Aspas le da al Celta sus primeros puntos a domicilio

No necesita mucho Iago Aspas para dejar su r¨²brica. En La Romareda, en un partido sin historia, carente de ritmo y de ocasiones de gol, encontr¨® dos opciones en el ¨¢rea. La primera la solucion¨® el meta local Roberto, la segunda la emboc¨® para dar al Celta su primera victoria de la temporada lejos de Bala¨ªdos, puntos a domicilio tras seis derrotas, un tesoro que sirve a los vigueses no s¨®lo para alejarse del descenso sino tambi¨¦n para evitar que el Zaragoza, que ya suma cuatro derrotas en casa, gane holgura en la clasificaci¨®n y abandone la zona de la zozobra.

No sobr¨® el f¨²tbol. El Zaragoza propuso por momentos algo similar, casi siempre cuando el joven V¨ªctor entr¨® en contacto con la pelota. La pide al pie y a partir de ah¨ª busca la pared, la combinaci¨®n con una cierta querencia a buscar los terrenos interiores. Un jug¨®n m¨¢s con denominaci¨®n de origen de La Mas¨ªa. Pero le falt¨® repertorio al Zaragoza, anulado en tanto el Celta se hizo fuerte en la frontal, con el paso de los minutos sin salida, eso s¨ª. El partido muri¨® ah¨ª durante largos minutos, tiempo inocuo durante el que se esper¨® a valores como Aspas o Postiga sin que llegasen a comparecer. Le falt¨® al Celta capacidad para asociarse, alg¨²n pase sencillo en mediocampo para afianzarse, subir l¨ªneas y no convertir cada embri¨®n de ataque en una agon¨ªa. Se ech¨® de menos el juego por los flancos en los dos equipos, atrancados, incapaces de generar hasta el descanso m¨¢s acci¨®n de gol que un disparo de Edu Oriol desde la frontal que rebot¨® en Oubi?a y se fue junto al palo.

El receso orden¨® ideas y corrigi¨® desastres. El Zaragoza, que pareci¨® m¨¢s capaz siempre que no encontrara al rival posicionado en defensa, atisb¨® la profundidad y el Celta esboz¨® la combinaci¨®n. Ambos valores sirvieron para abrir un tanto el partido. Jam¨¢s con alardes. Y con el transcurrir de los minutos con una cierta dosis de miedo a la derrota. S¨®lo los transgresores desconocen ese sentimiento. Aspas y Aranda lo son. El peque?o zar celtista resolvi¨® con apenas ocho minutos para la enmienda. El ind¨®mito malague?o la tuvo en ese tiempo, pero Javi Varas respondi¨® con capacidad y est¨¦tica a un disparo lejano que se envenen¨®. En definitiva el Zaragoza no entr¨® al ¨¢rea rival para rematar y as¨ª es complicado sumar.