Rooney pide cita con Italia
Inglaterra despide a Ucrania con un gol de su estrella en su primer partido y poco m¨¢s ¡ñ El conjunto ucranio se vio perjudicado por un tanto fantasma que super¨® la l¨ªnea de meta
La Eurocopa recuper¨® a Rooney el d¨ªa que se qued¨® sin anfitriones. Ucrania resisti¨® tan poco como Polonia y el torneo, a falta de dos campeones como Holanda y Rusia, avanza hacia su fase decisiva con los principales aspirantes: seis titulados (Espa?a, Francia, Italia, Grecia, Rep¨²blica Checa y Alemania) y dos cl¨¢sicos como Portugal e Inglaterra, que se alz¨® con el primer puesto del grupo D tras un partido que no se rebobinar¨¢ en las escuelas futbol¨ªsticas. S¨ª debiera en las aulas arbitrales y en los despachos de la FIFA, porque ni con la montonera de ¨¢rbitros que hoy ponen la lupa se disiparon las dudas sobre un aparente gol local que Terry rechaz¨® bajo el larguero. Una jugada que tanto pudo meter en serios problemas a Inglaterra como a Francia, que sucumbi¨® con Suecia. Al final, Inglaterra, sin alardes, ya mandaba en el resultado con un tanto de Rooney regalado por el portero Pyatov. Ucrania no da para m¨¢s; Inglaterra tampoco va sobrada. La espera Italia.
INGLATERRA, 1 ¨C UCRANIA, 0
Inglaterra: Hart; Johnson, Terry, Lescott, Ashley Cole; Milner (Walcott, m. 70), Gerrard, Parker, Young; Welbeck (Carroll, m. 82) y Rooney (Oxlade-Chamberlain, m. 87).
Ucrania: Pyatov; Gusev, Rakitskiy, Khacheridi, Selin; yarmolenko, Tymoshchuk, Konoplyanka; Milevskiy, Garmash, y Devic.
Gol: Rooney aprovecha un fallo de Pyatov para poner la cabeza en la linea de gol.
?rbitro: Viktor Kassai. Amonest¨® a Ashley Cole, Gerrard, Shevchenko, Tymoshchuk y Rakitskiy.
Una de las cu?as que el f¨²tbol ha metabolizado es el cartel de Inglaterra, que impone all¨¢ por donde pasa, sin que se repare en que de su ¨²nico trono hace ya 46 a?os, que jam¨¢s ha disputado una final de la Eurocopa y que no llega siquiera a las semifinales de un Mundial desde 1990. Pero el eco anglosaj¨®n y la brillantina de una Premier cada vez m¨¢s bab¨¦lica han maquillado sus pobres resultados, su catarata de decepciones. Esta vez ni sus m¨¢s fieles se conceden el derecho a so?ar. El viraje en la direcci¨®n del equipo no ha despertado un gran entusiasmo. No funcion¨® la p¨®cima de Fabio Capello y ahora ha vuelto al remedio casero, con Roy Hodgson, que ha pasado por 18 banquillos distintos desde que iniciara su carrera a mediados de los setenta. Por ahora, el equipo se ha conducido hasta los cuartos con m¨¢s eficacia que juego.
Con el paso de los a?os y las importaciones de la Premier, Inglaterra ha perdido ese punto, algo ingenuo dir¨ªan algunos puristas, que le hac¨ªa ser un equipo siempre al frente, decidido, con br¨ªo, corsario en las dos ¨¢reas. Hoy se ha barnizado sin esponjar lo mejor de otras corrientes. Se ha quedo en medio del canal. Lo evidenci¨® ante Ucrania, con la que pretendi¨® gestionar sin m¨¢s el punto que necesitaba. El ¨²nico anfitri¨®n superviviente no tuvo respuesta ante el macizo ingl¨¦s. Sus recursos son muy limitados, hasta el punto de que su capit¨¢n y goleador del campeonato, Shevchenko, a sus casi 36 a?os, ya no tiene gasolina para el traj¨ªn de una Eurocopa. Blokhin, su seleccionador, le dio aire en el banquillo hasta los veinte minutos finales. A Ucrania, como le sucediera a Polonia, no le bast¨® con el fervor local, necesita muchos otros pluses.
Con el paso de los a?os y las importaciones de la Premier, Inglaterra ha perdido ese punto, algo ingenuo dir¨ªan algunos puristas, que le hac¨ªa ser un equipo siempre al frente, decidido, con br¨ªo, corsario en las dos ¨¢reas
Ni la presencia de Rooney, pese al gol, le cambi¨® sustancialmente el esqueleto al conjunto ingl¨¦s. De hecho, su presencia solap¨® de alg¨²n modo a Wellbeck, su compa?ero del United, un futbolista interesante que hab¨ªa tenido un buen rendimiento en los dos primeros duelos. Anoche dej¨® el plano principal a su reputado compa?ero. Con todo, Inglaterra fue el mismo equipo plano de los dos encuentros anteriores, sin hilo en el juego. Gerrard, sin el toque pop del otro, por supuesto, es hoy un Beckham, un futbolista limitado a las jugadas a bal¨®n parado y su oce¨¢nico toque, el pase en largo que siempre le distingui¨®. Pero el juego no gravita a su alrededor, y Parker, Young y Milner est¨¢n para lo grueso, como actores secundarios. De esta forma, el equipo queda sometido al solitario de Rooney o de Gerrard con el bal¨®n detenido. As¨ª ocurri¨® en el gol. Tras un c¨®rner lanzado por el capit¨¢n ingl¨¦s, la pelota rebot¨® de nuevo hacia ¨¦l y su combado centro subterr¨¢neo burl¨® las manos del meta Pyatov. Una fuga que no perdon¨® Rooney, como un ermita?o en la l¨ªnea de gol.
A Ucrania, como le sucediera a Polonia, no le bast¨® con el fervor local, necesita otros pluses
Tras su anodino primer tiempo, Inglaterra se vio en ventaja, pese al animoso empe?o local. No se derrumb¨® Ucrania, que aceler¨® con entusiasmo y comenz¨® a flirtear con el empate. Milevsky cabece¨® solo por encima de la porter¨ªa de Hart y, de inmediato, en una jugada en la que el propio delantero parti¨® en fuera de juego, Devic elev¨® el bal¨®n por encima del meta ingl¨¦s. Terry meti¨® la puntera bajo el larguero y dio toda la sensaci¨®n de que la pelota cruz¨® la raya. All¨ª estaba ese nuevo poste que se han inventado los rectores de este invento, ese supuesto auxiliar arbitral que algo deber¨ªa pintar al menos en este tipo de jugadas. Al asistente h¨²ngaro no le bast¨® con la mirada para certificar la jugada, se?al de que solo un mecanismo electr¨®nico evitar¨ªa estos engorros.
Incapaz de gobernar el partido ante una selecci¨®n al borde del despido, Inglaterra a¨²n concedi¨® alguna ocasi¨®n m¨¢s. No supo c¨®mo cerrar el encuentro en las dos ¨¢reas y resisti¨® por la cierta incapacidad de su adversario, al que esta vez ni Shevchenko pudo resucitar. Fin de las ilusiones para Ucrania. Inglaterra a¨²n tiene pista.
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