El apag¨®n del 10

Primero con Pep Guardiola y despu¨¦s con Tito Vilanova, en los momentos en los que el juego del Barcelona se tornaba ret¨®rico, siempre estaba Leo Messi para romper la monoton¨ªa. El 10 acud¨ªa al rescate del equipo. Siempre cerca del a¨¦rea, al acecho; con la pelota atada al pie y la porter¨ªa incrustada en la mirada. El f¨²tbol del Barcelona se recreaba y la estrella argentina devoraba todos los r¨¦cords. Pero ahora, con un equipo m¨¢s ca¨®tico en el juego posicional, el punta anda suelto por el campo, m¨¢s cerca de la sala de m¨¢quinas, lejos del arco.

¡°Messi se transform¨® cuando aprendi¨® a manejar los espacios. Ah¨ª creci¨® como futbolista. Pas¨® de ser un definidor a un asistente¡±, argumenta C¨¦sar Luis Menotti. ¡°Si retrocede en la cancha, y nosotros tenemos presencia en ataque para que ¨¦l encuentre la descarga hacia adelante, no me preocupa¡±, interviene Tata Martino. ¡°En cambio, s¨ª me preocupa cuando damos por descontado que la jugada va a tener continuidad con ¨¦l y muchos de sus compa?eros superan la l¨ªnea de pase; entonces si se pierde el bal¨®n se generan espacios para la transici¨®n ofensiva del contrario¡±.

¡°Contra el Valencia perdi¨®, peligrosamente, m¨¢s de una pelota¡±, opina Ezequiel Fern¨¢ndez Moores, uno de los grandes periodistas argentinos. ¡°En esos momentos es cuando se pone tozudo y arriesga el bal¨®n en lugares dif¨ªciles. As¨ª fue tambi¨¦n su peor momento en la selecci¨®n argentina. Tambi¨¦n en los ¨²ltimos partidos la pelota iba mucho hacia arriba. Y ah¨ª es cuando a Messi le cuesta entrar en juego, necesita estar en contacto con el bal¨®n¡±. El argentino curiosamente pierde cada vez menos balones: 9,6 por partido, por 10,6 la pasada temporada y 13,7 la anterior. El problema es que ahora las p¨¦rdidas se producen en zonas m¨¢s comprometidas para el equipo.

Menotti: ¡°No est¨¢ tan chispeante, tan picante, quiz¨¢s descansa m¨¢s¡±

¡°En alg¨²n momento de los ¨²ltimos partidos, el equipo tir¨® muchos centros. Alves, Alexis, Pedro y Alba centraban. Me da la sensaci¨®n de que en pocos partidos se tiraron m¨¢s centros que en todo un a?o con Guardiola¡±, afirma Menotti. La estad¨ªstica dice que los azulgrana ponen 22 centros de media por partido cuando el curso pasado eran 15. ¡°Cuando est¨¢n bien Xavi, Iniesta, Busquets y Pedro, no hay por qu¨¦ tirar tantos centros¡±, rubrica el ext¨¦cnico.

Y Fern¨¢ndez Moores corrobora: ¡°Est¨¢ claro que ni Xavi ni Iniesta est¨¢n tan finos y esto es algo que tambi¨¦n puede afectar a Messi¡±. Y vuelve Menotti: ¡°El equipo tampoco est¨¢ muy calmo. Lo veo muy acelerado¡±. ¡°Tambi¨¦n perdi¨® sorpresa¡±, agrega el exentrenador del Barcelona y exseleccionador de Argentina. ¡°Cuando un equipo tiene la pelota debe tener calma y se ha perdido, quiz¨¢s, la continuaci¨®n del v¨¦rtigo cuando se tiene la pelota¡±.

¡°No es solo que Leo se tire m¨¢s atr¨¢s. No est¨¢ tan chispeante, tan picante. Puede ser que est¨¦ m¨¢s est¨¢tico, quiz¨¢s descansa m¨¢s de lo que corresponde en un partido¡±, razona Menotti. Messi toca la pelota 72 veces por partido, mientras que con Vilanova lo hac¨ªa 75 y 89 con Guardiola.

No piensa lo mismo Carlos Bilardo, director de las selecciones nacionales en Argentina. ¡°Por lo que veo en la televisi¨®n, que siempre es m¨¢s limitado, lo veo igual que antes. Juega en la misma posici¨®n y est¨¢ en el mismo nivel. Hablamos con ¨¦l hace poco y nos dijo que se encontraba bien¡±. Y Messi lo rectific¨® en una entrevista a la BBC. ¡°Estoy muy bien, lleno de energ¨ªa y con mucha ilusi¨®n. He podido volver a jugar despu¨¦s de mucho tiempo y estoy feliz con mi estado de forma actual¡±, dijo el 10.

Se vuelve tozudo cuando pierde la pelota y el equipo se excede en los centros

¡°Quiz¨¢s lo veo con cierta fatiga mental¡±, dice Menotti. ¡°Y me da la impresi¨®n que es por todo lo que ha pasado: las lesiones, la cantidad de partidos. A veces el asedio est¨¢ en la cabecita. La fatiga no es solo muscular¡±.

¡°Messi est¨¢ m¨¢s grande y m¨¢s estrella¡±, interviene Fern¨¢ndez Moores. ¡°Su vida pas¨® a ser algo m¨¢s que una pelota de f¨²tbol. No solo porque es padre. Todo lo que le ha pasado en los ¨²ltimos meses¡­ Estornuda y sale en los diarios¡±. Martino puntualiza: ¡°Cada vez que nos referimos a Messi no tenemos que buscar un titular. Si jug¨® atr¨¢s, si dio asistencias... Qu¨¦ tal si un par de d¨ªas lo dejamos tranquilo¡±.

¡°Recordar los titulares de prensa de los partidos de Messi en las escasas tres semanas desde su regreso invitar¨ªa a los periodistas a observarnos m¨¢s a nosotros que a Messi¡±, acaba Fern¨¢ndez Moores. ¡°Ha pasado de ser un asesino serial con el hambre intacta en su gran vuelta contra el Getafe a un genial pasador y ahora es un apagado. ?No estar¨ªamos diciendo acaso otra cosa si hubiesen entrado el tiro libre y la fenomenal volea ante la Real? Todo es demasiado categ¨®rico. El periodismo es el arte de la simplificaci¨®n¡±.

¡°Hablamos con ¨¦l hace poco y nos dijo que se encontraba bien¡±, cuenta Bilardo

La ¨²ltima sesi¨®n, sufrida el 10 de noviembre contra el Betis, incidi¨® en su rendimiento. Antes sumaba 14 goles y cinco asistencias en 14 partidos; despu¨¦s, cinco tantos y cinco asistencias en ocho encuentros. Nadie se olvida del Mundial de Brasil, una cita monumental para Messi, dispuesto a ser el nuevo Maradona.

¡°Tampoco hay que dramatizar, hace un par de partidos que est¨¢ con mala suerte. El f¨²tbol es un juego y el azar siempre est¨¢ presente¡±, cierra Menotti. No asiente su excompa?ero de trabajo ?ngel Cappa: ¡°Leo ha perdido esa pasi¨®n y locura por jugar¡±. Ahora, cuando se ha ganado a la hinchada argentina para la causa despu¨¦s de preguntarse por su ¨¦xito en el Bar?a, es la afici¨®n azulgrana la que se pregunta por su extrav¨ªo en el Camp Nou.