Una cuesti¨®n de pegada

El Real Madrid sufri¨® mucho m¨¢s de lo que indica el marcador para superar a un N¨¤stic que tuvo momentos brillantes, pero que termin¨® sin fuerzas y cometiendo demasiadas faltas.

El presidente del Real Madrid, Ram¨®n Calder¨®n, asegur¨® en las horas previas al partido que su equipo no deber¨ªa tener problemas para ganar en Tarragona. O no conoc¨ªa al N¨¤stic o no conoce a su equipo. Porque si el Madrid se impuso al buen equipo que entrena Luis C¨¦sar fue por su efectividad, por la calidad de sus jugadores, no porque lo mereciera por su juego. Lo mejor que se puede decir del conjunto que entrena Fabio Capello es que supo reaccionar a tiempo. Nada m¨¢s.

El Real Madrid se present¨® en Tarragona con la misma alineaci¨®n que gan¨® en Bucarest al Steaua y en el Bernab¨¦u al Barcelona, pero el esp¨ªritu del equipo fue otro al inicio, muy parecido al de Getafe. Y como sucedi¨® aquel d¨ªa, el N¨¤stic se comi¨® al Madrid en la primera media hora, empezando por su centro del campo y terminando por la defensa. En ataque, Van Nistelrooy represent¨® el papel del hombre invisible.

Este equipo al que Fabio Capello trata de dar forma desprecia el bal¨®n, no lo quiere y ah¨ª empiezan algunas de sus virtudes y muchos de sus defectos. Cuando tiene espacios, la velocidad y la t¨¦cnica de algunos de sus futbolistas convierten en letales los contragolpes. Pero cuando el equipo rival se repliega y defiende con orden, el Madrid termina desesperado, sin encontrar el camino de salida. Podr¨ªan hacerlo Guti o Robinho, el que m¨¢s l¨²cido estuvo en ataque, pero sin el bal¨®n poco pueden aportar.

El t¨¦cnico del N¨¤stic, Luis C¨¦sar, un inteligente estratega, supo leer el encuentro y orden¨® una presi¨®n que ahog¨® al Madrid. El ritmo que impusieron los de casa fue alt¨ªsimo y los hombres de Capello fueron incapaces de seguirlo. Este N¨¤stic trata muy bien el bal¨®n, lo cuida y sabe construir buen f¨²tbol con ¨¦l, sobre todo Buades, un mediocentro m¨¢s que interesante. Con el campo y el bal¨®n controlados, el N¨¤stic complet¨® sus mejores minutos de la temporada y convirti¨® a Casillas en el mejor jugador del Madrid.

El r¨¢pido y h¨¢bil interior izquierdo brasile?o Gil y Buades obligaron a Casillas a recordar que es el mejor portero de Espa?a, por si alguien todav¨ªa lo dudaba. Desbordado el centro del campo, donde Diarra y Emerson ni cortaban ni creaban y Guti no aparec¨ªa, la defensa era incapaz de contener la avalancha. Y en una de esas oleadas cay¨® el primer gol. Gil super¨® con facilidad a Sergio Ramos y Cannavaro derrib¨®, de forma grosera, a Makukula, que con sus casi dos metros estuvo m¨¢s r¨¢pido y m¨¢s listo que el italiano. Buades convirti¨® el penalti y puso, con justicia, a su equipo por delante.

Ah¨ª son¨® el despertador del Madrid, que se vio fuera del partido y sin argumentos para remontarlo. Las respuestas a sus problemas se las dio el propio N¨¤stic, que equivoc¨® la t¨¢ctica, dio un paso atr¨¢s, perdi¨® metros e intent¨® frenar al rival s¨®lo con faltas. Demasiadas faltas. De una de ellas, cuando el reloj buscaba ya el descanso, naci¨® el gol del empate. Roberto Carlos situ¨® el bal¨®n, apunt¨® a la barrera, golpe¨® con potencia, Makukula salt¨® y la pelota pas¨® bajo sus pies y super¨® a Rub¨¦n. Primer tiro a puerta del Madrid y primer gol. Sin haber ofrecido nada, los de Capello se fueron al vestuario con un empate que no merecieron.

Helguera

Revitalizado por ese gol, el Madrid se encontr¨® con el segundo nada m¨¢s empezar la segunda parte. El N¨¤stic inquiet¨® algo al salir de los vestuarios, pero el que golpe¨® fue Iv¨¢n Helguera, que aprovech¨® un despiste de su marcador para rematar de cabeza un buen bal¨®n servido desde el c¨®rner por Guti. Con dos latigazos el Madrid invirti¨® el resultado.

Conseguido el objetivo de dar la vuelta al marcador, el Madrid recuper¨® sus vicios y volvi¨® a ceder el campo y el bal¨®n al rival. Pero a diferencia del primer tiempo, el N¨¤stic no lleg¨® con tanta facilidad a Casillas, que s¨®lo se vio exigido en un tiro del veterano Pinilla, que complet¨® un buen partido, y en otro de Cu¨¦llar cerca del minuto 80. Los jugadores de Luis C¨¦sar primero perdieron el aire y despu¨¦s las ideas.

Abandonado por las fuerzas, el N¨¢stic se vio incapaz de superar a un Madrid que se empe?¨® en vivir sobre el alambre hasta que ya casi al final, con los tarraconenses despistados y fuera de sitio, complet¨® la mejor acci¨®n de la noche y Robinho sentenci¨®. Ra¨²l, que vivi¨® una noche muy gris, Robinho, Diarra, Reyes y Sergio Ramos tocaron y combinaron al primer toque hasta que el centro del lateral sevillano fue rematado a gol por Robinho. Pudo aumentar la cuenta poco despu¨¦s Emerson, pero hubiera sido un castigo excesivo para el N¨¤stic, que no mereci¨® un marcador tan duro.