El Atl¨¦tico condena al Celta en un partido de circo
El equipo de Manzano aprovecha los errores del Celta y los gallegos no consiguen aprovechar los regalos rojiblancos
En un partido impermeable al an¨¢lisis futbol¨ªstico, pr¨¢cticamente de circo, el Atl¨¦tico ha conseguido una importante victoria sobre el Celta de Vigo, que se complica tremendamente su futuro en primera. El Atl¨¦tico, sin jugar a nada m¨¢s que al despiste, se a¨²pa de nuevo a la esperanza de la UEFA.
Celta y Atl¨¦tico han protagonizado un monumento al desprop¨®sito en la primera mitad. Pr¨¢cticamente antes de atarse las botas, los rojiblancos ya ganaban, merced a un despiste sideral de la defensa c¨¦ltica, que se ha ido toda, presa del p¨¢nico, hacia Torres , que insinuaba un desmarque al primer palo mientras Paunovic conduc¨ªa el bal¨®n por el carril derecho. Resultado: por el segundo transitaba Nano m¨¢s solo que la una. Paunovic no ha tenido m¨¢s que pon¨¦rsela por encima de la defensa celti?a y agradecer la maniobra al Ni?o. No hab¨ªa pasado un minuto.
Apenas cuatro despu¨¦s, el tiempo que tarda la afici¨®n en sentarse, el Ni?o clavaba en segundo, en un nuevo alarde de inoperancia de los c¨¦lticos. Un c¨®rner y el bal¨®n se convierte para los gallegos en una inmensa bola de piedra, incapaces de sacarla del ¨¢rea. El m¨¢s listo, Torres, cazaba el rechace y dejaba el segundo en el luminoso. Tras una especie de introducci¨®n c¨®mica, el Atl¨¦tico se presentaba ante el partido m¨¢s pl¨¢cido que pudiera imaginar, ante un equipo apurado que ard¨ªa presa del p¨¢nico al menor acercamiento a su defensa. En estas condiciones, el Atl¨¦tico ha asustado al Celta durante un rato, hasta se ha permitido alguna pared, aunque gran parte del susto se lo provocaba el Celta solito.
Sin embargo, el Atl¨¦tico se las pinta solo para complicarse la existencia y dar vida a sus rivales. As¨ª, pasada la media hora, en una falta lateral, todos los defensas rojiblancos se han afanado en frenar a los atacantes c¨¦lticos, salvo al m¨¢s rotundo de ellos, Milosevic, que ha entrado solo al segundo palo. El p¨¢nico, entonces, ha cambiado de bando y a punto ha estado el Celta de empatar en m¨¢s de una ocasi¨®n. Sin embargo, cosas del circo en que se ha convertido el primer tiempo, ha sido Garc¨ªa Calvo el que ha cazado un rechace similar al de Torres para poner el 3-1. Y a todo esto, el f¨²tbol sin aparecer por ning¨²n sitio tras 45 minutos de partido.
Ya en la segunda, Manzano deb¨ªa haber instruido a los suyos para calmar el juego y retener el bal¨®n, pero el Celta ha salido bufando, desbocado, y ha arrinconado a los rojiblancos hasta que ha conseguido el segundo. Antes de eso ya hab¨ªa conseguido un gol fantasma y m¨¢s de un susto. Temblaba el Atletico hasta que Manzano se ha decidido a sacar del campo a Simeone, que ya no cubre el campo que su equipo necesita, y ha dado plaza a Gabi, que ha conseguido serenar un tanto el juego de los suyos. A¨²n as¨ª, por oleadas plenas de coraz¨®n y de peligro, el Celta ha tenido el empate, y lo ha merecido, pero a perro flaco todo se le vuelven pulgas.
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