El Bizkaia no ve la luz

No es para el Bizkaia un buen ejemplo los guarismos bajos. Quiz¨¢s no es el camino, menos ante el que era extra?o colista de la ACB que se movi¨® con comodidad en la t¨®nica general de una Liga donde las canastas est¨¢n m¨¢s intactas que nunca. No es la defensa lo que actualmente mejor define al equipo de Katsikaris, menos a¨²n sin los largos brazos de Hervelle (al que se ha sustituido temporalmente por el bosnio Krupalija, del Hy¨¨res-Toulon franc¨¦s), ni la multitud de puntos de un gran Marko Banic, lo que mejor define el ataque del equipo vizca¨ªno. Gran Canaria no era un mal sitio para romper el s¨ªndrome del abandono frente al efecto Miribilla.

Se siente el Bizkaia como ausente, teresiano, cuando sale de Bilbao y la cancha de un presuntamente apocado equipo insular, parac¨ªa un nido adecuado para dejar los polluelos de la victoria que rompiesen tanta frustraci¨®n. Hasta el p¨²blico cantaba a su equipo eso tan doloroso de "p¨ªo, p¨ªo" cada vez que perd¨ªa en la Roca, ahora un tanto agujereada.

Fue un duelo bajo la techumbre: ahora tiras t¨², ahora yo. Y tir¨® mejor el equipo canario

Pero no, el s¨ªndrome continu¨®. De poco sirvi¨® la igualdad en el marcador en cada cuarto, en el que nadie permit¨ªa escapadas de caballo jerezano. Eran como dobles parejas. Los arranques de Haynes y Palacios eran contrarrestados por las respuestas de Banic y Fischer. Luego, tras un ajustado final de primera parte (32-31), las acometidas de Beir¨¢n y Rey fueron defendidas por los escudos de Mumbr¨² y Grimau. Y todo as¨ª, con poco nivel de conjunto.

Parec¨ªa flaquear el Bizkaia en el ¨²ltimo cuarto, cuando el Gran Canaria alcanz¨® un 72-69 a falta de 1,15m. Ah¨ª se desat¨® el duelo de tiros libres. Ah¨ª, donde derivan los partidos que no han tenido jerarqu¨ªa, ni jefes, ni pistoleros adecuados. Ah¨ª, como un duelo bajo la techumbre, ahora t¨², ahora yo, ahora t¨², ahora yo. Los tiros libres, en los tramos finales son el argumento de suspense que buscan quienes solo ven los finales del partido, alargando el mito de que en el baloncesto, el resto sobra.

Es un asunto emotivo, por decisivo, pero nada ilustrativo, por aleatorio. Y le toc¨® al equipo canario llevarse el partido, m¨¢s fino con el gatillo que el Bizkaia, que no encuentra el nivel que le pertenece y se escapa de los puestos de play off. Y de su propia personalidad, que es lo m¨¢s preocupante.

Es largo el camino, y por lo tanto muchas las posibilidades de encontrar la senda adecuada, pero de momento la br¨²jula sigue dando algunos bandazos inadecuados y cediendo decisiones acertadas que podr¨ªan fomentar la autoestima de un equipo que vive su temporada m¨¢s ilusionante: Liga, ?Copa?, Euroliga. Lo so?ado. Pero le falta un punto. Hoy no han sido los tiros libres sino su incapacidad para gobernar sus posibilidades. Vamos que le pasa como a Europa. Nada nuevo bajo la techumbre.