El Bar?a busca una br¨²jula
El d¨ªa despu¨¦s de la derrota con el Madrid el club azulgrana aparece sin Messi, ausente del entrenamiento por fiebre, con Rosell camino a Nueva York y sin resolver su agujero defensivo
El d¨ªa despu¨¦s de la atronadora derrota del Bar?a contra el Madrid en la Copa, Messi se qued¨® en casa. Seg¨²n el parte m¨¦dico a consecuencia de un proceso gripal que le subi¨® la fiebre a 39. Xavi Hern¨¢ndez, referente absoluto del juego azulgrana, recibi¨® sesi¨®n de masaje, porque ya tiene una edad (33 a?os) y acaba de salir de una lesi¨®n, dato que incide en su nivel competitivo. Y el presidente, Sandro Rosell, regate¨® a las televisiones por el aeropuerto del Prat como nunca jam¨¢s lo hizo siendo jugador en el Sant Andreu antes de embarcarse en un avi¨®n rumbo a Nueva York, donde el entrenador del equipo, Tito Vilanova, sigue tratamiento m¨¦dico para frenar el avance de su enfermedad. As¨ª las cosas, no debe resultar casual que Andoni Zubizarreta, director deportivo de la entidad, renunciara a viajar ayer a Nueva York porque prefiri¨® asomar por el entrenamiento del primer equipo en la ciudad deportiva.
La baja de la Pulga en la sesi¨®n incrementa la sensaci¨®n de que a Messi, l¨ªder indiscutible del equipo sobre el c¨¦sped, se le se?ala en los buenos y en los malos momentos. Por mucho que en la ciudad deportiva del club crece la sensaci¨®n de que el problema es la alineaci¨®n de F¨¤bregas, que relega a Iniesta a jugar en banda y a Villa al banquillo.
Es un golpe muy duro, nos duele en el alma. Estamos jodidos¡± Iniesta
En la ciudad deportiva de Sant Joan Desp¨ª crece la sensaci¨®n de que las cosas no se est¨¢n haciendo del todo bien, principalmente por la extra?a situaci¨®n que afecta al equipo, sin entrenador visible, y tambi¨¦n porque tras ganarlo todo cundi¨® la sensaci¨®n en el vestuario de que nadie podr¨ªa con ellos, que eran invencibles. Se creyeron que bastaba con el talento y el esfuerzo, olvidando que nada fue nunca tan f¨¢cil como cre¨ªan.
Result¨®, finalmente, que no basta con correr y predisponerse a defender, sino que se a?ora el orden t¨¢ctico que les hizo grandes, faltan matices y sobra rutina, raz¨®n por la que el Barcelona sufre una sangr¨ªa goleadora de tal calibre que no solo asusta, sino que decide partidos. Los errores parecen diagnosticados, o as¨ª lo admiti¨® el t¨¦cnico interino, Jordi Roura, pero no han recibido el tratamiento oportuno durante las sesiones preparatorias. Basta con un ejemplo: nadie corrigi¨® a Puyol su tendencia a perseguir las ca¨ªdas a banda de Higua¨ªn durante el partido del pasado martes que tanto da?o le hicieron al Barcelona, pues habilitaban las llegadas de Cristiano. Puyol tampoco recibi¨® advertencia desde el banco.
Y en medio de un panorama descorazonador, por nuevo, por dif¨ªcil de manejar y por da?ino, compareci¨® Iniesta ante los medios para dar razones de lo que le est¨¢ pasando a un equipo al que le ha subido la temperatura llegado el momento crucial de la temporada. ¡°Es un golpe muy duro, nos duele en el alma. Estamos jodidos, porque somos los primeros que quer¨ªamos jugar la final de la Copa y porque nos elimin¨® el Madrid y en nuestro campo¡±, dijo el volante manchego, que rechaz¨® comparar la situaci¨®n por la que atraviesa el equipo con el ¨²ltimo a?o de la era Rijkaard, cuando ensimismado, perdi¨® su raz¨®n de ser. ¡°No tiene nada que ver, pero nada, en absoluto¡±, a?adi¨® Iniesta. ¡°Aqu¨ª no estamos solo para ganar el triplete y decir ?qu¨¦ buenos somos! Cuando vienen mal dadas hay que recuperarse y aprender de lo que ha sucedido¡±.
Iniesta neg¨® que el problema tenga que ver con Messi, por mucho que el argentino sume 49 de los 118 goles del Barcelona en lo que va de curso, o se justifique por la posici¨®n de falso extremo que se le insta a ocupar: ¡°Estoy obligado a dar lo mejor de m¨ª juegue donde juegue¡±. Ni siquiera cree que la ausencia de Vilanova como referente en el banquillo resuma los males del equipo. ¡°Es normal y l¨®gico que no sea f¨¢cil si no est¨¢ con nosotros; la figura del entrenador es la representaci¨®n de todo y en ese sentido es una dificultad a?adida¡±, dijo.
Contra las cuerdas en la Champions, l¨ªder a 12 puntos del segundo en la Liga, el Barcelona se exige recuperar el abc de su f¨²tbol con Messi enfermo, Xavi sin toque y el entrenador, con el presidente, en Nueva York. Con Villa aclamado por la hinchada para corregir al entrenador y Alexis fuera de la convocatoria. En definitiva, el Barcelona busca una br¨²jula, recuperar el norte.
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