Limpio y eficaz Villarreal
El conjunto amarillo vence sin sudores y con dos tantos a bal¨®n parado al Almer¨ªa, un equipo tan aseado como inocente
A bal¨®n parado solvent¨® el Villarreal un partido inc¨®modo por la obligatoriedad de la victoria tantas veces presupuesta ante rivales de menor enjundia pero que se juegan la vida en cada partido. Sucumbi¨® el Almer¨ªa por su poca destreza defensiva y sus limitadas apariciones por la morada de Diego L¨®pez. En cambio, Alves tuvo que apaciguar en demasiadas ocasiones el fuego creado por los amarillos y apenas apagado por una defensa de futbol¨ªn. Pesaron m¨¢s las presencias que las ausencias en un Villarreal que sigue con buen paso y criterio en el inicio de a?o.
La identidad de un equipo no solo se mide en funci¨®n de ciertas individualidades. Ante las ausencias, los sustitutos deben de mostrar que el sello del equipo no se pierde. Suplir a Marchena resulta menos complicado de lo previsto en el Villarreal. Sancionado Musacchio, a Catal¨¢ le toc¨® ejercer de central sin problemas. La baja de Senna, que se perder¨¢ el pr¨®ximo mes de competici¨®n y que est¨¢ dejando de ser habitual en la formaci¨®n inicial, hace que Borja Valero tenga que retrasar su posici¨®n para iniciar la creaci¨®n. M¨¢s complicado resulta reemplazar a Nilmar. A Marco Ruben le toca suplantarle sin poseer la habilidad del brasile?o y su capacidad de asociarse.
VILLARREAL 2 - ALMER?A 0
Villarreal: Diego L¨®pez, ?ngel, Gonzalo, Catal¨¢, Capdevila, Bruno, Borja Valero, Cani, Cazorla ( Matilla Min. 70), Rossi ( Altidore Min. 82), Marco Ruben ( montero Min. 78).
Almer¨ªa: Diego Alves, Michel, Marcelo Silva, Carlos Garc¨ªa, Juanma Ortiz, Bernardello, M?Bami, Crusat ( Goitom Min. 73), Piatti ( Ortiz Min. 84), Corona ( Ulloa Min. 61), Uche.
Goles: 1-0 Min. 21 Catal¨¢. 2-0 Min. 58 Borja Valero.
?rbitro: Villaneva Iglesias (Gallego). Mostr¨® tarjeta amarilla a los locales Marco Ruben, y a los visitantes Diego Alves, Carlos Garc¨ªa y Juan Manuel Ortiz.
18.000 espectadores en el estadio El Madrigal.
Con ello tendr¨¢ que convivir el Villarreal en las pr¨®ximas semanas, en las que descubrir¨¢ si jugadores de primer nivel complementados con futbolistas de la cantera son suficientes para las altas aspiraciones. Catal¨¢ se encarg¨® de transmitir un voto de confianza a sus compa?eros y la grada. El defensa, que en la temporada anterior cumpl¨ªa su cometido en el filial, adelant¨® al Villarreal al rematar un saque de falta lateral de Borja Valero. Cabece¨® Catal¨¢ al igual que hubiese podido hacerlo Capdevila o Gonzalo, que por ah¨ª andaban sin ning¨²n jugador almeriense que le hiciese sombra.
Es evidente que el sistema defensivo del Almer¨ªa es mejorable, o que Jos¨¦ Luis Oltra conf¨ªa m¨¢s en la productividad ofensiva de sus equipos. Ya le sucedi¨® la temporada pasada al t¨¦cnico valenciano dirigiendo al Tenerife, cuya rom¨¢ntica exposici¨®n no supl¨ªa la ingenuidad en su ¨¢rea. La apariencia del conjunto andaluz resulta agradable. Pero es solo apariencia.
El problema del Almer¨ªa es que se top¨® con un Villarreal que ha asimilado el orden, que resulta dif¨ªcil de descomponer y que cuenta con un elenco de grandiosos futbolistas con ganas de demostrarlo. Como lo hizo Rossi, cuyos controles, fintas y cambios de ritmo destaparon las carencias de los centrales del Almer¨ªa. Cazorla, siempre en contacto con el esf¨¦rico, sembraba el p¨¢nico en los rojiblancos, bien acompa?ado el asturiano por Cani, otro esteta. Menci¨®n aparte merece Bruno, multifunciones ¨¦l y omnipresente en todas las partes del terreno de juego.
Intent¨® crecer el Almer¨ªa en un segundo acto en el que el Villarreal simul¨® ceder terreno y perder el paso. A falta de terciopelo, el conjunto de Garrido solvent¨® el inc¨®modo tr¨¢mite a bal¨®n parado. Borja Valero ejecut¨® con maestr¨ªa una falta al borde del ¨¢rea. Nada pudo hacer Diego Alves y el Almer¨ªa ante un Villarreal pulcro y eficaz.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.