Las protestas envuelven Bahr¨¦in ante la celebraci¨®n del Gran Premio de F-1
Como en los dos a?os previos, los activistas chi¨ªes piden la suspensi¨®n de la carrera del fin de semana
El regreso del Gran Premio de F¨®rmula 1 a Bahr¨¦in vuelve a poner de relieve las tensiones comunitarias dentro de ese peque?o reino del golfo P¨¦rsico. Dos a?os despu¨¦s de que la primavera ¨¢rabe diera alas a la mayor¨ªa chi¨ª para salir a la calle a pedir una mayor participaci¨®n en el Gobierno que controla una monarqu¨ªa sun¨ª, las distancias s¨®lo se han agrandado y los intentos de di¨¢logo siguen en un callej¨®n sin salida. Los activistas chi¨ªes han vuelto a pedir que se suspenda la cita deportiva, como sucediera en 2011 y 2012, pero sabedores de que eso no va a ocurrir, quieren aprovechar la atenci¨®n del mundo para hacer o¨ªr sus quejas.
Desde el pasado viernes y hasta el d¨ªa 19, cuando empiezan las pruebas libres en el circuito de Sakhir, al sur de Manama, el Movimiento 14 de Febrero ha convocado manifestaciones diarias que culminar¨¢n con una gran concentraci¨®n coincidiendo con la inauguraci¨®n del Gran Premio. Desde principios de mes, la polic¨ªa ha detenido a un centenar de personas durante las protestas, cuya represi¨®n ha dejado una treintena de heridos, seg¨²n fuentes de la oposici¨®n chi¨ª que sienten que su protesta ha sido olvidada por el resto del mundo.
El Movimiento 14 de Febrero ha convocado manifestaciones diarias que culminar¨¢n con una gran concentraci¨®n el d¨ªa del Gran Premio
¡°El reino de Bahr¨¦in va a garantizar la seguridad durante la F-1 y tomar¨¢ todas las medidas de precauci¨®n necesarias [para su buen desarrollo]¡±, anunci¨® la portavoz del Gobierno, Samira Rajab, al concluir el Consejo de Ministros del pasado domingo. Rajab insisti¨® en que ¡°la seguridad en Bahr¨¦in es muy tranquilizadora¡±. Tambi¨¦n dijo que la organizaci¨®n de esa prueba ¡°tiene una incidencia positiva sobre la econom¨ªa local¡±.
Sin duda es as¨ª. Aunque el Gobierno paga unos 40 millones de d¨®lares (30 millones de euros) anuales para albergar una de las 19 carreras del GP, es una inversi¨®n de la que espera obtener beneficios a trav¨¦s de los gastos de participantes y asistentes. Bahr¨¦in, que alberga la V flota estadounidense, era hasta el estallido de las protestas en 2011 un importante centro financiero y de turismo regional. Sus numerosos hoteles y restaurantes colgaban el cartel de completo durante la carrera, as¨ª como con motivo de diversas ferias y congresos. Aunque localizada, la inestabilidad ha hecho mella desde entonces.
Desde principios de mes, la polic¨ªa ha detenido a un centenar de personas durante las protestas
¡°Si la carrera sigue adelante, se llevar¨¢ a cabo en un pa¨ªs cuyo Gobierno sigue cometiendo graves violaciones de derechos humanos, desde detenciones arbitrarias hasta tortura¡±, asegura una carta enviada a los equipos participantes por cuatro ONG locales. Su texto denuncia que, ¡°las c¨¢rceles de Bahr¨¦in albergan a cientos de presos pol¨ªticos, la polic¨ªa usa fuerza excesiva con impunidad, y se ha privado de la ciudadan¨ªa a miembros de la oposici¨®n¡±.
El Gobierno niega esas acusaciones de detenciones arbitrarias y abusos de las fuerzas de seguridad. Sin embargo, recientes informes de organizaciones internacionales de derechos humanos respaldan las denuncias. Aunque la necesidad de recuperar la normalidad y la presi¨®n internacional han contribuido al lanzamiento de un ¡°di¨¢logo nacional¡±, siguen produci¨¦ndose enfrentamientos casi diarios entre j¨®venes que arrojan piedras y c¨®cteles molotov y polic¨ªas que disparan perdigones y gases lacrim¨®genos.
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