Ja¨¦n, mar y monta?a con un faro de fondo
El cerro de Santa Catalina representa con su paisaje de olivos todo lo que esta provincia andaluza es y, a trav¨¦s de su castillo y de su renovado parador, todo lo que adem¨¢s quiere ser
La met¨¢fora del mar de olivos resulta tot¨¦mica en Ja¨¦n. Su parador, ubicado en el cerro de Santa Catalina, ejerce como faro no solo de esta ciudad de 112.757 habitantes, sino de su comarca. Dise?ado en 1965 con una planta alargada para adecuarse a la orograf¨ªa del monte, cuenta con una terraza que, por sus dimensiones y por constituir una prolongaci¨®n de las habitaciones, se asemeja a un paseo mar¨ªtimo. Uno se asoma y ve parte de la ciudad amarrada a esos 66 millones de olivos que inundan la provincia. No se oye nada y eso lo es todo. A 10 minutos a pie, pegado al castillo levantado por Fernando III en el siglo XIII, hay un acantilado tocado con una cruz. Abajo, la catedral y todo lo dem¨¢s. Ja¨¦n quiere no obstante ser m¨¢s que su olivar. Y cuenta con buenas razones como la arquitectura renacentista, una superficie extraordinaria de parques naturales, los muy bien conservados ba?os ¨¢rabes o 237 fortificaciones. El exterior del nov¨ªsimo palacio de los deportes de la ciudad, adornado con cer¨¢mica local que refleja los colores ocres y verdes de la serran¨ªa y rematado en la parte superior por unas almenas, corrobora lo anterior. Aunque, claro, lo han llamado Olivo Arena.
El Parador y su ciudad
Carmen M¨¦ndez, directora del parador de Ja¨¦n y valenciana de nacimiento, resume su primer a?o en la ciudad y describe el embrujo de los olivos: ¡°Pens¨¦ que iba a echar de menos el mar cuando me mud¨¦. Pero este mar verde me ha llenado por completo¡±. M¨¦ndez, que ha trabajado en seis paradores, se?ala un aspecto sentimental de esta provincia que acapara el 50% de la producci¨®n nacional de aceite de oliva: ¡°Es el sitio en el que menos he tardado en integrarme. Los jienenses son muy abiertos, acogedores y con una gran voluntad de ayudar¡±. Con 30 a?os de experiencia en Paradores, M¨¦ndez dirige este hotel vig¨ªa desde que reabri¨® en la primavera pasada tras estar 18 meses cerrado para reacondicionar los ba?os de las habitaciones, la cocina y los accesos. Tambi¨¦n se restauraron muebles y luminarias y se aprovech¨® para reubicar obras de arte como un bordado del siglo XV tejido con seda y oro en tela arpillera.
Los merenderos de Santa Catalina
Marina Garc¨ªa y Celia Guerrero son dos veintea?eras que atienden a la descripci¨®n que la directora traza de los jienenses. Garc¨ªa, licenciada en Relaciones Laborales y Recursos Humanos, y Guerrero, estudiante de Enfermer¨ªa, cuentan con entusiasmo en un banco de la plaza de la catedral c¨®mo es un d¨ªa t¨ªpico en los merenderos del cerro de Santa Catalina, un lugar popular cerca del parador al que los jienenses acuden a esparcirse en busca del aire fresco de la sierra de Jabalcuz. ¡°Preparo una pipirrana [ensalada tradicional de tomate, cebolla, pepino y pimiento], compro cerveza y unas patatas fritas¡±, cuenta Garc¨ªa, de 25 a?os, que puntualiza que el aperitivo tiene que ser de Santo Reino, un productor local que elabora patatas con aceite de oliva, ¡°y la bebida siempre es Cruzcampo porque hay una f¨¢brica en Ja¨¦n y esa marca ya es muy de aqu¨ª¡±. La cervecera acaba de inaugurar una planta de biomasa en sus instalaciones para transformar la poda de los olivos en energ¨ªa renovable, un ejemplo m¨¢s de que el mar verde no solo atrae a los de fuera sino que alimenta a los de dentro.
LUGARES Y PERSONAS QUE DAN BRILLO A JA?N
A pesar de que muchos estudiantes eligen la vecina Granada (a una hora en coche), Garc¨ªa y Guerrero han cursado sus carreras en la Universidad de Ja¨¦n (UJA). Guerrero, de 20 a?os, defiende que la facultad de Enfermer¨ªa cuenta con unos laboratorios ¡°superpreparados¡±, que ¡°los docentes son una pasada¡± y que ¡°se va a ofertar Medicina en dos a?os¡±. El rector de la UJA confirm¨® el pasado marzo que a partir del curso 2023 habr¨¢ 60 plazas disponibles del mencionado grado. Garc¨ªa, cuyos padres acudieron a la manifestaci¨®n que colaps¨® el puerto de Despe?aperros el mes pasado para protestar por el abandono institucional que sufre Ja¨¦n, se muestra m¨¢s visceral: ¡°Yo no me voy de esta ciudad ni aunque me ofrezcan trabajo fuera¡±. El presupuesto para 2021 de la UJA ha aumentado un 12% con respecto al a?o anterior (el incremento medio en Andaluc¨ªa es del 3,37%) y se sit¨²a en 128,6 millones de euros. Un impulso para fijar poblaci¨®n en una provincia que ha perdido 40.000 habitantes en la ¨²ltima d¨¦cada, seg¨²n el Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE), hasta situarse en 631.381.
¡°Esta ciudad es de mayores¡±, resume Ana Mar¨ªa Rodr¨ªguez, que regenta la tienda especializada La Aceitera Jaenera. Rodr¨ªguez, que tiene un hijo en los Pa¨ªses Bajos, otra en Sevilla y una tercera pensando en hacer las maletas, comprende a los j¨®venes pero reivindica que en Ja¨¦n se vive muy bien. ¡°Tiene la catedral m¨¢s bonita del mundo entero¡±, afirma. A fin de cuentas es la suya y eso siempre resulta un argumento de peso. Rodr¨ªguez asegura que sus mejores clientes se alojan en el parador, cuya reciente reapertura alimenta la econom¨ªa local y el alma de los lugare?os. ¡°Los jienenses han contado siempre con el parador. Aqu¨ª han celebrado las cosas m¨¢s importantes de la vida: bodas, graduaciones, doctorados¡¡±, reconoce M¨¦ndez, la directora.
DENTRO DEL PARADOR
Las tapas al sol
El discurso de las dos j¨®venes jienenses contrasta con el de un grupo de estudiantes de Psicolog¨ªa que toman el sol en una terraza de la plaza del De¨¢n Mazas, a 300 metros de la catedral. Lamentan que la ciudad no tenga tanto ambiente universitario como otras. Con las clases presenciales suspendidas, aprovechan la primavera jienense para tomar una Alc¨¢zar ¡ªla cerveza local¡ª y su correspondiente tapa.
¡ª?Dame cuatro segundas!
Grita el camarero de un establecimiento cercano, en la plaza de la Constituci¨®n. Se refiere a que le preparen cuatro tapas de las que se sirven con la segunda consumici¨®n. Los bares suelen establecer un orden para que el cliente, que casi espera comer dada su contundencia, pruebe platos diferentes.
El acompa?amiento de la ca?a, que ronda los dos euros, siempre es gratis en el centro o en el Bulevar, la zona nueva pr¨®xima a la estaci¨®n de tren por donde se expande Ja¨¦n. El casco hist¨®rico peatonalizado a finales de 2017 favorece el paseo de los mayores y el despliegue de las terrazas, en las que los lugare?os lamentan la adjudicaci¨®n de una base militar a C¨®rdoba, que iba a crear 3.000 empleos ¡ªambas provincias entraron en liza¡ª; se enorgullecen del ¨¦xito del Ja¨¦n Para¨ªso Interior, que compite en la Liga Profesional de F¨²tbol Sala y que pronto jugar¨¢ en el Olivo Arena; o comentan la malograda inversi¨®n del tranv¨ªa, cuyas v¨ªas inutilizadas sirven como aparcamiento de coches. Al caminar por las calles empinadas, estrechas y casi libres de autom¨®viles se contemplan edificios hermosos que antes pod¨ªan pasar desapercibidos. Una de estas v¨ªas conduce a los ba?os ¨¢rabes del siglo IX, convertidos en un museo en el que se explica las formas de vida de los antiguos moradores jienenses.
Tres salidas sin salir de la provincia
Sabiote, que forma el tri¨¢ngulo renacentista de Ja¨¦n junto a ?beda y Baeza; la cultura del aceite de oliva que impregna el d¨ªa a d¨ªa en estos pueblos del noreste de la provincia; o las 200.000 hect¨¢reas de superficie protegida en la sierra de Cazorla, Segura y las Villas. Haz clic en las tres fotos para descubrir planes de ocio, cultura o al aire libre y completar as¨ª tu viaje
Naturaleza y ruta de castillos
M¨¢s all¨¢ de Ja¨¦n y de su olivar mira ?lvaro Garc¨ªa, que trabaja en el sector tur¨ªstico en Cambil (2.683 habitantes, a 30 kil¨®metros al sureste de la capital). En un esfuerzo por promocionar ese Ja¨¦n que no guarda relaci¨®n con el aceite de oliva, habla del parque natural de Sierra M¨¢gina, un rico paraje m¨¢s peque?o y menos popular que la sierra de Cazorla, Segura y las Villas. Y de las 237 fortalezas de la regi¨®n, que permiten realizar al visitante una ruta de castillos. ¡°Casi cada pueblo tiene uno¡±, asegura. Pero el aceite siempre vuelve. Garc¨ªa ha subido al parador a tomar un caf¨¦ con Ana Exp¨®sito, que tiene un compa?ero de trabajo cubano en el Instituto de Estudios Giennenses que ¡°inunda la tostada de aceite cada ma?ana¡±. El buen AOVE (aceite de oliva virgen extra), adem¨¢s de picar y amargosear, es espeso y verdoso y cala el pan, no acaba en el plato como los refinados, transparentes e ins¨ªpidos.
Para buen aceite, el de Hacienda La Laguna, en Baeza (15.791 habitantes, a 49 kil¨®metros al noreste de la capital). La Diputaci¨®n de Ja¨¦n selecciona cada a?o ocho de cosecha temprana en una cata a ciegas. Doble premio se ha llevado esta almazara en 2021. Primero, por estar entre esa clasificaci¨®n, un distintivo creado en 2003 y de prestigio; segundo, porque ha ganado una licitaci¨®n para convertirse en el proveedor de aceite de la Red de Paradores (97 hoteles), una forma de que Mahoma vaya a la monta?a.
ANA, DIEGO Y ANTONIO te recomiendan
Juan Manuel C¨¢tedra es el gerente de la almazara. Nacido en Baeza, explica que esta ciudad Patrimonio de la Humanidad ha desarrollado una industria tur¨ªstica que complementa a la del aceite de oliva. ¡°Ahora la gente tiene m¨¢s cultura, quiere saber m¨¢s y conocer m¨¢s sitios. Tenemos pueblos de interior espectaculares¡±. C¨¢tedra, que por su profesi¨®n de comercial ha recorrido Espa?a, resume en dos conceptos lo que convierte un viaje bueno en uno extraordinario: ¡°Dormir bien y comer bien¡±. En Ja¨¦n saben de lo que habla.