La ¡®Champions¡¯¡ y 8,6 millones en juego
El M¨¢laga, asfixiado econ¨®micamente y obligado a dar salida a sus figuras, afronta con gran necesidad su duelo en la previa europea contra el Panathinaikos
No avistan buenos tiempos en el M¨¢laga, por mucho que ma?ana (20.45, Canal+) el equipo dirigido por Manuel Pellegrini afronte un duelo hist¨®rico ante el Panathinaikos con el objetivo de sellar, por vez primera, su presencia en la Liga de Campeones. Gobernado por el jeque Abdullah Al Tani, el club andaluz se juega en la eliminatoria mucho m¨¢s que el pedigr¨ª deportivo y un pasaporte a la ¨¦lite del f¨²tbol europeo. En concreto, 8,6 millones de euros fijos que servir¨ªan para aliviar sus arcas, atender los impagos a su plantilla y buena parte de los empleados que integran el conglomerado construido por el mandam¨¢s catar¨ª desde que pusiese el pie en la Costa del Sol hace dos a?os.
Aterriz¨® el megal¨®mano Al Tani con un talonario interminable y una inversi¨®n en fichajes de 60 millones de euros. Contrataciones de relumbr¨®n como las de Cazorla (20), Toulalan (10) o Van Nistelrooy, entre otras. Pero, hoy d¨ªa, el escenario es radicalmente distinto. El jeque apenas se deja ver por la ciudad, ha puesto el club en venta y otros clubes como Osasuna, Villarreal o River Plate recurren a los juzgados para que el multimillonario catar¨ª pague sus facturas. Un panorama muy sombr¨ªo. Tan oscuro que encorseta adem¨¢s la direcci¨®n de Pellegrini, obligado a hacer frente a la marcha de sus figuras ¨CCazorla (Arsenal) y Rond¨®n (Rubin Kazan)¨C, aceptar el plan de austeridad impuesto desde los despachos y tirar con lo puesto.
Contrariado, pero sin volver la espalda al reto, el chileno no pierde un ¨¢pice de ilusi¨®n por guiar el cuadro malacitano a la c¨²spide europea. Si la alcanza, el M¨¢laga ingresar¨ªa una partida fija de 8,6 por estar en la fase de grupos, a los que se podr¨ªan a?adir un mill¨®n de euros por cada victoria y 500.000 por cada empate. Una cantidad a la que habr¨ªa que sumarle adem¨¢s una variable, todav¨ªa por determinar, en funci¨®n de la cuota de mercado televisivo representado por cada entidad. Dif¨ªcil empresa la que encara Pellegrini, que en 2006 ya condujo al Villarreal a las semifinales de la Champions. Este curso conf¨ªa en probar otra vez las mieles de la m¨¢xima competici¨®n continental. Bajo un contexto muy distinto al que imaginaba, eso s¨ª. ¡°Cuando nos clasificamos, todos esper¨¢bamos llegar de una forma diferente, pero llegamos as¨ª y con eso hemos de afrontarlo. La realidad existe, pero no queremos buscar ninguna excusa. No contamos con jugadores importantes, pero no es excusa¡±, se?alaba, con rictus serio, en su comparecencia ante los medios.
La realidad existe y no contamos con jugadores importantes, pero no debe servir de excusa"
Cuestionado en repetidas veces por la complicada coyuntura financiera que envuelve a su club y la trascendencia capital que supondr¨ªa doblegar al Panathinaikos, se mostr¨® igualmente rotundo. ¡°La responsabilidad deportiva siempre est¨¢ por encima de la econ¨®mica. Los ingresos vendr¨ªan muy bien, eso es obvio, pero en nuestra cabeza solo est¨¢ el partido¡±, expuso el preparador chileno, que por si fuera poco, debe lidiar adem¨¢s con los caprichos del calendario. El M¨¢laga disputar¨¢ su segundo compromiso liguero, contra el Mallorca en La Rosaleda, el s¨¢bado a las 23.00 de la noche. ¡°A ver si m¨¢s adelante, a otros equipos como el Madrid, el Bar?a o el Valencia los colocan en ese horario teniendo que jugar dos d¨ªas despu¨¦s la Champions. No creo que nos quieran perjudicar, pero no tuvieron en consideraci¨®n nuestro partido¡±, se lamentaba.
No le tiembla el pulso a Pellegrini, que para el duelo contra el Panathinaikos echar¨¢ mano de nuevo del canterano Fabrice Olinga, que el pasado s¨¢bado se convirti¨® en el artillero m¨¢s joven de la historia de la Liga con una diana en Bala¨ªdos. ¡°Es muy maduro de personalidad, si entr¨® a jugar no es por cari?o sino por calidad. En el campo entran los que est¨¢n capacitados, y ¨¦l lo ha demostrado¡±, defend¨ªa el chileno. Sin refuerzos, con la soga econ¨®mica al cuello. Y el peso de 12 millones, si pasa la fase de grupos, en juego.
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