Vuelo del Betis hacia Europa

En realidad, no hubo partido. El Betis regresa virtualmente a Europa por la puerta grande tras destrozar a un Zaragoza hundido, sin capacidad de reacci¨®n, con una defensa de plastilina. Fue superior el conjunto andaluz de principio a fin, impulsado por un Salva Sevilla estelar, extasiado el grupo con una grada entregada. En dos a?os, el Betis ha pasado de Segunda a volver pr¨¢cticamente a Europa al no tener por ahora el Rayo, octavo, la licencia UEFA. Toda una proeza de Pepe Mel y sus jugadores. Tambi¨¦n de una entidad que ha superado muchos problemas para regresar a la ¨¦lite. Nunca pudo el Zaragoza, invitado inc¨®modo en la fiesta verdiblanca. El panorama se presenta desolador para el cuadro ma?o. Acostumbrado a los milagros, tendr¨¢ que hacer otro en la ¨²ltima jornada de Liga, donde recibir¨¢ al Atl¨¦tico. El problema es que ya no depende de s¨ª mismo.

La cara de Manolo Jim¨¦nez, ya de por s¨ª sin¨®nimo de expresi¨®n adusta, era todo un poema. Heli¨®polis estall¨® a los 13 segundos. Fue el tiempo que tard¨® el Betis en hacer el primer gol del partido, una pu?alada a un equipo que se jugaba la vida y que se entreg¨® sin pelear. El tanto esboz¨® bien el estilo andaluz, alegre y directo, con tres delanteros natos y mucho toque en las botas de Salva Sevilla y Be?at. Una perfecta definici¨®n de Rub¨¦n Castro que mat¨® al Zaragoza, acongojado ante el festivo Heli¨®polis, sin aliento, con una zaga entregada a un tridente explosivo, bien lanzado por Salva. El propio Rub¨¦n pudo haber marcado el segundo, solo tras un gran pase de Nacho, pero el tanto no tard¨® en llegar. Otro bal¨®n de Salva al desmarque de Rub¨¦n, que ahora fue asistente del colombiano Pab¨®n.

Un chaparr¨®n de f¨²tbol al contragolpe que destroz¨® al Zaragoza y aup¨® al Betis a saborear el regreso al f¨²tbol continental. No hubo respuesta en el conjunto ma?o, sin f¨²tbol, sin capacidad en busca del espacio preciso para Postiga, su ¨²nico elemento incordiante.

Las diferencias se ampliaron a¨²n m¨¢s en la segunda mitad. Vol¨® el Betis con espacios por delante. Una autopista donde Salva Sevilla dibuj¨® balones excelentes para que Molina, Rub¨¦n Castro y el magn¨ªfico Pab¨®n vivieran una jornada feliz, pl¨¢cida, como la de un equipo que est¨¢ a punto de completar una temporada espl¨¦ndida. Tanta fue la diferencia, que el Zaragoza acab¨® entregado y fundido. Una goleada que dibuj¨® una enorme sonrisa en los aficionados verdiblancos.