El Almer¨ªa deja atr¨¢s el sufrimiento
Se instala en la zona tranquila tras derrotar a un M¨¢laga a la baja
Lo bueno para el Almer¨ªa no fue s¨®lo el triunfo, ya de por s¨ª importante, pues confirma su excelente momento. Lo mejor vino en la forma , en la autoridad con la que despach¨® a un M¨¢laga que, por ejemplo, fue capaz de poner en apuros a todo un Barcelona en su ¨²ltimo desplazamiento. Todo despu¨¦s de un primer tiempo insufrible, con un f¨²tbol jugado a una lentitud exasperante y en el que pr¨¢cticamente no ocurri¨® nada.
Bast¨® la aparici¨®n de un jugador b¨¢sico en los esquemas de Juanma Lillo, Soriano, para hacer un gol y a partir de ah¨ª desarrollar las virtudes que adornan al equipo dirigido por el tolosarra: firmeza atr¨¢s, control de bal¨®n y r¨¢pida salida al contragolpe. El Almer¨ªa golpe¨® primero y luego anestesi¨® al M¨¢laga, que s¨®lo fue capaz de poner en apuros a Diego Alves con un disparo lejano de Javi L¨®pez. Atraviesa el equipo costasole?o un momento delicado, con tres derrotas consecutivas que han llegado cuando se empezaba a mirar la d¨¦cima posici¨®n m¨¢s que a pelear hasta el final por el descenso. El camino para el M¨¢laga sigue ahora lleno de nubarrones.
Almer¨ªa 1 - M¨¢laga 0
Almer¨ªa: Diego Alves; Michel (Juanma Ortiz, min. 76), Pellerano, Acasiete, Cisma; M''Bami (Corona, min. 84), Bernardello, Soriano; Piatti, Crusat (Ortiz Bernal, min. 90) y Goitom.
M¨¢laga: Mun¨²a; Jes¨²s G¨¢mez, Weligton (Manolo Gaspar, min. 33), Iv¨¢n Gonz¨¢lez, Mtiliga; Valdo (Apo?o, min. 63), Toribio, Fernando, Javi L¨®pez; Benachour (Obinna, min. 67) y Caicedo.
?rbitro: Undiano Mallenco (Colegio navarro). Amonest¨® a los locales Domingo Cisma y Acasiete, as¨ª como a los visitantes Valdo, Iv¨¢n Gonz¨¢lez y Caicedo.
Goles: 1-0: m.55, Soriano.
Incidencias: Partido de la vig¨¦simo sexta jornada de Liga en primera Divisi¨®n, disputado en el Estadio de los Juegos Mediterr¨¢neos ante 10.000 espectadores.
En el repertorio de Lillo, no falt¨® el cambio en el ¨²ltimo minuto para perder tiempo. Un detalle m¨¢s para acompa?ar el pl¨¢cido final del encuentro de un Almer¨ªa que se hace equipo a pasos agigantados. Ni siquiera fue capaz el M¨¢laga de recurrir al argumento desesperado del bal¨®n largo en busca de Caicedo y Obinna. Con jugadores cuajados, caso de M'Bami, Soriano o Crusat, el trabajo de un Lillo hasta este momento no puede ser m¨¢s fruct¨ªfero. Siete partidos seguidos sin conocer la derrota alimentan con argumentos la percepci¨®n de que Almer¨ªa seguir¨¢ siendo de Primera por cuarta temporada consecutiva.
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