El muro de Cristiano
La selecci¨®n es el ¨²nico ¨¦xito que se le resiste al delantero
Desde que Leonel Pontes, uno de sus entrenadores infantiles en el Sporting de Portugal, le pidiera calma (¡°tranquil¨ªzate, hombrecito¡±), Cristiano Ronaldo ha ido tachando de la lista los objetivos cumplidos. ¡°A ver si me llamas as¨ª cuando sea el mejor del mundo¡±, le respondi¨® aquel peque?ajo conocido como La Abejita por su correr de pasitos zigzagueantes. En 2008, Ronaldo (Funchal, Madeira, 1985) gan¨® el Bal¨®n de Oro por delante de Messi y de Torres. Ese mismo a?o gan¨® con el Manchester la Champions y el Mundialito de Clubes. En sus tres cursos en el Madrid ha marcado 146 goles en 144 partidos, con un asombroso promedio de 1,02. Portugal, en cambio, se le resiste. Ha anotado 32 tantos en 90 encuentros, con una media de 0,36, sin encontrar una justificaci¨®n para un descenso tan abrupto. Por mucho m¨¢s caudal ofensivo que reciba en el Madrid, la diferencia es excesiva.
No le sirve de consuelo tratarse de una extra?a enfermedad sufrida por las dos principales estrellas mundiales de los ¨²ltimos a?os. Con Argentina, Messi solo ha logrado el oro de los Juegos Ol¨ªmpicos de Pek¨ªn 2008. Es un fen¨®meno nuevo. Tradicionalmente, los grandes jugadores lo han sido tambi¨¦n en sus selecciones: Pel¨¦, Eusebio, Charlton, Beckenbauer, Cruyff, Van Basten, Maradona, Roberto Baggio¡ La excepci¨®n fue Di St¨¦fano, pero una lesi¨®n se cruz¨® en su camino cuando iba a disputar con Espa?a el Mundial de Chile 62. En la eterna comparaci¨®n entre Messi y Ronaldo, el delantero holand¨¦s Huntelaar, m¨¢ximo goleador de la fase clasificatoria, dijo ayer: ¡°Cristiano es bueno, pero Messi es 10 veces mejor¡±.
Su profesionalidad es absoluta. Es muy f¨¢cil trabajar con ¨¦l¡±, Paulo Bento, seleccionador de Portugal
Reci¨¦n levantado, CR7 practica cientos de flexiones y abdominales a fin de esculpir su cuerpo de velocista. Desde los 11 a?os, cuando abandon¨® Madeira, una isla en medio del Atl¨¢ntico, para fichar por la cantera del Sporting y hacerse cargo poco despu¨¦s de una familia amenazada por el alcohol y las drogas, Cristiano ha estado obsesionado con el ¨¦xito. ¡°Su profesionalidad es absoluta. Es muy f¨¢cil trabajar con ¨¦l¡±, dice el seleccionador, Paulo Bento. Lo mismo piensan sus compa?eros en el equipo, futbolistas de proyecci¨®n internacional como Nani y Meireles, que tampoco entienden el menor rendimiento de Cristiano en la selecci¨®n.
Por si acaso, el preparador alem¨¢n, Joachim L?w, ha preparado un entramado defensivo anti-Ronaldo. Partiendo como referencia de la victoria de Espa?a ante Portugal en el Mundial de Sud¨¢frica 2008, Alemania tratar¨¢ de ahogar a los lusos en su propio campo. L?w teme la velocidad de Cristiano. Sobre todo por la lentitud de sus dos centrales: Mertesacker y Badstuber. ¡°Son soberbios al contragolpe. Necesitamos a todo el equipo para parar a Ronaldo¡±, admiti¨® L?w. Cristiano nunca ha marcado a Alemania. Ni ha triunfado con Portugal. A los 27 a?os, es el ¨²nico ¨¦xito que se le resiste.
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