El pol¨¦mico punto de la tierra azul

Vestido con unos vaqueros y una camisa blanca, solo la voz identifica al tit¨¢n de la arcilla en un lujoso hotel madrile?o. Rafael Nadal se sienta para hablar del torneo de Madrid, que arranca este s¨¢bado. Dos asuntos le ocupan. Primero, la novedosa pista de arcilla azul que estrena el torneo pese a su oposici¨®n, la del suizo Roger Federer y la del serbio Novak Djokovic, que ven en ella una dificultad a?adida a una cita que se juega en altura (650 metros). Luego, las razones por las que este torneo es el que menos luce en su palmar¨¦s de los que se disputan en arcilla. En Madrid, donde solo gan¨® en 2010, cuando ya lo ha hecho ocho veces en Montecarlo y siete en Barcelona, Nadal suma el 33% de sus derrotas sobre tierra.

La pista resbala un poquito m¨¢s de lo habitual, es escurridiza, y en algunos momentos est¨¢ un pel¨ªn blanda Rafael Nadal

¡°Este es el torneo m¨¢s dif¨ªcil de la temporada de tierra, el m¨¢s complicado, el menos parecido a tierra¡±, argument¨® sobre c¨®mo afectan al juego la altura de la capital (vuela m¨¢s r¨¢pido la pelota, es m¨¢s dif¨ªcil controlarla) y el nuevo tintado del albero, que pis¨® por primera vez el jueves. ¡°La pista te da m¨¢s opciones de jugar peor. Para los especialistas en tierra, los factores van un poquito en contra aqu¨ª. Para jugadores como Isner, Raonic o Federer, puede ir muy bien. Favorece y premia much¨ªsimo, para ser una pista de tierra, el servicio y el primer golpe. Lo hace m¨¢s de lo habitual. La bola viaja muy r¨¢pida y en lugar de saltar hacia arriba, salta un pel¨ªn hacia adelante¡±, sigui¨®. ¡°Luego, hay dos problemas y medio en la central. La valla de publicidad de atr¨¢s es baja y del mismo color de la pista. Marea. Se pierde mucho la pelota cuando el rival la golpea a esa altura. La pista resbala un poquito m¨¢s de lo habitual, es escurridiza, y en algunos momentos est¨¢ un pel¨ªn blanda, con botes irregulares¡±, cerr¨®, apelando a la prudencia, porque solo se ha entrenado una vez y la pista central, que se construye ¨²nicamente para el evento, puede no estar asentada a¨²n.

¡°La tierra azul ha sido desarrollada teniendo en cuenta los par¨¢metros que condicionan el tipo de juego en tierra batida y las sensaciones percibidas por tenistas profesionales¡±, explican desde Incotec, la compa?¨ªa que durante cuatro a?os de experimentos desarroll¨® el producto en coordinaci¨®n con Cidaut (Fundaci¨®n para la Investigaci¨®n y Desarrollo en Transporte y Energ¨ªa) y Aiica (Asociaci¨®n de investigaci¨®n de las Industrias del Curtido y Anexas). ¡°Ha sido testado en todas las interacciones posibles con el juego y con el jugador y cumple las especificaciones t¨¦cnicas de la Federaci¨®n Internacional para competiciones oficiales¡±, cierran en la compa?¨ªa, que us¨® un ca?¨®n hidr¨¢ulico y una c¨¢mara de alta velocidad para lanzar pelotas contra la tierra y comprobar que los par¨¢metros de velocidad, bote, resistencia o granulometr¨ªa se equiparan a los de una pista tradicional. Sin embargo, Incotec y el torneo pleitean ahora porque la organizaci¨®n ha instalado la superficie por su cuenta.

La empresa que desarroll¨® el material de la pista dice haber comprobado los par¨¢metros de velocidad, bote o resistencia

¡°Voy a ser el primero en aceptar las cr¨ªticas, pero creo que hacemos lo correcto¡±, dijo la v¨ªspera Ion Tiriac, propietario de la cita, que defiende que la combinaci¨®n de pelota amarilla con fondo azul permitir¨¢ a los espectadores seguir mejor los peloteos, como demuestra con un estudio encargado por la organizaci¨®n: el contraste aumentar¨ªa del 0,55 con tierra roja al 1,15 con tierra azul. ¡°La pista es igual, solo cambia el color (de rojo a azul), creemos que es muy bueno para el tenis¡±, continu¨® Manuel Santana, director del torneo.

La arcilla azul preocupa a los mejores (Nadal, Federer, Djokovic) porque ven en el color un ataque a la tradici¨®n de su deporte, que, sin embargo, en los ¨²ltimos a?os ha cambiado el color de las pelotas (de blanco a amarillo) y de la vestimenta (adi¨®s al riguroso blanco), igual que incorporaba nuevas tecnolog¨ªas (Ojo de Halc¨®n) al mismo ritmo que se incrementaba la bolsa de premios.

Nadal est¨¢ en Madrid por obligaci¨®n (el reglamento castigar¨ªa su ausencia) y devoci¨®n (adora jugar en Espa?a). Su presencia le permite seguir optando al jugoso bonus con el que la ATP premia a los mejores por participar en todos los masters 1000, categor¨ªa a la que pertenece el torneo: los 12 mejores se reparten a fin de curso un fondo que crece seg¨²n el r¨¢nking del m¨ªnimo de 100.000 d¨®lares al m¨¢ximo de 2 millones. En Madrid, Nadal tambi¨¦n hace otra cosa. Enfrentarse al torneo de arcilla que m¨¢s le cuesta mientras prepara lo que viene: Roland Garros empieza el 27 de mayo.