Un camino fratricida

Mientras Fernando Verdasco, el n¨²mero nueve del mundo, gana las semifinales del torneo de Niza contra el argentino Leonardo Mayer (7-6 y 7-5), Rafael Nadal se termina de entrenar en la pista central de Roland Garros , que arranca el domingo, entra en la sala de prensa, saluda con dos sonoros besos a su responsable, y se dispone a desgranar lo que se le viene encima: el n¨²mero dos comenzar¨¢ la reconquista de Par¨ªs, donde el sueco Robin Soderling acab¨® en 2009 con sus cuatro a?os de reinado, ante el franc¨¦s Gianni Mina , el n¨²mero 653, finalista el a?o pasado en el torneo junior. Si el r¨¢nking pesara tanto como para imponer el pase de ronda, el mallorqu¨ªn deber¨ªa jugar en octavos contra Nicol¨¢s Almagro, en cuartos contra Verdasco y en semifinales contra David Ferrer o el serbio Novak Djokovic.

Y no es eso, sin embargo, lo que manda en las preguntas. A Nadal le consultan sobre la posibilidad de que recupere el n¨²mero uno, en su mano si vence el torneo y Roger Federer no est¨¢ en semifinales; por c¨®mo se siente al llegar por primera vez a Par¨ªs sin ser el campe¨®n ("Nada ha cambiado: la meta sigue siendo la misma"); por c¨®mo ser¨ªa volver a jugar con Federer ("Yo s¨®lo pienso en la primera ronda"); y por c¨®mo est¨¢n sus piernas, pulmones y rodillas: "Ser¨ªa una barbaridad decir que f¨ªsicamente estoy mal despu¨¦s de haber ganado los tres ¨²ltimos torneos en los que he competido, aparte con alg¨²n partido duro", argument¨® el mallorqu¨ªn, coronado en Montecarlo, Roma y Madrid. "Lo he aguantado bien, estoy feliz por c¨®mo llego: f¨ªsicamente, por supuesto, pero tambi¨¦n ten¨ªsticamente".

?Y Roger Federer? El suizo, ganador del t¨ªtulo en 2009, arrancar¨¢ contra el australiano Peter Luczak, el n¨²mero 71. Por su lado del cuadro caminan tenistas peligros¨ªsimos: el let¨®n Ernest Gulbis, su verdugo en Roma; Soderling, con el que deber¨ªa jugar en cuartos; el brit¨¢nico Andy Murray...