Bale complica la empresa de Ancelotti
El gal¨¦s vuelve a sufrir molestias f¨ªsicas y se cae de la lista del Madrid ante el Copenhague
Gareth Bale, fichado hace un mes en el ¨²ltimo d¨ªa del mercado estival, puso patas arriba la labor que hab¨ªa estado desarrollando Carlo Ancelotti con el Madrid durante el verano. El gal¨¦s descuadr¨® los planes del entrenador italiano porque primero empuj¨® a ?zil a marcharse y porque desde que lleg¨® no ha dejado de sufrir problemas f¨ªsicos, o an¨ªmicos, seg¨²n las diversas fuentes del club. Ayer la versi¨®n oficial insisti¨® en que padece alguna dolencia muscular en el muslo izquierdo y que hoy le har¨¢n pruebas para determinar qu¨¦ tiene exactamente. Esto le impedir¨¢, una vez m¨¢s, debutar como titular en el Bernab¨¦u, donde esta noche el Madrid deber¨¢ resolver su crisis de juego con otros medios. El tiempo no espera por nadie en Chamart¨ªn, y menos por Ancelotti, a quien los hinchas ya pitaron el d¨ªa del derbi.
¡°Florentino es la persona m¨¢s importante del club¡±, dice el t¨¦cnico
Florentino P¨¦rez, el presidente, fue a buscar a Ancelotti a Par¨ªs para comprometerle a modificar de forma dr¨¢stica el estilo de juego. Quer¨ªa que el equipo pasara de organizarse en funci¨®n del contragolpe a hacerlo en funci¨®n de la posesi¨®n del bal¨®n. Si la tarea hubiera sido en sentido contrario habr¨ªa resultado m¨¢s sencilla, pero transitar del pelotazo al toque supon¨ªa un esfuerzo de sofisticaci¨®n que requer¨ªa unos plazos y unos instrumentos m¨¢s complejos. Ante todo precisaba de futbolistas con sentido asociativo y el mejor era ?zil. Pero ?zil, al conocer que el club fichar¨ªa a Bale por 91 o 101 millones de euros, se imagin¨® marginado y cuando le abrieron la puerta se fue sin dudarlo. La paradoja es que Bale, adem¨¢s de ser el jugador m¨¢s caro de la historia, es una bala. Corre mucho y es el atacante menos capaz de asociarse en una plantilla que se supon¨ªa que deb¨ªa hacer de la elaboraci¨®n su nuevo estilo.
La inmensa mayor¨ªa de los entrenadores de f¨²tbol hacen del ejercicio de su autoridad una cuesti¨®n de principios tramada de honor, ¨¦tica y liderazgo. Ancelotti es un caso aparte. El pragmatismo del italiano es c¨¦lebre en el peque?o mundo de la industria europea del f¨²tbol por su habilidad ¨²nica para someterse al dictado de los due?os de los clubes conservando un nivel de competencia elevado. Ning¨²n entrenador ha sido capaz de renunciar a m¨¢s prerrogativas propias y conservar al mismo tiempo la credibilidad suficiente ante los jugadores. Ancelotti navega como nadie entre dos aguas porque adem¨¢s consigue ¨¦xitos. Gan¨® Ligas en Italia, Inglaterra y Francia, y levant¨® dos Champions someti¨¦ndose a los dictados futbol¨ªsticos de algunas de las personalidades m¨¢s autoritarias del universo UEFA. La lista no habla de f¨²tbol. Habla de geopol¨ªtica: Moggi, Berlusconi, Abramovich y Al Khelaifi han encontrado en Ancelotti a un funcionario receptivo. Ahora, quien disfruta de sus servicios es Florentino P¨¦rez.
¡°En el intento de tener m¨¢s la posesi¨®n hemos perdido un poquito de equilibrio¡±
¡ªSe habla mucho de la influencia que tiene Florentino P¨¦rez en las decisiones que toma Carlo Ancelotti ¡ªle interpel¨® ayer un periodista en la conferencia de prensa¡ª. ?Usted c¨®mo recibe esto cuando lo lee o lo escucha? ?Qu¨¦ fichajes fueron peticiones suyas? ?Illarramendi, Isco, Bale¡?
¡ªCreo ¡ªrespondi¨® Carletto¡ª que Florentino P¨¦rez es la persona m¨¢s importante que hay en el Real Madrid. Ha hecho muchas cosas para traerme aqu¨ª y creo que es un presidente muy inteligente que me ha dado todas las oportunidades de trabajar. Cuando vamos a fichar a un jugador es porque todos estamos de acuerdo. Los fichajes de este mercado fueron muy buenos. Estoy muy contento porque llegaron jugadores muy importantes con mucha calidad.
Todos en Valdebebas saben que Ancelotti es un hombre con un poderoso sentido institucional, consciente de su poder limitado, dispuesto a considerar al presidente a la hora de administrar la plantilla, porque adem¨¢s P¨¦rez pag¨® siete millones de euros para sacarle del PSG. Se considera un simple t¨¦cnico, no un caudillo, y lo asume con una franqueza despojada de vanidad que asombra a los empleados y a los jugadores. Pero unos y otros dan por seguro que el italiano jam¨¢s habr¨ªa cambiado a ?zil por Bale.
Ahora, en plena angustia por la Liga que peligra, el p¨²blico y el presidente reclaman a Ancelotti que haga del Madrid el emporio del toque. Ayer el t¨¦cnico emiti¨® su veredicto. ¡°Nuestro problema¡±, dijo, ¡°es que todav¨ªa no hemos empezado a jugar con naturalidad. Es normal cuando haces cambios. Tienes que tomarte m¨¢s tiempo para que los jugadores se adapten. Creo que en el intento de tener m¨¢s la posesi¨®n hemos perdido un poquito de equilibrio y nos hemos debilitado defensivamente. Necesitamos buscar el equilibrio entre el f¨²tbol elaborado, en lo que debemos insistir, y la recuperaci¨®n. Nuestra recuperaci¨®n del bal¨®n no es buena, por esto empezamos siempre el juego muy atr¨¢s contra equipos compactos. As¨ª es dif¨ªcil encontrar una soluci¨®n ofensiva eficaz¡±.
Ancelotti observa que Jos¨¦ Mourinho, su predecesor, le dej¨® un equipo pensado para jugar sin pausa. ¡°Un equipo verticalizado¡±, que dicen los futbolistas del Madrid, sabedores de las limitaciones de Mou y comprensivos con las tribulaciones del nuevo jefe. El Madrid de Mourinho pas¨® por una crisis mucho peor hace un a?o pero el portugu¨¦s, a diferencia de Ancelotti, lanz¨® una cortina de humo para desviar la atenci¨®n. Ahora todo el mundo habla de f¨²tbol. Ahora todos se?alan al entrenador.
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