Urbano y dom¨¦stico a la vez
El estudio Tovo-Sarmiento firma en Buenos Aires un edificio de viviendas parad¨®jico: enrejado pero luminoso, rotundo pero ligero, de escala c¨ªvica y cuidado humano
En la complicada diatriba entre ayudar a construir la ciudad y velar por la comodidad de los habitantes de un edificio acaban perdi¨¦ndose grandes proyectos arquitect¨®nicos. Hay inmuebles ic¨®nicos, o al rev¨¦s, discretos, que ponen por delante la construcci¨®n de un barrio que la vida en el interior de sus apartamentos. Y al contrario: son muchos los edificios que desorganizan la trama urbana y, ciertamente, no siempre para mejorar la vida de quienes los habitan. El edificio de viviendas que el estudio bonaerense Tovo-Sarmiento levant¨® en el barrio de Caballito, muy cerca del Parque Centenario de Buenos Aires es, en s¨ª mismo, un zurcido urbano. Trabaja para la ciudad, cose la disparidad que lo rodea. El edificio de viviendas Franklin es una construcci¨®n con forjados y estructura de hormig¨®n armado ¡ªsin acabados ni revoques¨D, tiene ocho plantas y salva el desnivel entre el inmueble vecino, de factura contempor¨¢nea, y un conjunto de viviendas adosadas de principios de siglo XX de dos plantas de altura. ?C¨®mo dar respuesta a ese salto urbano? La respuesta la ofrece el proyecto final: aprovechando las oportunidades que esa uni¨®n insinuaba.
Teresa Sarmiento (1976) y Nicol¨¢s Tovo (1979) son un matrimonio de arquitectos que con frecuencia colaboran, pero rara vez trabajan juntos. Esta vez lo han hecho. Necesitaban integrar el paisajismo circundante y el espacio exterior -que domina Teresa- y el dise?o y el cuidado interior ¨Dque controla Nicol¨¢s¨D. El edifico Franklin se levant¨® en un solar sin ¨¢ngulos rectos y con ese salto de escala dram¨¢tico entre las ocho alturas de la obra reciente y las dos de la hist¨®rica. Parte de la respuesta lleg¨® de los patios: duplicar su espacio mejorar¨ªa la iluminaci¨®n, la ventilaci¨®n y el soleamiento. Adem¨¢s, permitir¨ªa jugar con la vegetaci¨®n vecina y con la ligereza ¨Cesto es no ocupando todo el espacio- llegar¨ªan las vistas. As¨ª fue.
Los arquitectos las acercaron despegando el edificio ¨Dque contiene apartamentos de 48 metros cuadrados y d¨²plex de 93¨D de la medianera para dotarlo con amplias terrazas, un eco de los patios, que redibujan la relaci¨®n entre el interior y el exterior de una manera m¨¢s porosa, ingeniosa y fruct¨ªfera. Los espacios intermedios ¡°ni dentro ni fuera¡± hacen de las viviendas espacios m¨¢s flexibles. Todas las estancias est¨¢n iluminadas. Son los armarios, y las circulaciones, lo que queda pegado a la medianera. El resto, ventilado e iluminado, adquiere un aspecto liviano y hace entrar en el edificio ¨Dy en los pisos¨D la vegetaci¨®n existente en la calle ¨Dgrandes ¨¢rboles bien mantenidos¨D.
La presencia de la vegetaci¨®n existente de la calle, especies de gran magnitud y bien mantenidas, se aprovecha para acompa?ar el desarrollo de este peque?o y esbelto edificio.
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