Diego Costa marca de noche y de d¨ªa

Las riadas de aficionados del Atl¨¦tico que bajaban al Manzanares dibujaban una sola cara. Un rostro orgulloso, pleno, confiado en un equipo en el que cree, que con el triunfo de ayer sostiene la mirada al Bar?a con los mismos triunfos. Y ah¨ª, en lo m¨¢s alto, Diego Costa, con 10 goles en ocho partidos y mirando por encima del hombro a Messi, ahora lesionado, en la tabla de goleadores.

Una calle poblada de hinchas puede ser una radiograf¨ªa amplia de todo un sentimiento. Era domingo ma?anero, madrile?o, de Rastro, ca?as y f¨²tbol. El costumbrismo destilaba por el Calder¨®n. El c¨¦sped bien cortado, regado, y un estadio lleno para sentir el cl¨ªmax que vive su equipo. El f¨²tbol es un estado de un ¨¢nimo no solo para los jugadores, tambi¨¦n para la grada. Los m¨¢s de 50.000 seguidores rojiblancos establecieron un tr¨¢fico de mensajes con sus futbolistas que compusieron ese momento que vive su equipo y sus jugadores. Fue as¨ª desde el minuto uno hasta el final porque se dieron todas las situaciones posibles que tantas veces han acabado en derrota. Penaltis fallados, ventaja c¨®moda reducida, apag¨®n final con Courtois evitando el empate y Simeone encendiendo al estadio al final.

En ese cruce de estados an¨ªmicos y momentos de forma surgieron por oposici¨®n Diego Costa y Villa. Costa se sobrepuso a un penalti extra?o que le detuvo Yoel. Fue fallar el lanzamiento y todo el estadio corear su nombre. Qued¨® un tanto aturdido el hombre que ha protagonizado la actualidad de la selecci¨®n espa?ola; ¡°la decisi¨®n est¨¢ tomada, ahora depende de la FIFA¡±, dijo sin a¨²n haberse puesto la camiseta. ¡°Me molest¨® fallarlo. Si hubiera habido otro penalti lo iba a tirar y lo iba a meter¡±, asever¨® con la seguridad de quien siente que fluye en armon¨ªa con el f¨²tbol y con la vida. Dos goles, ocho remates, el jugador de su equipo que en m¨¢s jugadas particip¨® junto a Koke (54) y, sobre todo una exhibici¨®n a manual abierto de controles, giros y desmarques. Un delantero total que se siente imparable, ya con 10 goles, una cifra que hasta ayer era su mejor marca en todo un curso.

M¨¢s duro y a la vez alentador debi¨® de ser lo de Villa, que antes de que Costa desperdiciara el penalti no pudo superar a Yoel en un mano a mano claro. Esa fue la primera de un carrusel de paradas meritorias de un portero que pareci¨® tan bueno bajo palos como espabilado para jugar al cruce al borde del ¨¢rea. M¨¢s n¨ªtida a¨²n fue la ocasi¨®n que tuvo El Guaje en el segundo tiempo. Costa esta vez le dej¨® solo en el punto de penalti y Villa realiz¨® uno de esos remates en los que el exceso de ajuste responde a esa desconfianza que embarga a los goleadores mal enrachados. La imagen siguiente fue la de un futbolista derrotado ante su falta de precisi¨®n, con el torso doblado, las manos en las rodillas y el tabl¨®n de los cambios con su dorsal. Fue entonces cuando el Calder¨®n le hizo sentir que est¨¢ ante una hinchada distinta, acostumbrada incluso a sostener por s¨ª sola al club en sus peores momentos. Se fue Villa dolido y lesionados, pero aclamado. Entr¨® ?liver, que ha regresado a la segunda fila. Estuvo pele¨®n, con detalles, pero alejado de Costa para acompa?ar las contras.

Tras fallar dos ocasiones, Villa se fue dolido, pero aclamado por la grada

En ese env¨ªo de mensajes entre grada y jugadores, fue Juanfran el primero en aparecer. Zigzague¨® rememorando sus tiempos de extremo y estuvo atento y oportuno para cerrar la banda y a sus centrales. Todo dentro de un dominio aplastante del Atl¨¦tico, que redujo al Celta durante 70 minutos a defenderse. Las faltas y c¨®rners a granel esta vez no le dieron r¨¦dito al equipo de Simeone, aunque fue tras un rechace ganado por Miranda como se origin¨® el primer gol. Cule¨® en la frontal del ¨¢rea, solt¨® un taconazo para Filipe Luis que romp¨ªa por el ¨¢rea y su centro lo remacharon entre Diego Costa y God¨ªn. Quiz¨¢ por el penalti errado, God¨ªn y la afici¨®n se lo otorgaron. El tanto culminaba 40 minutos de acoso.

El paso adelante para cerrar el partido fue encabezado por Diego Costa y Gabi, otro al que le fue concedido otro sentido tributo tras jugarse la rodilla en un intento por cortar un contragolpe. Antes puso uno de esos pases precisos de 40 metros para la poderosa carrera de Costa, que ril¨® en la carrera a su par y fusil¨® a Yoel con un latigazo r¨¢pido, seco y raso. Con dos goles de ventaja se resquebraj¨® el Atl¨¦tico, marc¨® Nolito y sufrieron mucho afici¨®n y jugadores. Pero ahora ganan.

Villa se cae de La Roja y le sustituye Michu

Terminado el partido y ya duchado, David Villa caminaba tranquilo por el c¨¦sped hacia el p¨¢rking de los jugadores, parec¨ªa procesar esos momentos en los que el f¨²tbol da la espalda. La ma?ana no le acompa?¨® deportivamente, fall¨® dos ocasiones claras y se le reprodujo una artritis en el tobillo izquierdo que le impide estar con la selecci¨®n para los partidos ante Bielorrusia y Georgia. Su lugar ser¨¢ ocupado por Michu, que ve as¨ª premiados sus m¨¦ritos goleadores en la Premier con el Swansea (27 goles en temporada y media). Del Bosque lleg¨® a desplazarse a Inglaterra la temporada pasada para verle en directo, pero nunca se concret¨® la llamada, que llega ahora, en medio de esos problemas que est¨¢ teniendo el seleccionador para encontrar un nueve que le llene a la espera de Diego Costa.

En ese corto paseo hasta el coche, Villa firm¨® camisetas y encontr¨® muy cerca de ¨¦l a los empleados del club, que trataban de animarle. Antes lo hab¨ªan hecho Simeone y Germ¨¢n Burgos y el estadio entero, que detect¨® que era el momento de ofrecerle ese apoyo incondicional que suele brindar por igual en la victoria y en la derrota cuando no hay nada de lo que sospechar.

No solo Villa sali¨® malparado del terreno de juego, tambi¨¦n se lastim¨® el capit¨¢n Gabi en el intento por cortar un contragolpe del Celta. Se le dobl¨® la rodilla izquierda en un gesto feo que pareci¨® anunciar una lesi¨®n grave y un escalofr¨ªo recorri¨® las gradas y el banquillo rojiblanco por la importancia capital que tiene en el juego y en el vestuario. Gabi termin¨® el partido, pero su cojera era visible mientras se marchaba del estadio cabizbajo de la mano de su hijo peque?o. ¡°Estoy bien, estoy bien¡±, repet¨ªa con poco ¨¢nimo a todo aquel que le preguntaba. Por la tarde fue sometido a unas pruebas que confirmaron que sufre un esguince de grado II en la rodilla. Aunque el club no ha querido dar un plazo oficial, si evoluciona con normalidad estar¨ªa un par de semanas de baja.

Ya en la sala de prensa, antes de que Simeone resumiera el partido ¡ª¡°el primer tiempo fue el mejor desde que soy entrenador del Atl¨¦tico¡±¡ª, Luis Enrique puntualiz¨® sin dudar: ¡°Por lo que le he visto hasta ahora sin duda es un candidato para luchar por la Liga. Es el rival m¨¢s poderoso al que nos hemos enfrentado. La Liga es muy larga y queda mucho campeonato, pero, si sigue as¨ª, ser¨ªa absurdo pensar que no es candidato¡±.

¡°Tuvimos un dominio total, con situaciones de gol muy numerosas y con mucha presi¨®n en campo rival. Nos sali¨® una primera parte casi perfecta¡±, matiz¨® Simeone sobre esos primeros 45 minutos en los que su equipo tuvo el 60% de la posesi¨®n.

Sobre la p¨¦rdida de control del partido que luego padeci¨® su equipo, dijo Simeone: ¡°No interpreto que haya sido un baj¨®n f¨ªsico nuestro, sino una virtud del Celta, que en la segunda parte entr¨® mejor en el partido y nos oblig¨® a ello¡±. Concluy¨® El Cholo con Diego Costa y su excepcional momento: ¡°Se lo ha ganado porque lo ha buscado¡±.