La porter¨ªa tapiada de Uruguay
Muslera, guardameta y pieza clave de los 'charr¨²as', solo ha encajado un gol en el Mundial
Una vez superada la f¨¦rrea l¨ªnea de cuatro defensas planteada por El Maestro Tab¨¢rez, los atacantes del resto de equipos del Mundial saben que, para batir a Uruguay, queda un ¨²ltimo escollo. Y no precisamente liviano. Est¨¢ Fernando Muslera (Buenos Aires, Argentina; 1986). El guardameta charr¨²a, de imponente estatura y desgarbada figura (1.90 metros, 74 kilos), ha demostrado tener unos guantes de oro. Y si no, se al¨ªa con los postes, como certific¨® M¨¦xico. Solo el surcoreano Chung Yong, en octavos, logr¨® batirle. A¨²n as¨ª, junto con Villar (Paraguay), es el portero menos goleado, descontados los eliminados Portugal y Suiza, tambi¨¦n con una diana en contra. Ma?ana, Muslera se pondr¨¢ de nuevo bajo los palos. Se bate con Ghana en los cuartos de final.
Muslera aprendi¨® a base de recibir palos. Nacido en Buenos Aires el mismo d¨ªa que Argentina celebraba el gol de Pasculli, ante Uruguay, que eliminaba a los charr¨²as del Mundial del 86 en octavos, pronto cruz¨® el r¨ªo de La Plata para establecerse en Montevideo. En el Wanderers, de la capital, comenz¨® a dar sus primeros pasos Muslera, m¨¢s h¨¢bil despejando balones que enca?on¨¢ndolos. Toda una herej¨ªa en una tierra hist¨®ricamente ligada a delanteros tan lustrosos como Francescoli, Recoba, Morena, Scarone o Forl¨¢n. Su seguridad hizo posible su fichaje por el Nacional, y de ah¨ª, al Lazio italiano, a comienzos del 2007, que vio en el joven uruguayo al sucesor del veterano Peruzzi.
Un prometedor debut con los romanos qued¨® emborronado con una esperp¨¦ntica actuaci¨®n ante el Milan, que le endos¨® cinco goles, cuatro de ellos por fallos del sudamericano. Ballotta (44 a?os) se convirti¨® en el cancerbero titular y Muslera pas¨® al ostracismo. As¨ª continuar¨ªa hasta mediada la siguiente temporada en la que, tras una disputa entre Carrizzo, portero titular hasta la fecha, y Delio Rossi, entrenador, dio con el charr¨²a de nuevo sobre el campo. Ya no defraud¨®. Castorino (peque?o castor), como le conocen, demuestra mayor madurez y sus caracter¨ªsticas, su agilidad y sus reflejos, quedaron acentuados. Y resalt¨® por detener penaltis, como en la final de la Coppa del a?o pasado, cuando defini¨® el partido en la tanda de penas m¨¢ximas con dos paradas sensacionales.
En Sud¨¢frica se ha convertido en uno de los bastiones de su selecci¨®n, junto a la fuerte defensa y su poderosa delantera, encabezada por Forl¨¢n y Su¨¢rez. "Uruguay ser¨¢ la sorpresa", declar¨® Muslera, quien agreg¨® que "los uruguayos tenemos un plus, por eso no nos quieren enfrente". Durante el torneo, ha batido la marca de imbatibilidad charr¨²a de Ladislao Mazurkiewicz, que estuvo 277 minutos sin recibir gol alguno, por los 338 que ha patentado Muslera. El balance con la celeste no puede ser m¨¢s halag¨¹e?o para ¨¦l: en 10 partidos, ocho de ellos oficiales, ha ganado siete, empatado dos y perdido uno, encajando seis tantos. En el Mundial tan solo ha recogido una vez el bal¨®n del fondo de la red.
Y lejos de la soledad que pueda escudar a los porteros, Muslera se siente seguro: "Los postes son mis amigos". En cuartos, contra Ghana, toca refrendar dicha amistad.
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