Un poco de Alexis S¨¢nchez es mucho
El delantero de Chile marca un gol y regala otro a Valdivia para doblegar a una Australia digna
Impresionados a¨²n por el descalabro del campe¨®n del Mundo en el otro partido de su grupo, Australia y Chile disputaron un partido cuyo atractivo hab¨ªa aumentado por la rotunda victoria de Holanda. No solo para los espa?oles, sino tambi¨¦n para los brasile?os, cuyos medios mostraron su preocupaci¨®n ante la eventualidad de que Espa?a se clasifique como segunda de grupo y el destino se?ale unos octavos de final no aconsejables para hipertensos.
La inc¨®gnita parec¨ªa despejarse muy pronto, 2-0 en el minuto 13, pero la renovada Australia, que ostenta el ¨²ltimo lugar (62) de las selecciones mundialistas en el escalaf¨®n de la FIFA, opuso resistencia a la engrasada selecci¨®n andina hasta el minuto 89. Con tres puntos en el bolsillo, Chile tiene el pr¨®ximo mi¨¦rcoles una oportunidad dorada de asestar la pu?alada definitiva a la selecci¨®n de Del Bosque. La presencia de Arturo Vidal ¡ª37 d¨ªas despu¨¦s de ser operado del menisco¡ª fue la gran sorpresa inicial de un encuentro muy colorido y caliente en las gradas, a 30 grados y con un 45% de humedad. Apenas hab¨ªan pasado los minutos de tanteo cuando Alexis S¨¢nchez resolvi¨® una jugada embarullada con un h¨¢bil toque; y dos minutos despu¨¦s, se deshizo con una media vuelta de un defensor en la banda derecha, avanz¨® raudo hasta la frontal del ¨¢rea y cedi¨® suavemente al Mago Valdivia, que remach¨® sin piedad a media altura. Explosi¨®n roja en las gradas. S¨¢nchez en su mejor versi¨®n, aunque durase 10 minutos.
Los aficionados chilenos se animaban incluso a corear unos ol¨¦s, quiz¨¢ prematuros porque quedaban 70 minutos. Australia intentaba desactivar el vendaval chileno con alg¨²n contragolpe a la espalda, pero mostraba poca precisi¨®n. De manera sorprendente, como sucede tantas veces en el f¨²tbol, Cahill remat¨® de cabeza a la media hora un centro aprovech¨¢ndose de su diferencia de altura con el improvisado central Medel y redujo distancias. Un testarazo imparable; el cuarto gol de Cahill en un Mundial.
El mazazo tuvo el mismo efecto que antes, pero a la inversa: Bravo salv¨® el empate solo un minuto despu¨¦s. Pero con paciencia y posesi¨®n, Chile logro contener la remontada. Hab¨ªa olfateado el peligro y adopt¨® una postura conservadora, lo justo para dormir un poco al partido hasta el descanso. La selecci¨®n australiana se sacudi¨® el dominio al comienzo de la segunda parte, unos minutos en los que emergi¨® de nuevo la figura de Bravo para salvar el empate con un parad¨®n espectacular, abajo y junto al poste, a un disparo de Bresciano tras otro gol de cabeza justamente anulado a Cahill.
Al cuarto de hora la joven estrella del Twente Felipe Guti¨¦rrez sustituy¨® a un Vidal que abandon¨® el campo con cara de preocupaci¨®n y tuvo un papel mucho m¨¢s discreto de lo habitual. Australia hab¨ªa equilibrado el partido, aunque Vargas casi anota el 3-1 en un bal¨®n que sac¨® Wilkinson antes de que cruzara la raya. El adelantamiento de l¨ªneas australiano detuvo las internadas de los laterales e incomod¨® al equipo chileno, que se desorden¨® y permiti¨® que el partido se descabalgase en una sucesi¨®n de ataques y contragolpes que favorec¨ªa la condici¨®n f¨ªsica de los australianos.
Sampaoli acept¨® el envite y reemplaz¨® a Valdivia por el r¨¢pido Beausejour. Chile se parti¨® por la mitad y trat¨® de resolver el resultado por la v¨ªa r¨¢pida. Australia sac¨® entonces a relucir su proverbial orden defensivo, ausente en la primera media hora, y complet¨® un segundo tiempo digno, aunque sin los detalles de calidad que quiz¨¢ le hubiesen permitido empatar. En el minuto 90, Beausejour hizo el 3-1 definitivo tras una parada de Ryan a disparo de Pinilla y llev¨® la esperanza a una selecci¨®n que infunde mucho respeto.
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