El fuego sigue vivo en Olaz¨¢bal

Eran tres generaciones de golfistas sentadas a la misma mesa, este mediod¨ªa en el Club de Campo del Mediterr¨¢neo, que desde el jueves al domingo acoge la cuarta edici¨®n del Masters de Castell¨®n. A la derecha sonre¨ªa el moreno italiano Matteo Manassero, que la temporada pasada se convirti¨® en este mismo torneo en el ganador m¨¢s joven en la historia del circuito europeo, con 17 a?os y 188 d¨ªas. En el medio, de anfitri¨®n, Sergio Garc¨ªa, quien a los 31 a?os vuelve a sentir el cosquilleo del golf despu¨¦s de dos cursos entre tinieblas, y que en su casa quiere volver a saborear un t¨ªtulo que acabe con tres campa?as en blanco. Y a la izquierda, alguien que lucha porque ese fuego siga vivo dentro de ¨¦l, Chema Olaz¨¢bal, a los 45 a?os capit¨¢n europeo de la Copa Ryder, unos galones y un palmar¨¦s con dos grandes que le permitir¨ªan disfrutar de una vida m¨¢s tranquila, de un retiro glorioso, de la fama bien ganada, pero que sigue luchando y luchando por sentirse jugador, para que no se apague la llama del juego. Dice Miguel ?ngel Jim¨¦nez que se siente orgulloso de haber compartido carrera con tres generaciones diferentes de jugadores. Y ah¨ª estaban las tres, en fila. Olaz¨¢bal es 14 a?os mayor que Garc¨ªa, y este 13 a?os mayor que Manassero.

La cara chorreando de sudor, la barba de unos d¨ªas, el dedo ¨ªndice de la mano derecha envuelto con una tirita y la pulsera de la fundaci¨®n de Seve Ballesteros en la mu?eca (como tambi¨¦n Manassero). Olaz¨¢bal es la imagen de un luchador que se aferra con las u?as al campo de golf. Hace tres a?os que los dolores de espalda le impiden ni siquiera levantar unas pesas, hace poco que ya puede hacer algo de carrera, pero los dolores nunca han desaparecido. Y, sin embargo, sigue en la brecha. ?Por qu¨¦? "Porque la motivaci¨®n sigue estando ah¨ª. Tengo molestias y convivo con ellas. No puedo entrenarme lo que quisiera y lo que ser¨ªa necesario para estar al m¨¢ximo.... Me levanto y a veces estoy m¨¢s duro de lo normal, me encuentro peor, pero la motivaci¨®n est¨¢ ah¨ª, no se va. Sigo trabajando duro, que es el ¨²nico modo que conozco de hacer las cosas. Me gustar¨ªa volver a ser competitivo, poder volver a estar ah¨ª en alg¨²n torneo", ha explicado el campe¨®n vasco.

Hace un par de semanas, en el Masters de Madrid, Olaz¨¢bal no pas¨® el corte. Incluso se le vio tirar el palo por los aires tras el segundo golpe de un par tres, y menear la cabeza en se?al de descontento con su juego. La competici¨®n, sin embargo, le permite seguir en activo, mantener las sensaciones de golfista y ver de cerca a los jugadores a los que tendr¨¢ que seleccionar para la Copa Ryder de 2012. Entre ellos a Sergio Garc¨ªa, como esta semana en el Masters de Castell¨®n. "M¨¢s le vale clasificarse para la Ryder", le ha lanzado Chema a Garc¨ªa. "Sergio tiene un carisma especial. Tiene juego de largo. Debe divertirse en el campo. Ha estado en una Ryder sin jugarla (la ¨²ltima edici¨®n, como vicecapit¨¢n) y sabe que eso no es bonito. Ahora tiene una motivaci¨®n extra para jugarla". A su lado, el castellonense recogi¨® el guante: "Sin ninguna duda, me veo all¨ª. Quiero meterme yo, no pasarle a Chema, al gran capit¨¢n, el marr¨®n de tener que cogerme. Yo no vuelvo a una Ryder si no es para jugarla".

Y mientras acumula informes para la Ryder -informes conseguidos en directo, en persona en el campo, y en papel, porque ni le gusta ni entiende las tecnolog¨ªas, hasta el punto de que no tiene ordenador, ya no digamos las redes sociales-, Olaz¨¢bal sigue en pie. Su figura es reverenciada en cualquier campo y no solo por su capitan¨ªa. El vasco ha jugado 14 torneos del circuito europeo este a?o. En los ¨²ltimos seis no ha pasado el corte y su mejor resultado es un quinto puesto en el Open Iberdrola, en mayo. Es una tarjeta mucho mejor que la de 2010, cuando solo tom¨® la salida en tres competiciones, por las 16 de 2009.