¡°Han cambiado las pistas, nuestra actitud y predisposici¨®n¡±
Feliciano L¨®pez y Roberto Bautista, coronados el s¨¢bado en hierba, reflexionan sobre qu¨¦ ha pasado para que un pa¨ªs que solo celebr¨® una Copa en c¨¦sped entre 1966 (el Wimbledon de Manolo Santana) y 2007 lleve ocho entre 2008 y 2014
Wimbledon, la catedral de la hierba, comienza este lunes tras un fin de semana sorprendente: por primera vez en la historia, dos tenistas nacidos en Espa?a, un pa¨ªs de jugadores al¨¦rgicos al c¨¦sped, ha celebrado dos t¨ªtulos en la superficie el mismo d¨ªa. Feliciano L¨®pez, de 32 a?os, gan¨® el de Eastbourne una semana despu¨¦s de tener punto de partido en la final del Queen¡¯s. Roberto Bautista, de 26, celebr¨® su primer trofeo como profesional en s-Hertogenbosch. Antes de que arranque la cita londinense, los dos responden al cuestionario de este peri¨®dico y reflexionan sobre lo que ha pasado para que un pa¨ªs que solo celebr¨® una Copa en hierba entre 1966 (el Wimbledon de Manolo Santana) y 2007 lleve ocho entre 2008 y 2014.
?Por qu¨¦ los espa?oles juegan ahora bien en una superficie que siempre se les dio mal? ?Por qu¨¦ esta generaci¨®n logra lo que no logr¨® ninguna desde la de Santana?
Feliciano L¨®pez . Se debe a la rapidez de la pista, que permite jugar m¨¢s, y a la actitud y predisposici¨®n de la generaci¨®n m¨¢s reciente. Antiguamente, el r¨¢nking no contaba como ahora, la media era muy distinta. Perder pronto en un torneo penalizaba. El tenista espa?ol que no se sent¨ªa c¨®modo aqu¨ª ni lo intentaba. Yo hice cuartos [en Wimbledon 2005]. Entonces, la gente vio que era m¨¢s posible, incluso jugadores m¨¢s mayores, como Carlos [Moy¨¤], al final de sus carreras se dieron cuenta de que pod¨ªan jugar. Ver que alguien lo hace te anima. Luego Rafa [Nadal], jugando desde el fondo de la pista, dio esperanza a la gente de que se pod¨ªa intentar y hacerlo mejor. La pista ha hecho mucho, como la predisposici¨®n de los jugadores y la importancia que tienen los grandes en el r¨¢nking: perderte Wimbledon porque no sea tu superficie predilecta ahora es una locura. Nadie se lo plantea. Antes no te penalizaba tanto.
Roberto Bautista. Yo tengo cerca a David [Ferrer], que hab¨ªa ganado dos veces en Holanda. Por mala suerte, ¨¦l no pudo estar, y¡ Desde hace a?os, cuando no entraba en el cuadro final de Wimbledon ven¨ªa a jugar la previa. Siempre he estado pisando la hierba, y ganando experiencia. El t¨ªtulo no es fruto de la casualidad. Ven¨ªa haciendo las cosas muy bien, en forma, con la confianza de haber ganado muchos partidos, lo que me hac¨ªa pensar que pod¨ªa tener buenas victorias en hierba. Mi primera semana¡ y he ganado.
?Qu¨¦ sensaci¨®n tiene uno cuando el contrario le ataca subiendo a la red, lo que ya casi solo se ve en hierba?
F. L.Una sensaci¨®n de agobio, de presi¨®n. A nadie le gusta. La gente sube a volear poco incluso en hierba. Con el saque, solo yo y pr¨¢cticamente nadie m¨¢s, porque Llodra ya no juega y Stepanek ya no lo hace tan seguido, porque quiz¨¢s el saque no le funcione tanto. Yo lo hago porque creo que es en lo que m¨¢s resolutivo me siento, de l¨ªnea de saque en adelante. All¨ª es donde m¨¢s c¨®modo me siento. La gente intenta ser m¨¢s agresiva al jugar en hierba, pero cuando llega la competici¨®n, vuelve a lo que sabe hacer sin querer. Antes era obligatorio sacar y subir. Ahora te permite jugar tu juego m¨¢s tranquilo desde el fondo.
R. B.La sensaci¨®n es de presi¨®n. En cuartos jugu¨¦ contra Mahut, un especialista en hierba, y se me ven¨ªa bastante para arriba. Complicado. Presiona. Fue un punto de inflexi¨®n. Me dije: ¡®Si he superado este partido, puedo tener una gran semana¡¯
?Les da pena que la superficie ya permita jugar parecido a tierra o cemento, desde atr¨¢s?
R. B.Yo he demostrado que sin tener un saque de 231 kil¨®metros por hora se puede ganar un torneo en hierba, desde el fondo de la pista. Aqu¨ª uso bien los efectos en el saque, que hace m¨¢s da?o que en otras superficies. En mi caso, mis botes son planos, corren, van con menos vueltas de lo normal. Son golpes que en pistas de hierba y r¨¢pidas, al botar, deslizan un poco m¨¢s, y hacen da?o. Las cosas han cambiado. Wimbledon est¨¢ m¨¢s lento que antes. Todos intentan utilizar el mismo sistema que el resto del a?o en las otras superficies. Todo el mundo juega desde el fondo y muy pocos hacen saque-red solo por estar en hierba.
F. L.Yo soy m¨¢s tradicional, nost¨¢lgico, lo que me gusta de este torneo es precisamente eso, que para triunfar aqu¨ª haya que jugar de una manera distinta. Eso, con otras miles de cosas, es lo que lo hace m¨¢s bonito Wimbledon. Otros piensan que as¨ª se ve m¨¢s tenis y que antes solo hab¨ªa saques. El t¨¦rmino medio es lo mejor. A m¨ª lo que me gusta es la variedad en el juego. Igualando la velocidad de las superficies creas un prototipo de jugador muy parecido, todos juegan m¨¢s o menos igual. Lo bonito es tener tenistas de ataque, otros de defensa¡ aunque Wimbledon sigue manteniendo un poco esa diferencia con los dem¨¢s, todav¨ªa se ven cosas diferentes en la hierba. La hierba es ¨²nica. Especial. La primera vez que jugu¨¦ not¨¦ que era perfecta. La bola bota m¨¢s baja de lo normal, puedo jugar mis golpes que m¨¢s da?o hacen y mi saque hacen mucho da?o. Me beneficia. Lo vi en el primer Wimbledon.
?Qu¨¦ significa este t¨ªtulo justo antes de Wimbledon?
R. B.El t¨ªtulo no me cambia mucho. Pienso seguir centrado en trabajar, en ir con ilusi¨®n a los torneos, a dar el m¨¢ximo. S¨¦ que voy a tener mis dificultades en el primer partido, creo que estoy prepararlo para superarlas y hacer un buen torneo.
F. L.Se disfruta mucho m¨¢s, se saborea con mi edad. Si me dijeran que con 32 a?os para 33 estar¨ªa jugando como ahora, no me lo creer¨ªa. Estoy muy contento. Es un momento muy bueno que hay que disfrutar. Ojal¨¢ dure muchos a?os, porque estoy fuerte, sano, pero como nunca sabes qu¨¦ te va a deparar el destino¡ No hay mejor preparaci¨®n para Wimbledon que jugar los partidos que he jugado y encima ganarlos. Llego con la tranquilidad de saber que he hecho las cosas bien y que puedo jugar bien aqu¨ª tambi¨¦n. Te reconforta y tranquilizan dos semanas buenas en una superficie at¨ªpica. Luego, cada d¨ªa es una batalla. Entro con una dosis de confianza mucho m¨¢s grande¡. Pero eso no me asegura que vaya a jugar un huevo.
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