La alternativa Valverde

Antes de que empezara el Tour, algunas noches Alberto Contador se despertaba sobresaltado. Hab¨ªa so?ado que durante la carrera sufr¨ªa un percance y que todas sus esperanzas de victoria desaparec¨ªan. ¡°Pero entonces me daba cuenta de que hab¨ªa sido una pesadilla y volv¨ªa a quedarme dormido. Ayer, no. Anoche me despert¨¦ muchas veces y no, y comprobaba que lo que me hab¨ªa ocurrido no hab¨ªa sido un sue?o, que mi Tour se hab¨ªa acabado de verdad. Me dol¨ªa la pierna, no pod¨ªa girarme en la cama. Y no pod¨ªa volver a dormirme. He dormido fatal¡±.

Hasta ahora ha sido un Tour at¨ªpico, de trampas y emboscadas" Jos¨¦ Luis Arrieta, director del equipo Movistar

Contador habl¨® as¨ª antes de partir a Madrid, donde decidir¨ªa cu¨¢l es la forma m¨¢s r¨¢pida de recuperarse de su lesi¨®n de rodilla. Los m¨¦dicos constataron que lo que ten¨ªa no era una fractura sino una fisura y que por tanto no tendr¨¢ que pasar por el quir¨®fano aunque le mantedr¨¢ 15 d¨ªas apartado de la bicicleta. Detr¨¢s, descansando en la capital del Franco Condado, la tierra de Jean de Gribaldy, dej¨® al Tour, que, con un italiano de amarillo s¨®lido, Nibali, no mira atr¨¢s, no espera a los ca¨ªdos.

Dej¨® Contador el Tour, y en Francia de repente se fueron las lluvias y las nieblas y luci¨® el sol fuerte. Y mirando a su sombra bien definida en el parking de su feo hotel, el director de su equipo, Bjarne Riis, clamaba: ¡°Esto es un desastre¡±. El dan¨¦s quiere que Contador vuelva a correr cuanto antes, que dispute la Vuelta (algo que consideran casi imposible los m¨¦dicos), que encuentre un objetivo para recuperarse del golpe moral, m¨¢s grande porque estaba convencido de su victoria. ¡°Tal como estaba, en la etapa en la que se cay¨®, Contador, que iba a atacar, le habr¨ªa sacado al menos minuto y medio a Nibali¡­¡±, dice Riis. ¡°Ha superado muchos golpes y no dudo de su car¨¢cter, de su fuerza para recuperarse. Y el a?o que viene volver¨¢ a estar preparado. Pero es un desastre¡­¡±.

Y en otro parking, en otro hotel, Alejandro Valverde, tercero en la general, a 2m 47s de Nibali, dec¨ªa: ¡°Se puede ganar el Tour¡±. Como si fuera un poeta, el poeta del pedal, Valverde cuenta que su cuerpo se deja guiar por sus sensaciones y que pese a que aparentemente en los d¨ªas anteriores su rendimiento ha abierto dudas, sus sensaciones son buenas. ¡°He corrido muy poco este a?o, as¨ª que, en teor¨ªa, tengo que ir a m¨¢s o mantenerme. Y conf¨ªo mucho en mi equipo, y en el calor¡±, dice Valverde, de la seca y calurosa Murcia, que si a algo ha achacado su falta de respuesta buena a los demarrajes de Contador o Nibali ha sido a la lluvia, a la humedad.

Antes de empezar el Tour, Valverde dijo que aspiraba a un puesto en el podio y que quiz¨¢s Froome y Contador eran superiores. Desaparecidos los dos, a Valverde no le queda m¨¢s que aspirar a la victoria. Y a la victoria tambi¨¦n espera su director, Jos¨¦ Luis Arrieta, quien hace solo dos meses estaba en una situaci¨®n similar, con un l¨ªder colombiano, Nairo Quintana, aspirando a ganar el Giro. Y lo gan¨®. ¡°Y con Nairo llegamos a estar m¨¢s lejos del liderato, a m¨¢s de tres minutos de Ur¨¢n¡±, dice Arrieta, quien tambi¨¦n espera que el calor sea decisivo. ¡°El calor nos ayudar¨¢ y la entrada del Tour en su fase cl¨¢sica, en la de los grandes y largos puertos alpinos y pirenaicos, de estrategias de largo alcance¡±, dice el t¨¦cnico navarro. ¡°Hasta ahora ha sido un Tour at¨ªpico, de trampas y emboscadas, de carreteras estrechas y peligrosas, carreteras rurales por las que pasan camiones y tractores perdiendo gasoil. Y de lluvia. Y de ca¨ªdas excesivas y a veces inevitables¡±, dice Arrieta. ¡°Y Alejandro ya ha pagado su cuota de mala suerte. Ha tocado el suelo y ha tenido que hacer todo el pav¨¦s, 70 kil¨®metros, en una bicicleta m¨¢s peque?a que su talla. Y claro que se puede ganar el Tour¡±.

Tal como estaba, en la etapa en la que se cay¨®, Contador, que iba a atacar, le habr¨ªa sacado al menos minuto y medio a Nibali" Bjarne Riis

De las capacidades t¨¦cnicas y cicl¨ªsticas de Valverde, de su clase, pocos dudan, pero s¨ª de su capacidad para mantener la concentraci¨®n durante tres semanas, para no despistarse por el vuelo de cualquier mosca que revolotee por el pelot¨®n. ¡°No es Nairo, evidentemente, quien tiene sobre todo una gran capacidad de an¨¢lisis, para pararse despu¨¦s de cada incidente y calcular y meditar qu¨¦ es lo mejor que se puede hacer. Alejandro quiz¨¢s es m¨¢s ni?o en todo. Cuando sufre un percance reacciona a veces sin pensar en las consecuencias¡±, dice Arrieta. ¡°Pero la capacidad de ambos para soldar al equipo a su alrededor, para ser l¨ªderes, es similar. Carga desde siempre con el sambenito de ciclista despistado, pero este Tour no se ha descentrado. Ha corrido siempre delante. Y aunque el equipo no tenga tantos nombres como otros, es un equipo de verdad. Porque si algo distingue al Movistar es ese esp¨ªritu: todos los corredores lo dan todo¡±.

Por detr¨¢s de Valverde, cercanos en la general, ya se han situado los j¨®venes franceses, Pinot y Bardet. ¡°Este a?o correr¨¢n para asegurar, pero en el futuro ser¨¢n los rivales de Nairo. Son ya su generaci¨®n¡±, dice Arrieta. Por delante, Porte, a solo 24s, y Nibali, el italiano que quiere terminar el a?o siendo a la vez Pantani, el ¨²ltimo italiano que gan¨® el Tour, hace 16 a?os, y Gimondi, el ¨²nico que ha ganado Giro, Vuelta y Tour. ¡°Y no me fiar¨¦ de nadie¡±, dice. ¡°En la Vuelta pasada, me confi¨¦ y al final me gan¨® Horner por 37s. En el Tour no pasar¨¢¡±.