La victoria en lengua mexicana
La emoci¨®n del triunfo en una cantina palabra por palabra
Cantina El Le¨®n de oro. M¨¦xico DF.
Afuera llueve. La cantina est¨¢ llena. Tres de la tarde.
Minuto 7. Los croatas se acercan a la porter¨ªa.
??Ay g¨¹ey!! ?Tarjeta!, ?bien, bien!
El portero rival se dispone a sacar de puerta.
?Puuto, puuuto!
El portero, que seguramente no entiende lo que significa esa palabra que tanto ha incomodado a la FIFA, saca de puerta. Despu¨¦s un jugador mexicano pierde un bal¨®n f¨¢cil y en El Le¨®n de oro lo increpan sin misericordia.
??Pendejazo!!
Croacia se acerca de nuevo. Minuto 12. Un se?ora cruza los dedos.
Un croata centra desde la derecha.
?Noooo! ¨Cdice esa se?ora¨C. ?C¨ªscala! ?C¨ªscala!
M¨¢rquez despeja de cabeza. La se?ora remata el conjuro de los dedos cruzados.
?C¨ªscalo! ?C¨ªscalo diablo panz¨®n!
Un comensal pide una bebida para ir digiriendo la tensi¨®n.
Whisky, etiqueta roja.
Herrera remata al larguero dese fuera del ¨¢rea.
Tenemos caldo de camar¨®n, sopa de almeja y paella ¨Cdice un mesero inmutable, sin dejarse llevar por la tensi¨®n general; y pronto se corrige¨C: No, la paella no nos queda. Tenemos espinazo de cerdo.
El portero croata vuelve a sacar. Vuelven a llamarle eso en la cantina. Y uno de los clientes explica en su mesa que puto no es un sin¨®nimo despectivo de gay sino una herencia de una lengua ind¨ªgena.
Puto viene de putotz¨ªn, del nauhatl, y significa: despejas de la chingada.
Minuto 19. El delantero Oribe Peralta tiene una ocasi¨®n. La ocasi¨®n pasa.
Pendejazo ¨Cle dicen tambi¨¦n a Peralta.
Jugada de Croacia algo peligrosa.
?Ay, cabr¨®n!
El mesero repite de nuevo que se le acab¨® la paella.
Sabes qu¨¦ primo ¨Cle contesta el cliente¨C, te encargo mejor unos pulpos a la gallega, y de una vez m¨¢ndame otro whisky, dos whiskies; cuando traigas los pulpos me traes dos whiskies.
En otra mesa: ?C¨®mo est¨¢n los chicharrones!
En otra mesa m¨¢s: Un golecito nuestro y le pongo Croacia a mi hija¡
Zancadilla en medio campo a un jugador mexicano.
?Puuuto, tarjeta cabr¨®n, vamos muchachos!
Croacia saca una falta cerca del ¨¢rea mexicana.
??C¨ªscalo, cachito, c¨ªscalo!!
El mesero inmutable regresa.
Disculpe, estamos colapsando. ?Qu¨¦ le debo?
Deb¨ªa dos whiskies y unos pulpos a la gallega.
Es el minuto 44, una mujer se levanta de la mesa y la gente que est¨¢ con ella la abronca por estorbar la vista de la tele.
No me rega?en, chinga.
Se ha terminado la primera parte.
Cantina Le¨®n de Oro. M¨¦xico DF. Pues ya no llueve tanto.
Empieza la segunda parte y en una mesa hablan de que en el otro partido del grupo, Brasil gana sin problemas a los africanos.
Camer¨²n dimiti¨®, ta¡¯ cabr¨®n, pierde 3-1.
La defensa de M¨¦xico saca con problemas un bal¨®n de su ¨¢rea y una mujer les llama ??chihuahuas!!
En la tele enfocan a un aficionado mexicano orondo que se est¨¢ quedando dormido en su butaca del estadio de Recife en medio de un momento de m¨¢xima tensi¨®n nacional.
Ovaci¨®n general en El Le¨®n de oro al aficionado que se queda dormido.
Giovanni dos Santos ha perdido un bal¨®n.
Pinche Gio¡
El portero croata vuelve a sacar.
Y vuelven a decirle lo de puuuuto.
Y M¨¦xico sigue empatando. Y un joven pide un Don Julio reposado.
Minuto 58. Un croata le hace falta a un mexicano saltando sobre ¨¦l como si fuese una clase de educaci¨®n f¨ªsica.
??Eso es bullying cabr¨®n!!
Entra en el campo Javier Chicharito Hern¨¢ndez.
?Vamos Chicharito!
?Ah¨ª va el pinche Ch¨ªcharo!
En la tele enfocan a una se?ora mexicana rezando en el estadio de Recife. De nuevo, ovaci¨®n general en El Le¨®n de oro, acompa?ada por la voz destacada de un cliente que con cierto cari?o le dice ??pinche vieja!!
Mano de un croata dentro del ¨¢rea. Ira en la cantina. Minuto 63.
???Es mano cabr¨®n, es mano hijodesu¡, no-mames-est¨¢-cabr¨®n, es mano puto, pinche robo¡!!!
El capit¨¢n de meseros, supervisor de los meseros de la cantina, se acerca a una mesa con solemnidad, porque un capit¨¢n de meseros no pierde el temple ni por una Copa del Mundo, viene serio, caballeroso, con el pelo brillante peinado hacia atr¨¢s, y le pregunta a sus comensales hist¨¦ricos.
?Por aqu¨ª todo bien?
Todo bien. Y m¨¢s a¨²n poco despu¨¦s cuando M¨¢rquez marca el 1-0 en el minuto 71, y en todas las mesas saltan gritando gol mientras el Piojo, Miguel Herrera, el entrenador de M¨¦xico, un tipo fuertote de estatura corta, eclosiona en la pantalla.
Ya cuando a los tres minutos M¨¦xico mete el segundo, la cantina entra en trance y en una mesa se abrazan cuatro tipos entre los 30 y los 40 a?os uniformados de pantal¨®n, camisa y corbata, que es lo que en este pa¨ªs se conoce como un God¨ªnez, o un oficinista. Pues eso: cuatro God¨ªnez se abrazan en trance.
Entonces el grito patriota en El Le¨®n de oro.
??M¨¦-xi-co!! ??M¨¦-xi-co!! ??M¨¦-xi-co!!
Y otro mesero que llega, tranquilo, protegido por su oficio de toda turbulencia emocional, y sirve en una mesa un nuevo juego platos y cubiertos para una orden de quesadillas que dentro de poco va a salir de la cocina.
Y en la pantalla, Aguilar, un futbolista mexicano, se lanza sobre el Piojo para celebrar el segundo y tumba a su entrenador como en un combate de lucha libre.
Obviamente, en El Le¨®n de oro, la simp¨¢tica ca¨ªda al suelo del Piojo ext¨¢tico merece el m¨¢ximo nivel de aprobaci¨®n popular.
El tercer gol de M¨¦xico llega en el minuto 81. Lo marca Javier Hern¨¢ndez.
En medio del ruido sordo de la clientela, que celebra desatada el tanto de un futbolista que lleva con orgullo el apodo de un guisante, en la tele aparece la imagen de un rubia aficionada croata, bella pero con el rostro helado por la derrota, y pronto en otra imagen aparece la cara del Piojo, incontenible, el cuello hinchado, los ojos plet¨®ricos: un desaf¨ªo mundialista a la tensi¨®n arterial.
M¨¦xico se va a clasificar. M¨¦xico est¨¢ feliz.
Y en el minuto 87, a un croata cabreado por la derrota se le ocurre llamarle puto a Rafa M¨¢rquez, el capit¨¢n de M¨¦xico. Se ve c¨®mo se lo dice en la televisi¨®n.
M¨¢rquez se r¨ªe.
Al menos le hubiera dicho pinche puto ¨Cdice una mujer en la cantina.
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