dice Rodrigo Fres¨¢n en El peque?o Gatsby, el librito que en sus intensas notas arroja luz verde sobre la ficci¨®n de Fitzgerald, sobre la alegr¨ªa desesperada de las fiestas, el ruido mafioso, la lucidez de John Cheever, los horrores de la Gatsbylandia cinematogr¨¢fica, sobre el sinsentido de los que vieron a Gatsby como ¡°un payaso que se precipitaba hacia la muerte¡± y al libro como ¡°un literario merengue de lim¨®n¡±.
Re¨²ne El peque?o Gatsby todo tipo de notas e informaciones sobre esa obra maestra del gran Fitzgerald que asocio a unas palabras de Nick, el parcialmente involucrado narrador de la historia: ¡°Todo el mundo se cree poseedor de por lo menos una de las virtudes cardinales. La m¨ªa es esta: soy una de las pocas personas honradas que he conocido en mi vida¡±
No porque Nick se presentara as¨ª, viaj¨¦ confiado alguna vez con ¨¦l hasta el fin del mundo. Prefer¨ª siempre ir de la mano de los dos, del Nick fiable y del no fiable, aunque ya solo fuera por mostrar mi acuerdo con la idea de Fitzgerald de que una inteligencia de primera clase es la capacidad para mantener dos ideas opuestas en la mente y al mismo tiempo conservar la capacidad de funcionar.
Es evidente que esa c¨¦lebre idea no solo contiene una magistral definici¨®n de la iron¨ªa, sino que no puede estar m¨¢s enraizada en El gran Gatsby y constituye la clave del tono tan atractivo y feliz de la prosa que Fitzgerald, a sus 25 a?os, despleg¨® en la que para muchos es la mejor novela escrita en ingl¨¦s del pasado siglo. Aunque no siempre fue tan bien vista porque, cuando se public¨® hace cien a?os, casi nadie supo ver en qu¨¦ consist¨ªa verdaderamente su sutil genialidad. Y el propio Fitzgerald lleg¨® a comentar que de todas las rese?as de El gran Gatsby, aun las m¨¢s entusiastas, ¡°no hab¨ªa una sola que supiera m¨ªnimamente de qu¨¦ iba el libro¡±
El peque?o Gatsby
Debate, 2025
?No es asombroso? ?No ser¨¢ que el mundo ha estado siempre lleno de personas sin talento que se han dedicado a juzgar a los que s¨ª lo tienen? Por suerte permanece en pie, por ejemplo, lo que, en estas mismas p¨¢ginas, hace trece a?os, dijera Juan Gabriel V¨¢squez acerca de la novela de Fitzgerald. Una de las claves ser¨ªa el hecho de que, si bien Gatsby era el tema de la novela, el personaje principal no era ¨¦l, sino Nick, un observador que, como ¨¦l mismo nos dice en el libro, se encuentra ¡°dentro y fuera, simult¨¢neamente encantado y repelido por la inagotable variedad de la vida¡±.
Tal vez porque narrador y autor son dos figuras distintas, he ido tantas veces con ellos, confiado y desconfiado, armonizando dos ideas opuestas, hasta m¨¢s all¨¢ del fin del mundo. Y tal vez por eso me asombro cuando encuentro tantas novelas nuevas que se limitan a hablar de la experiencia personal, renunciando a aumentar sus ¡°yo¡± y a ensanchar la realidad.