Con Pep en el coraz¨®n

El partido que disputaron el Barcelona y el M¨¢laga en el Camp Nou sumaba el n¨²mero 118 de Guardiola en el banquillo del Camp Nou, el 75 de Liga. La directiva ha fijado que el adi¨®s oficial al entrenador, que dejar¨¢ el club el 30 de junio, se celebrar¨¢ el pr¨®ximo s¨¢bado, contra el Espanyol, en un derbi. Pero a la afici¨®n no se le pueden programar los sentimientos as¨ª que Guardiola empez¨® a recoger muestras del agradecimiento de unos seguidores que no le olvidar¨¢n jam¨¢s y que tienen una deuda eterna con Guardiola.

La afici¨®n le recibi¨® con aplausos y core¨® su nombre

No se llen¨® el estadio, seguramente por eso de la hora, las ocho de la tarde. Hac¨ªa mucho tiempo que un partido en el Camp Nou no comenzaba con luz natural y, en d¨ªa laboral, ya se sabe que la asistencia baja. 67.854 espectadores de acercaron al barrio de Les Corts y, evidentemente, siguieron el partido con un ojo en el campo y con otro buscando a Guardiola. El entrenador se tom¨® su tiempo para mostrarse y apareci¨® por el t¨²nel de vestuarios m¨¢s tarde de lo acostumbrado. Mientras Manel Vic, la voz del Camp Nou desgranaba por megafon¨ªa la alineaci¨®n de los jugadores del M¨¢laga. Tras saludar a Manuel Pellegrini, se sent¨® en el banquillo mientras la afici¨®n coreaba los nombres de los jugadores titulares del Barcelona y perd¨ªa de vista al entrenador. Sentado junto a Tito Vilanova, el que ser¨¢ su sustituto, dio un sorbo a su botellita de agua, cumpliendo con la costumbre. Guardiola no se puso en pie hasta que transcurrieron cinco minutos de partido. La afici¨®n le recibi¨® con aplausos y core¨® su nombre. Dif¨ªcilmente podr¨ªa leer las decenas de telas pintadas y cartulinas con mensajes que poblaron la grada y sirvieron de decorado a su pen¨²ltimo partido de Guardiola en el Camp Nou.

En las pancartas, la mayor¨ªa de aficionados le daba las gracias, como la de la pe?a barcelonista de la ciudad polaca de Katowice. Algunas desconcertaban un poco ¡ª¡°Sr. Guardiola, homenaje y monumento y a seguir corriendo¡±¡ª, muchos avisaban de que Pep seguir¨¢ en el coraz¨®n del autor del mensaje, alguna estaba escrita en japon¨¦s. No falt¨® el que le ped¨ªa que volviera pronto. Las hubo reversibles, despidiendo con afecto al t¨¦cnico por un lado y dando la bienvenida a Tito Vilanova y una especialmente original: ¡°Ziga zaga forever¡±, escribi¨® uno recordando el sorprendente mensaje que Guardiola lanz¨® desde el balc¨®n de la Generalitat durante las celebraciones de la primera Liga de la era Cruyff, la de la temporada 1990-1991, la primera de Hristo Stoichkov.

¡°Es un tributo que le debemos¡±, razon¨® Andoni Zubizarreta. El director deportivo le puso raz¨®n a las espont¨¢neas muestras de afecto de la afici¨®n, que en el segundo tiempo, a la altura del minuto 22, aprovechando que estaba el t¨¦cnico estaba de pie, fuera del banquillo, volvi¨® a corear de forma estruendosa su nombre, obligando al entrenador a levantar los brazos en se?al de gratitud.

El homenaje puede que est¨¦ por llegar, pero las muestras de gratitud empezaron desde el instante en que anunci¨® p¨²blicamente que se va, el pasado viernes. Ayer, en su pen¨²ltimo partido en el Camp Nou, gan¨® el Barcelona y super¨® otro r¨¦cord en la historia del club. Nunca en el campeonato liguero el Bar?a hab¨ªa marcado tantos goles. Van 108 este a?o. Con los de ayer, suma el Barcelona 358 goles marcados y 78 encajados en los 118 partidos con Guardiola en el banco del Camp Nou.