Luis Garc¨ªa maltrata al Espanyol

Hay futbolistas que no mudan la piel cuando cambian de camiseta. Luis Garc¨ªa siempre fue un delantero irreductible en los distintos equipos en los que jug¨® desde que parti¨® del Madrid. El asturiano cal¨® tan hondo en el Espanyol que incluso era su capit¨¢n cuando hace quince d¨ªas abandon¨® Cornell¨¤. Ayer, ya con la zamarra del Zaragoza, no tuvo misericordia con sus excompa?eros blanquiazules. A sus 30 a?os, mantiene su vena competitiva y, en situaciones l¨ªmite o de m¨¢xima exigencia, es el pero enemigo. El partido fue un di¨¢logo entre Luis Garc¨ªa, auxiliado por las entradas desde las bandas de Lafita, y el Espanyol. Venci¨® el delantero porque marc¨® los dos goles de su equipo, el ¨²ltimo en el descuento, despu¨¦s que Cristian le parara un penalti que provoc¨® la expulsi¨®n de Javi L¨®pez.

Al Espanyol, superior en el juego, le condenaron las jugadas epis¨®dicas que precisamente le dieron la victoria ante el Athletic. No tuvo suerte con la lesi¨®n de Verd¨²; encaj¨® dos goles absurdos y reprobables porque fue superado en el cuerpo a cuerpo en las ¨¢reas, una suerte que se supone domina por su juego viril; y tampoco ayudaron los cambios de Pochettino. Javi M¨¢rquez y Alvarito, dos futbolistas interesantes, fueron nuevamente se?alados por el entrenador. No gana el Espanyol un encuentro en cancha ajena desde enero, en casa del Getafe. Ayer ni siquiera le alcanz¨® con un gol de Javi Lopez en una jugada bien atacada por Sergio Garc¨ªa y mal defendida por la zaga de Roberto. Acaso Weiss, punzante y din¨¢mico, fue el ¨²nico que cambi¨® el rostro desmoralizado del Espanyol, acomplejado fuera de Cornell¨¤.

No funcion¨® el Zaragoza como equipo, especulador y defensivo desde que se encontr¨® con el primer gol de Luis Garc¨ªa, que cabece¨® de forma picada un centro del incisivo Lafita. No le interes¨® la pelota y cedi¨® la cancha. Respondi¨® bien el Espanyol despu¨¦s del descanso y por f¨²tbol ten¨ªa bien ganado el empate. Tuvo m¨¢s f¨²tbol que su rival, llegada y hasta remate por la agresividad de Sergio Garc¨ªa. Justo cuando ten¨ªa el partido de su parte, despu¨¦s del empate, concedi¨® un penalti en una acci¨®n aislada a falta de seis minutos para el final. Apareci¨® entonces la figura del arquero argentino Cristian, que le sac¨® el tiro a Luis Garc¨ªa, y las apuestas coincid¨ªan en que se impon¨ªan las tablas. Ocurre que Luis Garc¨ªa no se vence hasta que pita el ¨¢rbitro y en la prolongaci¨®n firm¨® la victoria. El asturiano, muy seco el a?o pasado, se reencontr¨® con el gol justamente cuando se vio frente a su querido Espanyol.

Zaragoza 2 - Espanyol 1