La ¨²ltima pedalada del tricampe¨®n

En la v¨ªspera de su ¨²ltima carrera, despu¨¦s de cenar, el s¨¢bado, ?scar Freire, de 36 a?os, invent¨® un nuevo trago, el chupito de cerveza, la cuarta parte de un corto, y so?¨® en voz alta con un cuarto t¨ªtulo mundial, que le convertir¨ªa en leyenda.?

¡°Cuando gan¨¦ el primero, en Verona, en 1999, mi masajista, Rubito, mir¨® a su b¨²ho y me pronostic¨® que ganar¨ªa cuatro¡±, contaba Freire; ¡°me parec¨ªa imposible entonces, pero en 2004, cuando gan¨¦ el tercero, tambi¨¦n en Verona, lo ve¨ªa posible, probable. Quiz¨¢s ma?ana [POR AYER]lo consiga¡­¡±.

No lo consigui¨® (qued¨® d¨¦cimo, derrotando en su ¨²ltimo sprint por lo menos a Tom Boonen), lo que no le hizo cambiar de idea. ¡°Hoy he dado mi ¨²ltima pedalada con dorsal¡±, dijo el c¨¢ntabro nada m¨¢s acabar (con la rabia en el cuerpo y el cuerpo dolorido por una ca¨ªda en los primeros kil¨®metros, empujado por una moto) la carrera de Valkenburgo, simb¨®licamente el mismo lugar en el que, en 1998, disput¨® su primer Mundial, donde qued¨® marcado para siempre, y, como siempre, fomentando el equ¨ªvoco: ¨¦l siempre ha sabido en su interior cosas que ni los dem¨¢s sospechaban. ?l, cuando era un chaval¨ªn desconocido, aquel 1999 de sus 23 a?os, sab¨ªa que pod¨ªa ganar el Mundial y lo gan¨® para sorpresa del mundo. Y as¨ª hasta el ¨²ltimo d¨ªa, hasta ayer, en el que tambi¨¦n, finalmente, era ¨¦l el ¨²nico que pensaba que pod¨ªa ganar. ¡°Despu¨¦s de ganar mi primer Mundial, todos los a?os la selecci¨®n se hac¨ªa a mi medida, todos trabajaban para m¨ª¡±, dijo el s¨¢bado, ¡°pero despu¨¦s del tercero me lesion¨¦ y me perd¨ª dos Mundiales. Cuando regres¨¦, todo hab¨ªa cambiado. Ya hab¨ªa otros corredores que se cre¨ªan capaces de ganarlo y el equipo dej¨® de trabajar para m¨ª¡±.

Un bicho raro en el ciclismo espa?ol desde el principio (un ganador de cl¨¢sicas: tambi¨¦n tres Mil¨¢n-San Remo). Freire se vio condenado a una carrera individual y ¨²nica, siempre en conjuntos extranjeros (Mapei, Rabobank, Katusha) despu¨¦s de salir del Vitalicio. ¡°Y ha sido muy duro¡±, dijo; ¡°sobre todo los primeros a?os en el Rabobank, rodeado de gente que solo hablaba ingl¨¦s y as¨ª todo el a?o. Solo disfrutaba los d¨ªas de Mundial, que estaba con la selecci¨®n¡±.

¡°S¨¦ que me olvidar¨¢n r¨¢pidamente. Todo se olvida muy deprisa¡±, concluy¨® el ciclista de Torrelavega, que pasar¨¢ un ¨²ltimo a?o en Suiza por el colegio de los ni?os y que luego volver¨¢ a su tierra; ¡°pero, de todas maneras, soy un privilegiado¡±.