?ltima noche con Guardiola

El Camp Nou vivir¨¢ hoy una noche especial, de esas que no se olvidan. Por ¨²ltima vez, Pep Guardiola ocupar¨¢ el banquillo local como entrenador, as¨ª que la visita del Espanyol, antes que a derbi, sabe esta vez a despedida. El club ha obrado en consecuencia y se preparan mosaicos y un mural para que los aficionados le escriban lo que quieran. ¡°Solo espero que la gente vaya al campo a ver un partido de f¨²tbol contra el Espanyol y que act¨²en con naturalidad, con espontaneidad¡±, dijo ayer Guardiola. ¡°Es mi ¨²ltimo partido en este estadio despu¨¦s de cuatro a?os en el banquillo, pero eso es secundario. Que la gente reaccione como quiera. No he venido aqu¨ª para entrar en la historia, solo he tratado de hacer la m¨ªa propia y vivir mi profesi¨®n al m¨¢ximo¡±.

No es la primera vez que Guardiola dice adi¨®s al Camp Nou con la sensaci¨®n de que nunca volver¨ªa. El 11 de abril del 2001, en un Bar?a-Celta, puso punto final a 18 a?os en el club como jugador: lleg¨® en 1984, siendo un cr¨ªo, y dijo adi¨®s convertido en mito. Fueron 11 temporadas en el primer equipo, 379 partidos jugados, de los que gan¨® 224, empat¨® 82 y perdi¨® 73. Aquella noche sali¨® a hombros de sus compa?eros Luis Enrique y Sergi Barjuan. Un par de horas despu¨¦s, cuando los focos se apagaron y el estadio se vaci¨®, volvi¨® al centro del campo vestido de calle, acompa?ado de sus padres y Cristina, su compa?era.

Su primer adi¨®s estuvo manchado; el de hoy no hay quien lo ensucie. Entonces, como ahora, hizo las maletas porque no pod¨ªa m¨¢s. ¡°Si estuviera contento, no se ir¨ªa¡±, dijo en su d¨ªa Koeman. La relaci¨®n con el presidente N¨²?ez no era buena y el club no le hizo ning¨²n homenaje. Pero el Camp Nou habl¨® para despedirle con afecto. El 4 del dream team supo entonces que aquella gente de la grada le respetaba y le quer¨ªa. Un afecto que cuatro a?os en el banquillo han multiplicado hasta el infinito.

Hace 11 a?os, ya puso fin a 18 cursos como jugador convertido en un mito

Guardiola, ese que pidi¨® a la afici¨®n que se pusiera los cinturones porque iba a pasarlo bien, dice que solo ha querido trasladar a la gente ¡°el placer indescriptible de chutar un bal¨®n¡±. ¡°Hemos tratado de reflejarlo en nuestra forma de jugar, a trav¨¦s de la pelota. Hemos metido muchos goles y creo que la gente ha disfrutado. Pero no hemos querido ser bandera de nada¡±.

Ha ganado tres t¨ªtulos en su ¨²ltimo a?o, a la espera de la final de Copa contra el Athletic, pero Guardiola se va despu¨¦s de perder su primera Liga. No le pone reparos a los m¨¦ritos acumulados por el Real Madrid: ¡°Cuando un equipo suma los puntos y los goles que lleva el Real Madrid es porque se merece ser campe¨®n. Llegu¨¦ al Bar?a con 13 a?os y, a excepci¨®n de cinco o seis, me he pasado la vida aqu¨ª, donde me he formado como futbolista y como chico. La lecci¨®n que me queda es que para ganar al Madrid hay que hacerlo muy bien porque con solo hacerlo bien no es suficiente¡±, afirm¨®. El pasado mi¨¦rcoles, despu¨¦s del partido contra el M¨¢laga, Guardiola ya felicit¨® al campe¨®n pero, a la vez, lanz¨® un mensaje enigm¨¢tico. ¡°Este a?o han pasado muchas cosas que el club ha tapado con su silencio¡±, dijo. Ni entonces ni ayer quiso entrar en m¨¢s detalles pero aclar¨® que no hab¨ªa mensaje a su presidente: ¡°El club siempre se ha comportado de forma mod¨¦lica¡±. Tambi¨¦n acept¨® que pudo haberse equivocado al decirlo. ¡°S¨¦ que hay quienes quieren verme de un modo que no soy. Puede que me haya equivocado, pero no me arrepiento de nada¡±, enfatiz¨® el de Santpedor, antes de ironizar: ¡°Lo que est¨¢ claro es que algunos tienen la piel muy fina¡±.

¡°Ahora resulta que en el banquillo hay que estar riendo y d¨¢ndonos besos con Tito. Y parece que con Leo pasa lo mismo¡±, respondi¨® sobre si su relaci¨®n con Messi se hab¨ªa resentido en los ¨²ltimos d¨ªas. ¡°Ellos son jugadores y su felicidad depende de que hagan bien las cosas. He sido un privilegiado por estar con ellos, cada d¨ªa. Yo no estoy aqu¨ª para cambiar a los futbolistas, tienen que ser como ellos quieran, no como yo diga. Pero nos hemos llevado divinamente. Cuando habl¨¦ con ellos ya les dije que me llevo toda su estima. Alg¨²n d¨ªa nos encontraremos por la calle y charlaremos. Eso es lo que queda al final, las copas se olvidan¡±, remach¨® Guardiola.

S¨¦ que los hay que quieren verme de un modo que no soy", sostiene el entrenador

En los ¨²ltimos cuatro a?os en el Camp Nou se ha vivido la sublimaci¨®n de una idea que se ordena a trav¨¦s del bal¨®n. En el estadio, las sensaciones no enga?an: hoy se cierra la puerta del mejor Bar?a de la historia. En 117 partidos oficiales de la era Guardiola, el Camp Nou ha vivido 96 victorias, 14 empates y siete derrotas; ha celebrado 360 goles, 112 de Messi, 29 de Pedro y 26 de Eto¡¯o; y ha lamentado los 76 en contra, con una media de 3,07 goles marcados por partido y 0¡¯64 encajados.

Han pasado tres a?os, ocho meses y 23 d¨ªas desde que Guardiola ganara su primer partido oficial en el Camp Nou, contra el Wisla de Cracovia, 1.362 jornadas que han marcado la historia del club y las vidas de los millones de personas que un d¨ªa podr¨¢n explicar que vieron jugar al Bar?a de Guardiola. El resto son trofeos, hasta 13 de momento. Pero, al fin y al cabo, ¡°las copas solo son n¨²meros¡±, sostiene ¨¦l.