Fidelidad europea

En cierto modo, el Bizkaia BB es un arca¨ªsmo pol¨ªtico al que a¨²n no le afecta el tratado de la Uni¨®n Europea. Se dir¨ªa, que lo s Pirineos siguen ah¨ª m¨¢s altos y potentes que nunca. Hay un Bizkaia hacia adentro y un Bizkaia hacia afuera. Por dentro, por la piel de toro que dec¨ªan los arcaicos, cojea y camina con much¨ªsima dificultad. Tanta que incluso se arriesga a un tropez¨®n inconmensurable. Por fuera, por la vieja Europa anda ligero y pizpireto (cinco partidos, cinco victorias), ajeno a disquisiciones familiares y a discusiones de cu?ados en Navidad.

El Spirou belga fue su ¨²ltima v¨ªctima en un partido c¨®modo, relajado, de esos que se juegan al tran tran con la confianza crecida y la autoestima por las nubes. Uno de esos partidos en los que inexorablemente alguien dice que sirven como trampol¨ªn para la Liga. Lo malo es que eso se ha dicho ya antes cuatro veces y de momento n o ha servido para nada.

Quiz¨¢s si ha servido m¨¢s el debut del reci¨¦n incorporado Hervelle (cedido por el Real Madrid) para ocupar el lugar vac¨ªo, en todos los sentidos, dejado por Moiso. El belga, ante los belgas, estuvo sobrado, tranquilo, como si llevara en Bilbao m¨¢s de unas pocas horas. No es un tipo musculoso de esos que intimidan, pero su versatilidad puede ser el mejor valor para un Bizkaia demasiado constre?ido.

El Siprou fue un b¨¢lsamo de tranquilidad, un equipo f¨ªsicamente sencillo y no especialmente anotador, fall¨®n incluso, entregado al guerrillero Wilkinson, el ¨²nico que fue capaz de apretar al Bizkaia en medio partido.

El nivel del Bizkaia BB estuvo muy por encima del habitual, lo esperado ante un rival que est¨¢ muy por debajo de la Liga ACB. Quiz¨¢s por eso se expliquen las dos caras, los dos gestos, del equipo bilba¨ªno en Europa y en Espa?a. El nivel es distinto y de momento se nota.

Ganado el partido demasiado pronto, los ojos cayeron todos sobre Axel Hervelle, un tipo de envergadura y con un tiro exterior importante que ayer se fue aplaudido y encantado del Bizkaia Arena y confiando en "hacer grandes cosas" con su nuevo equipo. Era el revulsivo que anunciaba el club para salir de la crisis que le mantiene primero de su grupo en Europa y pen¨²ltimo de la ACB. Los Pirineos siguen siendo una frontera.