El Real Madrid avasalla al Barcelona

El Real Madrid ofici¨® de l¨ªder de la ACB en el primer "cl¨¢sico" de la temporada contra el Barcelona y pas¨® por encima del conjunto azulgrana, lo que le permite, adem¨¢s de la satisfacci¨®n de tumbar al rival hist¨®rico, continuar l¨ªder y poner la Copa del Rey en un horizonte muy lejano para el equipo del montenegrino Dusko Ivanovic.

La realidad de los dos grandes fue palmaria en Vistalegre. Al Madrid le va bien en la Liga ACB, de lujo. Al Barcelona le ha cogido una mala racha. Muy mala por ser el equipo que es. Llegar al primer derbi de la temporada en d¨¦cima posici¨®n, con un balance negativo (4-5) y con la clasificaci¨®n para la Copa poco clara no es lo normal. Mucho menos si cuentas con una plantilla tan competitiva, y no s¨®lo sobre el papel, porque en la Euroliga su trayectoria en es impecable (5-0).

Lo derbis dan la vuelta a las cosas con total naturalidad. Son capaces de transformar la paja en oro y el oro en paja. Pero no en esta ocasi¨®n. El Madrid marcha mejor, juega mejor y est¨¢ m¨¢s compensando. El Barca todav¨ªa debe encontrarse a si mismo. Ahora tendr¨¢ que afrontar las siete jornadas que restan para el final de la primera fase con la necesidad de ganar partidos para poder acudir a la ronda final copera de M¨¢laga el pr¨®ximo febrero. El molesto grano que siempre supone perder contra el m¨¢ximo oponente empez¨® a escocerle al equipo del montenegrino Dusko Ivanovic en el salto inicial. Felipe Reyes, extraordinario, y Alex Mumbr¨², letal en el tiro, lanzaron a los locales en medio de una aut¨¦ntica fiesta para la afici¨®n (17-7 m.7) y el Madrid nunca volvi¨® a tener agobios, urgencias o presi¨®n.

Mientras los dos campeones del mundo alimentaban la cuenta blanca -Reyes acab¨® el primer cuarto con ocho puntos y Mumbr¨² con nueve-, el estadounidense Louis Bullock completaba una labor de zapa fundamental para el Madrid en estos partidos: contener a Juan Carlos Navarro, la bestia negro del actual l¨ªder liguero, seguido desde la tribuna de pista por Ernest Grumfeld, presidente de los Washington Wizards, el equipo que tiene sus derechos para la NBA, que al final de la temporada pasada quiso ficharlo. Navarro, que luego volvi¨® a erigirse en la quinta esencia del Barcelona, tard¨® nueve minutos en anotar su primera canasta en juego. Los problemas barcelonistas pesan mucho, pesan lo mismo que veintisiete puntos en contra durante el primer cuarto (27 16).

Reacci¨®n isuficiente del Bar?a

El Madrid, sin pasar apuros nunca, s¨®lo tuvo una fase de cierta desorientaci¨®n, y no colectiva, sino individual por mor de las p¨¦rdidas de bal¨®n del turco Kemal Tunceri, que no le termin¨® de coger la onda al juego. Enseguida fue enviado al banco por el t¨¦cnico de casa, Joan Plaza, y Ra¨²l L¨®pez puso las cosas como estaban inmediatamente. El pseudo-bache pint¨® un t¨ªmido acercamiento visitante (35-25 m.15) que el base madridista trunc¨® seg¨²n lleg¨®. Navarro ya hab¨ªa despertado y era la ¨²nica baza segura de un Barcelona desconocido, desconocido porque el Barca tiene mucha m¨¢s categor¨ªa; porque Ivanovic es un fant¨¢stico entrenador y desconocido porque los derbis son terreno abonado para los equipos que necesitan inyecciones de moral y fuerza.

Acabado el primer tiempo con el Madrid a once puntos s¨®lo faltaba por despejar una duda. Quedaba saber si los azulgranas resurgir¨ªan para competir de t¨² a t¨² y optar al triunfo o ser¨ªan engullidos por el rodilla madrile?o. Un triple de Alex Mumbru para abrir el periodo y una posterior t¨¦cnica se?alada a Navarro por protestar, probablemente como producto de la rabia, aclararon la disyuntiva. El Madrid, que segu¨ªa encantado con Reyes y Mumbr¨², con Ra¨²l L¨®pez y el estadounidense Charles Smith, as¨ª como con Venson Hamilton y el serbio Ratko Varda, toc¨® los veinte puntos de diferencia (60-40 m.27).

El mayor fracaso de la tarde es atribuible a los pivots del Barca. El italiano Denis Marconato, el croata Mario Kasun y Fran V¨¢zquez lograron cuatro puntos en los tres primeros cuartos. Todos ellos, obra de Kasun y Marconato, desde la l¨ªnea de tiros libres. Demasiado poco. Digno de otro calificativo. El Barcelona no perd¨ªa en la pista del gran adversario desde 2001. Alg¨²n d¨ªa ten¨ªa que perder y ese d¨ªa ha llegado, pero con una derrota muy dura de digerir (77-56 m.35). Adem¨¢s de la falta de producci¨®n ofensiva de los pivots, le faltaron m¨¢s cosas. De hecho no pudo pasar de los veinte puntos en el parcial de ninguno de los tres periodos.

Los blancos ganaban por veintiuno a falta de cinco minutos. Y eso que Bullock s¨®lo presentaba cuatro tantos en la estad¨ªstica -acab¨® con nueve-. Normal porque ahora los hombres de Plaza juegan en equipo y el h¨¦roe es colectivo. Y esa es la f¨®rmula del ¨¦xito en baloncesto. La selecci¨®n espa?ola puede dar fe de ello.