Grosjean provoca el caos en Spa

La f¨®rmula 1 ha cambiado una barbaridad en los ¨²ltimos 30 a?os. No solo por los adelantos de la tecnolog¨ªa que se aplica a los coches y la gran repercusi¨®n del Campeonato del Mundo, sino tambi¨¦n por el trato que se dispensa a los pilotos, que est¨¢n rodeados de forma permanente por una armadura de asistentes que les proporcionan todo lo que desean y, a la vez, act¨²an como filtro. Eso ha hecho que su comportamiento sea muy distinto al de hace tres decenios y tambi¨¦n sus reacciones en caliente en seg¨²n qu¨¦ circunstancias.

El comisario t¨¦cnico que la Federaci¨®n Internacional del Autom¨®vil (FIA) desplaz¨® este fin de semana a Spa-Francorchamps con ocasi¨®n de la disputa del Gran Premio de B¨¦lgica fue Eliseo Salazar, el ¨²ltimo piloto agredido por un compa?ero durante una carrera. Fue durante el de Alemania de 1982, en el circuito de Hockenheim, despu¨¦s de que el chileno se tocara con el brasile?o Nelson Piquet a la entrada de una variante. Las im¨¢genes que todav¨ªa pueden encontrarse en Youtube muestran c¨®mo Piquet sale enfurecido de su b¨®lido y se va a por Salazar, se echa encima de ¨¦l, le empuja violentamente, le zarandea y le suelta un par de golpes en el casco.

Lo m¨¢s importante es que todo el mundo est¨¢ bien¡±, dice el causante del accidente

Por un momento, la hinchada que ayer abarrot¨® las gradas de Spa-Francorchamps temi¨® un desenlace similar a aquel, pero, l¨®gicamente, con distintos protagonistas. A nadie le habr¨ªa sorprendido que Lewis Hamilton sacudiera a Romain Grosjean, que tan solo necesit¨® 300 metros para armar un barullo de mil demonios y arruinar su propia carrera y las del brit¨¢nico, Checo P¨¦rez y Fernando Alonso.

Nada m¨¢s arrancar, el franc¨¦s se fue abriendo hacia la derecha y oblig¨® a Hamilton, que aceleraba por all¨ª, a pisar la hierba. A partir de ese instante, todo se precipit¨® y la primera curva termin¨®, un par de segundos despu¨¦s, como si fuera un desguace. El monoplaza de Hamilton embisti¨® al de Grosjean, que sali¨® proyectado por encima del de P¨¦rez, convertido en una especie de rampa de lanzamiento, y se empotr¨® contra el de Alonso tras dar un trompo en el aire y cuando el espa?ol ya se dispon¨ªa a encarar el primer viraje, a la derecha: un strike en toda regla.

Mientras Hamilton se fue a por Grosjean para decirle que estaba mal de la sesera, Alonso se qued¨® en su Ferrari, inm¨®vil, con la espalda machacada y sin poder respirar hasta que los comisarios le ayudaron a salir de ¨¦l y le trasladaron al centro m¨¦dico de las instalaciones, en el que se le realiz¨® una exploraci¨®n que confirm¨® que solo sufr¨ªa un fuerte golpe.

Podr¨ªa haber sido mucho peor¡±, advierte el asturiano; ¡°debe cambiar su arrancada¡±

¡°Sorprende que a uno le pueda pasar un coche tan cerca de la cabeza y de las manos. Podr¨ªa haber sido mucho peor porque ya estaba girando. La suerte es que en cinco d¨ªas volveremos subirnos al b¨®lido en Monza. Hoy me toc¨® a m¨ª estar en el sitio incorrecto en el momento incorrecto¡±, coment¨® Alonso, que sigue al frente de la clasificaci¨®n general por puntos, aunque su m¨¢s inmediato perseguidor ya no sea Mark Webber, sino Sebastian Vettel (termin¨® el segundo, por detr¨¢s de Jenson Button), el compa?ero del australiano en Red Bull y actual campe¨®n mundial. El infortunio provoc¨® que el asturiano rompiera una racha de 23 grandes premios consecutivos puntuando, uno menos que la plusmarca, en manos de Michael Schumacher, que entre 2001 y 2003 encaden¨® 24. ¡°Puede que algunos tengan que cambiar la forma de arrancar porque creo que Romain ha tenido siete accidentes en 12 salidas¡±, puntualiz¨® el bicampe¨®n en 2005 y 2006.

El responsable del desaguisado prefiri¨® esperar a analizar las im¨¢genes antes de aventurarse a decir nada, como si no tuviera claro su nivel de culpabilidad. ¡°Lo m¨¢s importante es que todo el mundo est¨¢ bien. Es verdad que he tenido alg¨²n problema en las primeras vueltas, unas veces por falta de experiencia y otras por culpa de la mala suerte. Esperemos que, de ahora en adelante, todo vaya mejor¡±, se limit¨® a decir Grosjean.

M¨¢s claro lo tuvo la FIA, que no le dejar¨¢ correr el domingo que viene y que, adem¨¢s, le impuso una multa de 50.000 euros por haber cometido ¡°una infracci¨®n en el reglamento capaz de causar da?os a terceros¡±, seg¨²n el comunicado emitido despu¨¦s de las deliberaciones.

Con los testimonios de dos de los tres principales involucrados en la trompada, el paddock entero esperaba la comparecencia de Hamilton, que, sorprendentemente, prefiri¨® morderse la lengua y declin¨® hablar del accidente, otro detalle que demuestra que la f¨®rmula ya no es lo que era.