Serena es un torbellino

Un ligera brisa se filtra en el Foro It¨¢lico de Roma. Una leve r¨¢faga de viento que aumenta de frecuencia cuando el reloj alcanza el mediod¨ªa y se transforma en un torbellino cuando ella pone el primer pie sobre la arena, empu?a la raqueta y traza un rev¨¦s endiablado inalcanzable para su adversaria. La inercia lleva en volandas a Serena, la numero uno indiscutible, coronada hace una semana en Madrid y que ahora aspira a elevar el cetro en Roma. Divisa la de Florida a Azarenka, despliega un ejercicio huracanado de golpeos y bate a la bielorrusa por 6-1 y 6-3, en una hora y 33 minutos de juego. Un vendaval sobre la arcilla italiana.

Comienza el pulso con un traspi¨¦ Azarenka, que cede un break y alimenta el deseo de su rival por cerrar r¨¢pido la primera manga. Exhibe su artiller¨ªa Serena, poco precisa al servicio (45% de efectividad en el primer set), pero demoledora con su rev¨¦s a dos manos. Hay tensi¨®n sobre la tierra. Se manifiesta con el 3-1 y una bola de ruptura a favor de la estadounidense. Ah¨ª se exaspera Azarenka, la n¨²mero tres mundial. Grita, refunfu?a cada vez que una bola de su contrincante pisa una de las l¨ªneas de su territorio. Tambi¨¦n Serena, que acepta a rega?adientes una decisi¨®n de la juez. El toma y daca es hermoso. Es ahora Azarenka, agarrada a su orgullo, la que rompe el servicio y busca el equilibrio. No lo consigue. La norteamericana firma un juego en blanco y acto seguido otro break. Ya son cuatro. Se desata el tornado. Enrabietada, Azarenka lanza su raqueta a la superficie y se lleva la reprimenda de la grada romana.

Con el de Roma, Serena suma su t¨ªtulo WTA n¨²mero 51, el octavo sobre tierra batida

No cambia el panorama en el segundo set. Lo inicia Serena, que no ha cedido una sola manga en todo el torneo, con una furiosa embestida y un juego en blanco. Agresiva, abre la pista, mueve a la bielorrusa de un lado a otro de la pista y saca el ca?¨®n: 41 golpes ganadores, por solo 12 de Azarenka en todo el duelo. El espect¨¢culo no oculta, sin embargo, 31 errores no forzados entre ambas. El precio de un intercambio de poder a poder. No se rinde Azarenka, que brega y brega, saca el escudo, se rebela. Ans¨ªa su tercera celebraci¨®n de la temporada tras vencer en Australia y Doha. En este ¨²ltimo, precisamente, en la final ante Serena. Un passing cruzado y una doble falta, sin embargo, terminan por desarmarla. El resto es un coser y cantar para Serena, que suma su 24? triunfo consecutivo ¨Cla mejor racha de su carrera¨C, alza su quinto trofeo de la temporada ¨CBrisbane, Miami, Charleston, Madrid y Roma¨C y su t¨ªtulo WTA n¨²mero 51, el octavo sobre tierra batida.

Se resigna Azarenka, derrotada ante la estadounidense en 12 de las 14 veces en las que se han enfrentado. Sonr¨ªe euf¨®rica Serena, que dibuja una doble vuelta torera en el centro de la pista tras la victoria y se atreve con unas palabras en italiano. No ganaba Williams en la capital italiana desde 2002. Ese a?o, curiosamente, alzar¨ªa despu¨¦s la corona de Roland Garros, su siguiente gran objetivo, la siguiente parada del circuito. Despeja el camino la reina del tenis femenino, que ocurra lo que ocurra en Par¨ªs conservar¨¢ su trono y llegar¨¢ a Wimbledon en lo m¨¢s alto. ¡°He ganado todos los Grand Slam. Puede que solo una vez, pero no siento presi¨®n. En el pasado quiz¨¢, pero ahora no¡±, dice. Gira y gira Serena, todo felicidad. Es un torbellino.