El fin de una hermosa amistad
Contador logra el 'maillot' amarillo con un ataque desencadenado cuando Andy Schleck sufri¨® una aver¨ªa
Solo ya jubilados Anquetil y Poulidor o Fuente y Oca?a o Bartali y Coppi empezaron a ser amigos. Colegas de tertulias, de jugar a las cartas, de contarse batallitas, de quedar con las familias. En carrera eran rivales, lo que en ciclismo puede llegar a significar enemigos irreconciliables. Sin embargo, como campeones que eran, conoc¨ªan el valor de los gestos, de los s¨ªmbolos, de la generosidad. Merckx nunca fue m¨¢s grande, quiz¨¢s, que el d¨ªa en que se neg¨® a ponerse el maillot amarillo que hab¨ªa perdido Oca?a, ca¨ªdo y herido en el col de Ment¨¦.
En Luchon tambi¨¦n, en el mismo pueblo pirenaico del gesto de Merckx hace 39 a?os, Alberto Contador se visti¨® de l¨ªder del Tour entre los pitidos de los aficionados, que no hab¨ªan entendido que hubiera atacado cuando a Andy Schleck se le hab¨ªa salido la cadena despu¨¦s de un ataque duro, dur¨ªsimo, en los ¨²ltimos dos kil¨®metros del tremendo puerto de Bal¨¨s. La conclusi¨®n de la etapa, la pol¨¦mica exacerbada quiz¨¢s exageradamente, demuestra no solo que la amistad pregonada d¨ªa tras d¨ªa entre los dos duelistas del Tour, dos rivales en ciclismo, era antinatural, y por lo tanto, condenada a romperse, sino que las victorias p¨ªrricas siguen produci¨¦ndose. Contador gan¨® por 8s un maillot amarillo que, quiz¨¢s, a¨²n no necesitaba -y que contaba con conquistar a lo grande el jueves en la cima del Tourmalet, el s¨ªmbolo m¨¢s grande del Tour, pero perdi¨®, seguramente, la amistad de un corredor, quiz¨¢s, el aprecio de la afici¨®n, y quiz¨¢s, la oportunidad de haber dejado su sello personal de elegancia y generosidad en su probable tercera victoria en el Tour.
15? Etapa
1. Thomas Voeckler (Francia/Bbox-Bouygues)
2. Alessandro Ballan (Italia / BMC Racing)
3. Aitor Perez (Espa?a / Footon)
4. Lloyd Mondory (Francia / AG2R)
5. Luke Roberts (Australia / Milram)
6. Francesco Reda (Italia / Quick-Step)
7. Alberto Contador (Espa?a / Astana)
8. Samuel Sanchez (Espa?a / Euskaltel)
9. Denis Menchov (Rusia / Rabobank)
10. Brian Vandborg (Dinamarca / Liquigas)
Clasificaci¨®n general
1. Alberto Contador
2. Andy Schleck
3. Samuel S¨¢nchez Gonz¨¢lez
4. Denis Menchov
5. Jurgen Van den Broeck
Como dos amigos que ri?en porque uno le levanta la novia al otro, as¨ª los dos protagonistas del Tour. En lugar de un cap¨ªtulo m¨¢s en la historia de una hermosa amistad, una relaci¨®n con el luxemburgu¨¦s de partidas de caza en invierno por los montes de Toledo, de vacaciones conjuntas en playas paradisiacas, el d¨ªa acab¨® con Andy Schleck clamando venganza y con Contador declamando un memorial de agravios. "Y recuerdo que obligu¨¦ a mis compa?eros a que pararan el d¨ªa que Frank y Andy se cayeron en Spa", dijo. "Y recuerdo que al d¨ªa siguiente atacaron justo cuando nos cortamos detr¨¢s de la ca¨ªda de Frank, y que hice los ¨²ltimos 30 kil¨®metros con la bici averiada, y nadie se par¨®".
Como condenado por una maldici¨®n, un Tour m¨¢s, el chico de Pinto, el mayor talento jam¨¢s conocido sobre una bicicleta, se ver¨¢ obligado a definirse sobre sus relaciones personales, sobre el falso enemigo, sobre el falso amigo, antes que sobre sus capacidades deportivas. Y sus cronistas con ¨¦l, ya habituados a las paradojas. La del a?o pasado, la de Lance Armstrong, el enemigo dentro de su equipo; la de ¨¦ste, la de Andy, el amigo con el que se juega el Tour. Qu¨¦ fastidio.
Todo por un malentendido, un fogonazo. Todo ocurri¨® en menos tiempo del que se tarda en relatarlo. Despu¨¦s de que uno tras otro, O'Grady, Voigt, Sorensen el viejo, Fuglsang y Sorensen el joven, sus chicos del Saxo, prepararan el terreno agot¨¢ndose uno tras otro en llevar al pelot¨®n a vivo ritmo en la ascensi¨®n de Bal¨¨s, Andy, que ya pas¨® de pegarse a la rueda de Contador, entr¨® en acci¨®n. Aceler¨® en cabeza. Analiz¨® la respuesta de su rival. Par¨®. Se descolg¨® al fondo del grupo. Jug¨® al despiste. Luego, cuando menos se le esperaba, cuando el puerto hab¨ªa perdido gran parte de su dureza, sali¨® desde atr¨¢s. Eligi¨® el momento justo, con Contador encerrado tras otros dos corredores. Muy fuerte, muy ¨¢gil, en cuatro pedaladas hizo un gran hueco, que Vinok¨²rov, siempre vivo, trat¨® de cerrar esprintando, que Contador, ¨¢gil pese a la encerrona, se aprestaba a anular. Y fue en ese momento cuando Andy intent¨® cambiar y la cadena se trab¨®. Se sali¨®. Pedaleaba en el vac¨ªo cuando Contador, como una exhalaci¨®n, le pas¨® por la izquierda sin mirar atr¨¢s, sin pararse a preguntar. "Estaba cerrado, pero sal¨ª bien porque ten¨ªa buenas piernas", dijo el chico de Pinto. "Estaba pensando en atacar en los ¨²ltimos kil¨®metros, como as¨ª ha sido". Aceler¨® y se fue, y detr¨¢s de ¨¦l los duelistas del podio, Menchov y Samuel, que tambi¨¦n ol¨ªan la posibilidad de pasar a pelear por la segunda plaza.
Jaleado desde el coche, gasolina al fuego, alas al impulso —"sigue, sigue, le dec¨ªamos por el pinganillo", explic¨® su director franc¨¦s, Yvon Sanquer—, Contador acelera. S¨®lo vuelve la cabeza cuando desde el coche le dicen que Andy ha perdido terreno por la aver¨ªa. "Pero para entonces ya estaba lanzado, ya estaba en pleno ataque, no me pod¨ªa parar", dijo Contador. "Entiendo la pol¨¦mica y entiendo que habr¨¢ gente que lo entienda y gente que no lo entienda". Poco despu¨¦s se deja alcanzar por Samuel y Menchov, que echar¨¢n el resto en el descenso, en el llano hasta Luchon. Por detr¨¢s, hermoso como todos los ca¨ªdos, Andy se rehace, remonta, mirando al frente siempre, lucha para no perderlo todo. En la meta, 39s, ocho m¨¢s de los que sacaba a Contador. En la meta, tambi¨¦n, rabia.
"Esto me da m¨¢s motivaci¨®n para los d¨ªas que quedan. Tengo hormigas en las piernas. Tengo ganas de seguir atacando", dijo el luxemburgu¨¦s, la furia y la rabia desbordando su rostro gentil, sonriente, educado. "Por supuesto que habr¨¢ revancha. No s¨¦ si Alberto hizo bien o mal, pero desde luego a m¨ª no me habr¨ªa gustado lograr as¨ª el maillot amarillo".
"A m¨ª, desde luego, me gusta estar de amarillo como siempre, aunque tambi¨¦n me gustar¨ªa estarlo de una forma diferente", dijo Contador. "De todas formas, 30s arriba o abajo no van a cambiar el Tour".
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