A bordo de un ¡®volvo¡¯

25 nudos de viento, sol, ola y 22 grados de temperatura brindaron las delicias de todos los participantes en la s¨¦ptima clase magistral de Movistar en Galicia.?

La vela oce¨¢nica ha regresado este s¨¢bado a Sanxenxo (Pontevedra) y lo ha hecho con la s¨¦ptima clase magistral de Movistar en Galicia y primera sobre navegaci¨®n oce¨¢nica. Las condiciones no pod¨ªan ser mejores: viento potente, nada de lluvia, temperatura agradable y mucha ola barriendo la cubierta: ingredientes perfectos para que los doce afortunados que lograron una plaza a trav¨¦s de la p¨¢gina web www.vive.movistar.es disfrutasen como nunca.

Probando el sabor de la vuelta al mundo

120 fueron las personas que se inscribieron para participar en esta clase magistral, con cabida para 12 participantes. Todos ellos estaban nerviosos y eran conscientes de que estaban ante una experiencia ¨²nica: ¡°Estas Master Class que est¨¢ llevando a cabo Movistar en Galicia, para alguien que le guste un poco la vela, son una gozada. Navegar un d¨ªa como hoy, con 25 nudos de viento, en el ¡®Telef¨®nica negro¡¯ es un lujo. Ir a estas velocidades a vela, no puedes hacerlo en un barco cualquiera. Es algo ¨²nico y una experiencia irrepetible¡±, comentaba Manuel, uno de los participante.

Un total de cuatro vueltas al mundo sumaban unos profesores de lujo para estos doce afortunados gallegos. Diego Fructuoso, Pablo Arrarte y Pablo Iglesias, competidores en las Volvo Ocean Race 2008-2009 y 2011-2012, junto a otros regatistas, ejerc¨ªan de maestros de ceremonias en el Real Club N¨¢utico de Sanxenxo, punto de encuentro de esta clase oce¨¢nica.

Ellos fueron los encargados de dar la bienvenida a unos ilusionados alumnos, que no s¨®lo pudieron ver c¨®mo se prepara la comida liofilizada que consumen los regatistas oce¨¢nicos sino tambi¨¦n probarla ellos mismos.

Trabajo a bordo para todos

En las aproximadamente seis horas de duraci¨®n de la clase, el "Telef¨®nica negro" naveg¨® por la r¨ªa de Pontevedra y los alrededores de la isla de Ons, que forma parte del Parque Nacional de las Islas Atl¨¢nticas. A bordo, dosis de adrenalina, pero tambi¨¦n de trabajo: ¡°La idea era que hicieran un poco de todo: ¡®conducir¡¯ alg¨²n rato y tambi¨¦n a darle al coffee [manivela] para subir las velas, por ejemplo. En estos barcos hay que trabajar a tope y est¨¢ claro que lo han podido ver¡±, conclu¨ªa Fructuoso.