Un macrojuicio para la Operaci¨®n Puerto

Seis acusados, ocho acusadores, 35 testigos, 13 peritos y una juez, Julia Patricia Santamar¨ªa Matesanz. Todos ellos, reunidos durante semanas en una macrosala en la calle de Juli¨¢n Camarillo, en Madrid. El juicio oral 52/12, en el Juzgado de lo Penal n¨²mero 21 de Madrid, tiene, de entrada, todas las caracter¨ªsticas de un macrojuicio. Y, finalmente, tambi¨¦n tiene fecha. Casi siete a?os despu¨¦s de producirse la intervenci¨®n de la Guardia Civil, los acusados en la Operaci¨®n Puerto se sentar¨¢n en el banquillo. Ser¨¢ ya en 2013, del 28 de enero, lunes, al 22 de marzo, viernes. As¨ª se lo comunic¨® recientemente el juzgado a las partes.

Acusados de un delito contra la salud p¨²blica, los m¨¦dicos Eufemiano y Yolanda Fuentes y Jos¨¦ Luis Merino Batres, los directores de equipos ciclistas Manolo Saiz y Vicente Belda y el entrenador Ignacio Labarta se enfrentan a una petici¨®n del fiscal de dos a?os de prisi¨®n que algunas acusaciones particulares aumentan a cuatro a?os. A todos ellos les detuvo la Guardia Civil en mayo de 2006, acus¨¢ndolos de haber organizado una trama de dopaje en el deporte, principalmente en el ciclismo. Durante la operaci¨®n se intervinieron en varios domicilios de Madrid casi 200 bolsas de sangre de deportistas conservadas en neveras y congeladores con vistas a una reinfusi¨®n seg¨²n se acercaran las competiciones en las que iban a participar. Por entonces, el dopaje a¨²n no era considerado delito en Espa?a. Por eso se les acusa de un delito contra la salud p¨²blica.

El dopaje no era considerado delito en Espa?a cuando se produjeron los hechos

Ning¨²n deportista se sentar¨¢ en el banquillo de los acusados, pero muchos ciclistas deber¨¢n comparecer como testigos de las acusaciones o de las defensas. As¨ª, entre los 35 convocados, aparte de los 13 guardias civiles que intervinieron en la operaci¨®n y de una decena de expertos, figuran los corredores Alberto Contador, quien compet¨ªa entonces en el Liberty, de Saiz, aunque, seg¨²n la investigaci¨®n, en ning¨²n momento se vio implicado en las pr¨¢cticas dopantes; Jes¨²s Manzano, quien tambi¨¦n es acusaci¨®n particular; Dar¨ªo Gadeo, Pedro D¨ªaz Lobato, Ivan Basso y Michele Scarponi, que fueron sancionados por dopaje, adem¨¢s de Marcos Serrano, David Etxebarria, Joseba Beloki, ?ngel Vicioso, Isidro Nozal, Unai Osa, Jorg Jacksche y Gianpaolo Caruso, que corr¨ªan en el Liberty y, supuestamente, se sometieron a transfusiones de sangre y otros m¨¦todos de dopaje, como inyecciones de EPO, parches de testosterona o pastillas anabolizantes. Muchos de ellos se han retirado ya de la competici¨®n profesional.

Aparte de la fiscal¨ªa y de la abogac¨ªa del Estado, que act¨²a por el Consejo Superior de Deportes, hay seis acusaciones particulares: la Uni¨®n Ciclista Internacional (UCI), la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), el Comit¨¦ Ol¨ªmpico Italiano, Manzano, la federaci¨®n de ciclismo y la asociaci¨®n internacional de equipos ciclistas. Para todos ellos, transcurridos ya m¨¢s de seis a?os, el juicio y su sentencia, m¨¢s all¨¢ de la condena y de los hechos que se conocer¨¢n durante su celebraci¨®n (las expectativas de los espectadores pueden quedar frustradas: no se juzgar¨¢ si se doparon o no o qu¨¦ corredores y otros deportistas, sino si las transfusiones y las planificaciones dopantes eran peligrosas para la salud), tendr¨¢ valor simb¨®lico, una fecha, un momento, para pasar oficialmente p¨¢gina y dar por terminada una de las ¨¦pocas m¨¢s tristes del deporte.

Por tanto, el fiscal pide dos a?os de prisi¨®n por atentar contra la salud p¨²blica

De los m¨¢s de 50 deportistas identificados, solo una minor¨ªa (Basso, Scarponi, Jacksche¡­) confes¨® que se dopaba. Otros, como Alejandro Valverde, fueron sancionados pese a no reconocer nunca que algunas de las bolsas de sangre fueran suyas. Los dem¨¢s negaron, guardaron silencio, se exiliaron a equipos menores en Portugal o Colombia o se retiraron. Algunos tendr¨¢n la oportunidad de contar su verdad, como testigos, en el juicio, en el que contar¨¢n adem¨¢s con el apoyo de la UCI, que ha anunciado su intenci¨®n de amnistiar (no castigar) a todos aquellos corredores que confiesen que se doparon en el pasado.