El Madrid da prioridad al f¨²tbol
Los blancos golean al Ajax con una hora de buen juego, la mejor versi¨®n de Modric y Callej¨®n otra vez en alza


Son remotos los tiempos en los que al f¨²tbol se jugaba porque s¨ª, por placer. Convertido en una industria sostenida por una caldera de pasiones, el juego, en su sentido m¨¢s puro, dio paso al deber, con la carga que ello supone. Cuando el resultado no tiene trascendencia, cuando no hay trama, los equipos suelen tomarse esos duelos como un tr¨¢mite. Agradecido esta vez, no lo hizo el Madrid, que, pese a las turbulencias de estos tiempos, gust¨® y se gust¨® durante una hora. Sin enredos desde el banquillo y otros debates externos, el Madrid dio prioridad al f¨²tbol y tuvo varios atractivos. M¨¢s que suficiente para un partido de paso.
REAL MADRID, 4 - AJAX, 1
Real Madrid: Ad¨¢n; Nacho, Varane, Carvalho, Coentr?o (Pepe, m. 22); Khedira, Modric; Callej¨®n, Kak¨¢ (Jos¨¦ Rodr¨ªguez, m. 71), Cristiano y Benzema (Morata, m. 80). No utilizados: Jes¨²s; ?zil, Di Mar¨ªa y Cheryshev.
Ajax: Vermeer; Rhijn, Alderweireld, Moisander, Blind; Jong, Poulsen (Sch?ne, m. 39), Eriksen; Boerrigter, Fischer (Enoh, m. 77) y Hoesen (Sana, m. 77). No utilizados: Cillessen; Dijks y Lukoki.
Goles: 1-0. M. 13. Cristiano Ronaldo. 2-0. M. 28. Callej¨®n. 3-0. M. 49. Kak¨¢. 3-1. M. 60. Boerrigter. 4-1. M. 88. Callej¨®n
?rbitro: Pavel Kralovec (checo). Amonest¨® con tarjeta amarilla a Carvalho
Unos 60.000 espectadores en el Santiago Bernab¨¦u
Hasta que baj¨® la persiana mediado el segundo tramo, el Madrid vio en el envite una rendija id¨®nea para la liberaci¨®n, para sacudirse las tensiones. El Ajax, tan lozano, tan dulz¨®n ¡ª23,3 a?os de media entre sus diez jugadores de campo titulares¡ª fue el sparring perfecto, un equipo abierto, con todas las costuras al aire, que no da una patada, que en nada inoportuna. Su almibarado f¨²tbol no resta m¨¦ritos al grupo espa?ol, que no se limit¨® a una faena de ali?o. Nada de un partido administrativo. Era una noche para que progresen en su graduaci¨®n chicos como Ad¨¢n, Nacho, Jos¨¦ Rodr¨ªguez y Morata, para otro paso hacia la madurez de Varane, para que Carvalho se gane el sueldo, para otra prueba exitosa de Callej¨®n, para que Kak¨¢ apunte de nuevo hacia la pasarela, para que Modric se quite las amarras...
Con estos alicientes, el Madrid se despleg¨® con entusiasmo, cuando deb¨ªa abrir el resultado y un rato despu¨¦s, al menos durante una hora. Como prueba elocuente, antes del cuarto de hora, ya hab¨ªan sincronizado de maravilla Cristiano y Kak¨¢ para que marcara Benzema un gol invalidado por fuera de juego. Y, sin respiro, otra trenza, esta vez entre Cristiano y Modric, deriv¨® en un remate de Coentr?o al poste derecho de Vermeer. El Ajax era un mu?eco, apretado en su campo, presionado, incrustado en sus mazmorras. Su ca¨ªda era cuesti¨®n de tiempo, del suspiro que tard¨® Modric en destapar las esencias, su naturalidad para dar salida al juego, con las luces cortas y las largas. El croata reba?¨® la pelota a un rival en campo propio. A muchas cuadras, Ronaldo le tir¨® un desmarque, pero Modric, inteligente, advirti¨® que estaba en fuera de juego. Su alternativa fue Benzema, al que asisti¨® con un pase geom¨¦trico, preciso y de largo recorrido. El franc¨¦s logr¨® un dif¨ªcil control y cit¨® a CR, que remat¨® a la red con dos rivales bajo el larguero. El mejor Modric, la doble v¨ªa de este futbolista, con agallas en el quite, sin ser un h¨¦rcules para ello, y delineante al distribuir. Por si quedaban dudas, otra de propina. Otro servicio kilom¨¦trico para Callej¨®n, que amortigu¨® de maravilla la pelota y super¨® con clase y punter¨ªa a Vermeer. Callej¨®n, el suplente eficaz, intachable, siempre en hora, trabajador constante y con ojo para el gol, como gran carpanta que fue en sus tiempos de canterano. Un titular en la reserva que hizo doblete al final.
Al hilo de Modric y con Kak¨¢ enchufado, el Madrid manejaba el duelo a su antojo, con ganas, sin disidencias, sin recibir un rasgu?o. Nacho, muy firme, en nada not¨® su cambio del lateral derecho al izquierdo tras la lesi¨®n de Coentr?o en el primer tiempo. Un zaguero vers¨¢til que con 22 a?os conoce al dedillo el oficio.
El Madrid vio en el envite una rendija para la liberaci¨®n, para sacudir tensiones
El tercer tanto de la noche, un disparo combado de Kak¨¢ con la zurda desde fuera del ¨¢rea ¡ªpura clase¡ª, tuvo un efecto anest¨¦sico para el Madrid, que dio por cerrado el choque. El equipo se alarg¨®, perdi¨® tensi¨®n y ya compiti¨® de puntillas. Hab¨ªa regalado a su hinchada una hora de fiesta. El baj¨®n lo aprovech¨® el Ajax, invitado hacia la meta de Ad¨¢n por el mayor sesteo de su rival. Un error de Pepe y el mal despeje del portero madridista concedieron el tanto, anecd¨®tico al final, de Boerrigter. Anecd¨®tico, porque este Ajax no da para m¨¢s. Un club legendario al que el mercantilismo le ha llevado a consolarse con la pedrea de la Liga Europa, de la que desbanc¨®, paradojas, a uno de esos equipos que hoy gobiernan en el wall street del f¨²tbol, el City.
Deca¨ªdo el encuentro, Mourinho dio paso a Jos¨¦ Rodr¨ªguez, el madridista m¨¢s precoz en debutar en Champions. El cambio dio paso un hecho sorprendente. Kak¨¢ le dio el brazalete de capit¨¢n a Ad¨¢n, pero, intervencionista en todo como es, Mourinho dijo que nanai. La condecoraci¨®n, para Pepe. Con el portugu¨¦s todo tiene su miga. En lo que al f¨²tbol se refiere, durante una hora el Madrid emiti¨® muy buenas se?ales.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
