Un mazazo aleccionador

Antonio Amaya (Madrid; 1983) llega al Betis procedente del Wigan, donde no ha conseguido triunfar. De hecho, el a?o pasado jug¨® cedido en el Rayo, su equipo de toda la vida. En Inglaterra, bajo las ¨®rdenes de Roberto Mart¨ªnez, solo jug¨® tres partidos, ninguno de la Premier. Pero esa experiencia le ha servido para madurar, por m¨¢s que fuera, en ocasiones, un tormento. "Ha sido lo mejor que ha podido hacer", explica su hermano Iv¨¢n, jugador del Murcia. "Pero nos dijo que nada m¨¢s llegar al Wigan, se quer¨ªa volver", a?ade M¨ªchel, su capit¨¢n en el Rayo y, sobre todo, su amigo. El equipo verdiblanco ha pagado 200.000 euros al Wigan y el defensa ha firmado un contrato de tres a?os.

"Volvi¨® siendo un jugador mucho m¨¢s serio", afirma M¨ªchel, que ha jugado con ¨¦l muchos a?os en el conjunto madrile?o. E Iv¨¢n lo argumenta: "Ha vuelto m¨¢s centrado, m¨¢s profesional. Ha mejorado en todo, incluso f¨ªsicamente porque ahora es m¨¢s fuerte". Y ampl¨ªa: "Antes era m¨¢s disperso, pero ahora se ha convertido en un central que va bien con las dos piernas, contundente y que usa muy bien su envergadura [mide 1,92], pero sin ser excesivamente agresivo". Lejos queda ya su estancia en Inglaterra, todo un mazazo en lo an¨ªmico. "Que un club apueste por ti [el Wigan pag¨® por ¨¦l y Diame casi cuatro millones de euros] y que despu¨¦s veas los partidos desde la grada se hace duro", comenta Iv¨¢n, que trat¨® de animarle sin ¨¦xito en un viaje que hizo all¨ª en Navidades.

La vuelta al Rayo tampoco fue sencilla. Pese a que deportivamente mejor¨® (28 partidos) y seg¨²n su hermano "ha sido su mejor a?o", los problemas vinieron por la parte econ¨®mica. "Volvi¨® a Vallecas perdiendo dinero y se encontr¨® con un marr¨®n", asegura Iv¨¢n; "si no llega a ser porque yo no ten¨ªa problemas y le pude ayudar, lo habr¨ªa pasado muy mal. Por suerte, Sandoval le dio mucha confianza y consiguieron ascender". Pero eso no le quit¨® el buen humor. "Es una persona que asegura el buen rollo en el vestuario, ya que siempre est¨¢ haciendo bromas", aclara M¨ªchel.

Al Betis llega con el aval de Pepe Mel, con el que coincidi¨® en el Rayo antes de irse al Wigan, pero sobre todo tendr¨¢ el apoyo de su familia. "Vamos a estar muy encima de ¨¦l, tanto mis padres como yo", avisa su hermano mayor. Pase lo que pase, ser¨¢ dif¨ªcil que juegue menos que con el Wigan.