De los fogones al Nou Camp

Los dos son tifosi del Inter. Los dos regentan dos restaurantes italianos de Barcelona. Y los dos ir¨¢n esta noche al partido que enfrenta a su equipo del "alma", el Inter con el Bar?a. Massimo Pascucci, propietario del restaurante M¨¢ssimo en la calle de Muntaner, ir¨¢ acompa?ado de un camarero del local, catal¨¢n y cul¨¦. Michele Palmieri, comandando los fogones del Mimi-Coco, en la calle de Buenos Aires, soportar¨¢ la presi¨®n de la hinchada cul¨¦ con amigos que han venido desde Mil¨¢n. En los dos restaurantes a mediod¨ªa se respiraba el ambiente normal de un mi¨¦rcoles jornada de Champions si juega el Bar?a; muy pocos comensales. "Pasa siempre, la gente se lo debe organizar de otra manera para acabar antes y hay menos clientes a la hora de comer", cuenta Michele. Naci¨® en Trodica, una localidad de 7.000 habitantes con el Adri¨¢tico como paisaje de fondo. Se estableci¨® en Barcelona hace cuatro a?os. Tiene 34 y viaj¨® de vacaciones a la capital catalana tres a?os seguidos: 2203, 2004 y 2005.

"He corrido bastante mundo y decid¨ª establecerme en Barcelona porque me enamor¨¦ del tipo de vida y de la ciudad y aqu¨ª sigo", explica. Primero trabaj¨® como pizzero en otro restaurante: "para trabajar para otros, monto mi negocio".

En 2008 abri¨® el Mimi-Coco. "No ha sido la mejor ¨¦poca porque el a?o pasado fue malo y este.... vamos tirando pero la recuperaci¨®n es lenta. De todas formas ya estoy acostumbrado a la crisis, en Italia es permanente, por eso decid¨ª marcharme. Como muchos otros italianos", relata desde la barra del restaurante que tiene m¨¢s negocio al mediod¨ªa al estar en una zona de oficinas y negocios. Al fondo del comedor, la televisi¨®n. Quien vaya al restaurante podr¨¢ ver el partido.

"No hemos hecho ninguna convocatoria, son partidos que la gente los ve en sus casas o en el campo", a?ade. Confiesa que el Inter es su equipo del coraz¨®n pero que cuando no se trata de este partido sus colores son los del Bar?a: "el a?o pasado celebr¨¦ en la calle los t¨ªtulos". Opina que ahora al Inter, en Italia, le pasa como al Bar?a: "son envidiados". Le gusta m¨¢s el estilo de Guardiola que Mourinho. Del resultado no quiere hacer pron¨®sticos ni apuestas. Est¨¢ convencido de una cosa: "Habr¨¢ pr¨®rroga".

"Ganar¨¢ el Inter y si pierde lo har¨¢ ante el mejor equipo del mundo. As¨ª que...", dice M¨¢ssimo, al frente del restaurante que lleva su nombre, que busca argumentos tanto para la victoria como para la derrota. Sobre la barra de entrada del local, el Corriere de la Sera y el Sport. Seg¨²n quien entra pone uno encima del otro. "No, no, los dos a la vista", tercia con pragmatismo el due?o. De los cinco trabajadores del resturante, cuatro son italianos. Entrado ya en la cuarentena -"lo que vale es la edad del coraz¨®n que es m¨¢s joven", aclara- este sardo lleg¨® a Catalu?a hace algo m¨¢s de diez a?os. Despu¨¦s de vivir en Mil¨¢n muchos a?os decidi¨® marchar: "porque la ciudad era estresante y porque en Italia es muy dif¨ªcil salir adelante sino conoces a quien hay que conocer o sobornas. Es una pa¨ªs para viejos, los j¨®venes no tienen oportunidades".

En Mil¨¢n trabajaba en la cafeter¨ªa familiar y al llegar a Espa?a se estableci¨® en Masnou. Durante ocho a?os en un restaurante del puerto de esa localidad y en mayo de 2008 abri¨® el local de la calle de Muntaner, en Barcelona. Si alguien busca alg¨²n signo del Inter, no lo encontrar¨¢. De debajo del mostrador saca un bander¨ªn de un partido de la champions de febrero de 2003 en el que se enfrentaron el Inter y el Bar?a. "Perdimos 3-0. Pero eso hoy no pasar¨¢", asegura. ?resultado? "Yo acert¨¦ el 3-1 del partido en Mil¨¢n pero hoy el factor campo ser¨¢ brutal. Mi apuesta: 2-1".