Geromel salva el estreno de Manzano
El Mallorca empata (1-1) en el descuento ante Osasuna, que no supo guardar un triunfo que ten¨ªa en el bolsillo
Un gol de Geromel en el minuto 92, con los aficionados casi abandonando el estadio Iberostar, salv¨® el estreno de Gregorio Manzano en el banquillo del Mallorca. Un remate de cabeza a pase de Aouate que dio ox¨ªgeno a un equipo roto, excesivamente golpeado a un cuarto de hora del final, cuando Lolo dio ventaja a Osasuna en su primer disparo a puerta en toda la segunda mitad. El empate puede considerarse justo, ya que Osasuna, aunque fue mejor en muchas fases del encuentro, careci¨® de oficio para defender un triunfo que ten¨ªa en el bolsillo y que dej¨® escapar en una acci¨®n defensiva fallida de sus centrales. Rub¨¦n y Fla?o dejaron botar el bal¨®n en el ¨¢rea en un golpeo a la desesperada del meta rival. Geromel se aprovech¨® bien del error. En realidad, Osasuna se llev¨® el punto que siempre busc¨®, mientras que el Mallorca puede lamerse las heridas y salir algo triunfante del encuentro, sentenciado como estaba en su contra con el gol de Lolo.
MALLORCA, 1; OSASUNA, 1
Malllorca: Aouate; Hutton (Hemed, m. 46), Nunes, Geromel, Luna; Pina, Javi M¨¢rquez (Tissone, m. 82); Nsue, Giovani, Pereira; y V¨ªctor (Alfaro, m. 67). No utilizados: Calatayud; Anderson, Mart¨ª y Kevin.
Osasuna: Andr¨¦s; Marc Bertr¨¢n, Rub¨¦n, Fla?o, Dami¨¤; Lolo (Arribas, m. 88), Silva, Oier; De las Cuevas (Cejudo, m. 69), Nino y Armenteros (Lo¨¦, m. 85). No utilizados: Ricardo; Arribas, Kike Sola y Llorente.
Goles: 0-1. M. 76. Lolo marca a la salida de un c¨®rner sacado por Cejudo. 1-1. M. 92. Geromel se anticipa de cabeza a Andr¨¦s.?
?rbitro: P¨¦rez Montero. Amonest¨® a Lolo (conlleva suspensi¨®n), Pina, Silva, Geromel, Dami¨¤ y Tissone.??????????
Como suele ocurrir cuando se enfrentan dos equipos en una delicada situaci¨®n clasificatoria, afloraron los nervios al mismo tiempo que el buen f¨²tbol solo se serv¨ªa a cuentagotas, con goles producto de dos errores defensivos de grueso calibre.
Ardua tarea la que le queda a Gregorio Manzano en el Mallorca. El veterano t¨¦cnico tiene por delante no solo la misi¨®n de reanimar a un equipo muy tocado en lo futbol¨ªstico, sino tambi¨¦n hacerlo en un ambiente en contra, el de su propia afici¨®n, y con unos futbolistas con la autoestima por los suelos.
Tan aturdido est¨¢ el conjunto isle?o que la t¨®pica reacci¨®n que provoca en un grupo el cambio de entrenador apenas si se dej¨® ver en el choque frente a un rival direct¨ªsimo en la pelea por la permanencia. Si acaso, en un d¨¦bil ¨ªmpetu inicial que provoc¨® que el Mallorca sacara cuatro saques de esquina en los primeros 10 minutos. Todos sin remate, mal sacados, casi sin alma.
Osasuna, muy reforzado en el centro del campo, donde Silva, fichaje de invierno, impone cierto criterio, tampoco termin¨® de soltarse. Interesado siempre en el empate, con Nino como delantero centro, se esforz¨® m¨¢s en controlar el partido que en romperlo en busca del gol. El ficticio dominio del Mallorca se pudo quebrar a los 17 minutos, cuando P¨¦rez Montero dio gol en un remate de Rub¨¦n para, a continuaci¨®n, anular la jugada por falta del central a Aouate, que regresaba tras su lesi¨®n. Tan deca¨ªdo est¨¢ el Mallorca que sus jugadores apenas protestaron la acci¨®n, resignados a su mala suerte. Ni Pina ni Javi M¨¢rquez supieron imponer el ritmo necesario para su equipo.
Los de Manzano solo respiraron en alguna carrera de Luna o en alguna aparici¨®n de Giovani
Los de Manzano solo respiraron en alguna carrera de Luna o en alguna aparici¨®n de Giovani, el ¨²nico futbolista que tiene con cambio de ritmo. La tuvo Nino, a los 25 minutos, pero Aouate reaccion¨® bien. Tan soso como el propio partido fue el desmarque de Giovani, a dos minutos de descanso, en la mejor ocasi¨®n del Mallorca. El mexicano lo vio tan f¨¢cil que se olvid¨® de Fla?o, que le molest¨® lo justo para que su disparo, con todo a favor, se fuera muy lejos de la porter¨ªa de Andr¨¦s. La jugada reflej¨® el actual estado del Mallorca, triste y sin confianza. Mientras, a Osasuna le faltaba siempre una pizca de atrevimiento, contento con su puntito. Parec¨ªa imposible que pudiera hacer un gol.
Consciente de que ten¨ªa que agitar el partido, Manzano le dio la vuelta a su equipo cambiando al lateral derecho, Hutton, por Hemed. Una revoluci¨®n t¨¢ctica que alter¨® el ¨¢nimo del Mallorca, m¨¢s din¨¢mico, mejor posicionado y con m¨¢s posesi¨®n de bal¨®n. Hemed agradeci¨® la confianza de Manzano con una carrera que no acab¨® en gol por poco y Pereira, m¨¢s entonado por la derecha, se invent¨® un disparo que desviado por Rub¨¦n a punto estuvo de entrar en la meta de Andr¨¦s. M¨¢s peligroso fue el remate de Hemed al palo. El Mallorca ya hab¨ªa merecido el gol, pero se encontr¨® con un bofet¨®n inesperado, el golpe que suele acompa?ar a los equipos al borde del abismo. Un saque de esquina muy bien lanzado por Cejudo lo remat¨® Lolo en el ¨¢rea peque?a sin oposici¨®n. Osasuna marc¨® en su primer remate a puerta de todo el segundo tiempo y sumi¨® al Mallorca en el desconcierto. El equipo navarro, con todo a favor, no supo jugar los minutos finales y le devolvi¨® el favor a su rival. El gol del empate, en el descuento, provoc¨®, a buen seguro, que Mendilibar se tirara de los pelos en el palco, desde donde vio a su equipo al estar sancionado.
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